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ABC MADRID 25-02-2013 página 51
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  • EdiciónABC, MADRID
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ABC LUNES, 25 DE FEBRERO DE 2013 abc. es economia ECONOMÍA 51 JUAN VELARDE FUENTES LAS REACCIONES ANTE MEDIDAS OBLIGADAS Aranguren indicaba que la democracia es más una aspiración que una posesión, y que hay que entenderla como una conquista de cada día festaciones, huelgas, protestas variadas que evidentemente son abundantes. Pasando a la solución de otro problema, ¿será posible modificar a fondo un aspecto muy importante de nuestro Estado de bienestar, la cuestión de la asistencia sanitaria? Basta transcribir unos párrafos del Libro Blanco del Sistema Sanitario Español coordinado por Francisco J. Rubia Vila (Academia Europea de Ciencias y Artes, España, 2011) He aquí que la presión sociopolítica de las autonomías ha logrado, y parece que de modo irreversible, transferir el control del Sistema hacia cada una de las dieci- C onviene volver a recalcar algo que, por ejemplo, en la lejanía del 1 de mayo de 2004, señalé en una Tercera de ABC bajo el título de Días difíciles para le economía española Los economistas, antes de la crisis de 20072008, ya avisábamos que la pésima política económica que se desarrollaba, conducía, forzosamente, a una depresión. Del mismo modo, al llegar el final del año 2011, indicábamos que tenían que ponerse en acción unas medidas, no precisamente suaves, para lograr recuperar una marcha aceptable que permitiese mejorar la dura coyuntura que se vivía. Automáticamente, frente a estas medidas, han surgido una serie de obstáculos, aplaudidos más de una vez por partidos, sindicatos y organizaciones de indignados -para seguir el epíteto que puso en acción Hessel, al margen de toda explicación racional. Señalemos cuatro indispensables. Si no se liquida la rigidez del mercado laboral, no hay solución para el desempleo. La dificultad se halla en una masa creciente, aparentemente protectora, que se ha derivado de una serie de medidas iniciadas por los ministros Largo Caballero y Girón, y que se culminaron en los primeros años de la Administración de Rodríguez Zapatero. Las características de nuestra curva de Okun muestran hasta qué punto todo esto es perturbador. Pero ¿cómo desarraigar la fortaleza social que tienen en la actualidad Comisiones Obreras y la UGT, las cuales, por otro lado, han pasado a establecer lazos solidísimos con el PSOE? La defensa del statu quo no tiene respaldos técnicos, pero provocan reacciones sociales- -mani- que sólo se aliviaba con el único frente comprador en un Sistema Nacional de Salud unitario. El envejecimiento de la población, la ruptura cada vez más amplia de los lazos de la familia tradicional española- -léase el trabajo dirigido por María Teresa López, Mujer e igualdad de trato. Análisis de la maternidad en la Unión Europea (Cinca, 2011) cuya evidente crisis obliga a prestar asistencia sanitaria más amplia, y por ello más costosa, además de la existencia de unos cinco millones de inmigrantes, aparte del llamado turismo sanitario, son adicionales elementos encarecedores. A ello se agrega que la dispersión de centros para atenciones, que se efectuarían perfectamente con un mucho menor número, ignorando, pues, lo que significan las economías de escala, constituyen así otro impulso encarecedor adicional. Pero ¡cuidado con la más pequeña alteración de lo que existe! Se considera un atentado, y las protestas abundan. En tercer lugar, es evidente que es pre- CARBAJO siete. Se hace caso omiso de que es encarecedora la ruptura en 17 entidades de compra de productos que tienen un alto grado de monopolio- -recuérdese el dictamen británico de lucha contra los monopolios en el caso del librium, Reformas imprescindibles Muchas medidas son necesarias, pero conllevan multitud de reacciones sociales en su contra ciso llevar adelante una reforma tributaria, si se quiere dejar atrás la crisis. Por supuesto que es preciso reducir el gasto público, y hacer frente a la complicación surgida porque ante la población catalana se agitan los datos, iniciados con los estudios del profesor Trías Fargas, de la balanza fiscal de Cataluña. Si triunfase esta línea, subyacente en todos los planteamientos catalanistas actuales, es evidente que la perturbación fiscal española sería considerable y, con ello la racionalidad de cualquier seria reforma tributaria, tal como la que ha diseñado magistralmente el profesor Lagares. Pero lo urgentísimo es la reducción del gasto público, para situarnos en el nivel medio de los países de la OCDE con mayores crecimientos de su producción. Todo esto, mezclado con la subida de ciertos impuestos ante el agobio de la Hacienda estatal, da la impresión de ser terreno abonado para que fáciles demagogias muevan a la sociedad española a intentar con sus protestas, a dejar a un lado lo que es por fuerza absolutamente necesario para esquivar la crisis. Pero también, cuarta cuestión, es preciso cortar de raíz las políticas intervencionistas de las autonomías, que han roto la unidad del mercado español. El choque con las autonomías, los partidos políticos regionales y multitud de intereses- -sin ir más lejos, recuérdense las disposiciones sobre el pequeño comercio que convierten ese deseo en una muy difícil realidad. Estas cuatro medidas, y muchas otras, son absolutamente necesarias, pero conllevan multitud de reacciones sociales en su contra. Ello muestra, como Javier Muguerza señalaba en la revista Isagoris que Aranguren indicaba- -que la democracia es más una aspiración que una posesión y que hay que entenderla como una conquista ético- política de cada día que sólo a través de una autocrítica permanente podría ser mantenida. Pero dejando a Aranguren la palabra, la democracia es- -como afirmaba Kant de la moral en general- -una tarea infinita en la que si no se progresa, se retrocede, pues incluso lo ya ganado ha de reconquistarse nuevamente cada día Y esto es lo que da fuerza a las medidas que, en medio de protestas innumerables, se han puesto en marcha de un año para acá.

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