ABC MADRID 28-04-2013 página 94

94 DEPORTES Liga BBVA Jornada 33 DOMINGO, 28 DE ABRIL DE 2013 abc. es deportes ABC ARREBATADO Di María Dio el primer gol blanco, marcó el segundo y está en forma para el martes Di María celebra con Morata el gol del triunfo madridista AFP TOMÁS GONZÁLEZ- MARTÍN MADRID Jugaba Mourinho con el equipo B y el entrenador apeló al espíritu del Real Madrid para cubrir con voluntad la falta de futbolistas titulares como Cristiano, Ozil, Xabi, Ramos, Varane y Coentrao. Sí jugó otro hombre importante de l once habitual, Di María. Tenía cuentas pendientes por saldar. Con el Madrid y consigo mismo. No le han salido las cosas a lo largo de la temporada. Se resarció en el Calderón. Sacó la falta del 1- 1 y anotó el 1- 2 con un toque de distinción. El conjunto blanco mantuvo su racha de catorce años sin perder con el Atlético. Di María aplicó la norma. El argentino llevaba una temporada irregular, vencido por las lesiones. Sus bajas suscitaron constantemente una falta de ritmo de competición que tardaba en recuperar. El Fideo volvía a jugar y no era el de antes. No tenía las revoluciones que le hicieron grande el año pasado. No corría con la misma velocidad. Y no conseguía desbordar a los rivales, que era el sello que le elevó a la titularidad desde que fichó en 2010. Ángel perdió confianza. Dejó de intentar regates y se dedicó a centrar bien. Pero eso no era suficiente. Si Di María saltaba al campo era para imponer su finta y su velocidad. Para inyectar ritmo al fútbol del Real Madrid. siera. Las continuas entradas y salidas del once, producto de sus recaídas musculares, le cortaron la buena forma. No era fácil reeditar su punta de rapidez. Anoche, en el Calderón, contestó a sus críticos. Fue decisivo en los dos goles. El hombre que metió miedo al Atlético con sus arrancadas. La verdad es que necesitaba el gol. Se lo dedico a mis hijas y a mi mujer Ha sido padre hace unos días. Ayer, Ángel volvió a ser el Di María incisivo, cortante, peligroso. En el momento justo. Cuando el equipo blanco se juega toda la temporada en noventa minutos, frente al Borussia Dortmund, el martes. Di María ha cogido confianza cuando más es necesario. Anoche le salieron los regates. Los volverá a intentar en la Liga de Campeones. El Madrid los necesita. Vamos a intentarlo todo en el partido de la Champions. No damos nada por perdido Tiene la oportunidad de superar las críticas y ganarse de nuevo a la afición. Cuando más se espera de él. LLÁMALO X POR PACO GONZÁLEZ Del nombre no se vive E Me hacía falta el gol Le molestó que se dijera que desde que renovó ya no rendía igual. Era muy injusto. No era porque no qui- mpieza la semana de las remontadas. Las remontadas, valiosísimo invento de la prensa que, en ocasiones, se produce. Para eso tiene que creer primero la afición ciegamente y luego el equipo más ciegamente Las remontadas hacen falta cuando antes se ha producido una supercantada. En este caso dos. La del Barça y la de Madrid. En la del Barça es evidente que se produjo un exceso de fe en Messi. Como si su presencia mermado de salud fuera suficiente para ganar o empatar un partido. Y del nombre, sólo del nombre, ya no se vive. No si enfrente hay un buen equipo. Messi no podía ni esprintar y nadie se atrevió a quitarle, ni él levantó la mano para advertírselo a su entrenador. No es ir de sobrao pero se parece. En la del Madrid es evidente que hubo falta de preparación del partido. El Dortmund propuso el mismo partido que en octubre y el Madrid cometió los mismos fallos. Uno espera del mejor entrenador del mundo (y del mejor pagado) que tenga preparado algo distinto. Pero uno no puede vivir del nombre. No en la Champions, que es donde hay que demostrar que uno es el Special One porque para que el Madrid pelee por la Liga y quede entre los dos primeros, si se pone de entrenadora a Lady Gaga, también vale. Ahora el Barça acomete un imposible y el Madrid casi. Ahora el Barça esta en manos de una casualidad cósmica en la que nadie cree, y el Madrid en manos del Bernabéu. Dice Manolo Sanchis que vivió aquellas remontadas que cuando el Bernabéu se pone cabezón el Madrid lo logra. En ambos casos convendría que Messi jugara sólo si esta bien y que Mou preparara otro partido, porque si no, ni el cosmos ni el Bernabéu obrarán el milagro. Y de fondo dos problemas, el Barça se ha creído tan perfecto que se ha perdido por el camino. Y el Madrid ha creído que el Barça era tan perfecto que creó un proyecto anti- Barça olvidando que hay más rivales, y contra ellos no se puede jugar a lo mismo. Se vigilan tanto que siempre viene uno por detrás y les gana el sprint.