ABC MADRID 07-04-2011 página 46

46 MADRID JUEVES, 7 DE ABRIL DE 2011 abc. es madrid ABC Multitud de policías y sanitarios se congregaron en el lugar donde cayó muerta Elena Sanz, en el centro de Móstoles. Abajo, una agente oculta el cadáver ¡Han asesinado a Elena por un puñado de euros! BUn hombre vestido con traje oscuro acuchilla cinco veces a una lotera de Móstoles para robarle la recaudación. La Policía sospecha que la joven había sido vigilada para conocer su rutina S M. J. ÁLVAREZ MADRID e han llevado una vida! ¡Y sin llevarse apenas dinero! ¡No se han llevado nada! ¡Si acaso, un puñado de euros! Así gritaba de dolor ayer Móstoles por Elena Sanz Galindo, una conocida lotera de 34 años. La mujer, vecina del centro, se disponía a cerrar el establecimiento cuando un individuo la abordó violentamente con la intención de robarle la recaudación. Los primeros datos indican que la víctima se resistió al atraco y se produjo un forcejeo. Entonces, el sospechoso le clavó hasta cinco veces un arma blanca. Elena murió prácticamente en el acto, ante los ojos atóni- tos de su hermano. Vivía en pareja y no tenía hijos. Elena, sobre la una y media de la tarde, estaba cerrando el pequeño establecimiento, ubicado en la avenida de Juan XXIII, 19. Normalmente había una segunda empleada con ella; ayer estaba sola. Se marchaba a comer a casa, muy cerca del lugar donde ocurrieron los hechos, como hacía cada día. Según los vecinos, antes, iba a depositar la recaudación en un banco. Presumiblemente la de la tar- Así fue el atraco El ladrón la asaltó por sorpresa cuando, sola, cerraba la persiana metálica. De un empujón la metió en el despacho de anterior y esa mañana. La ventanilla del local está protegida con una mampara de seguridad, por lo que el ladrón, al acecho, esperó a que Elena estuviera fuera para asaltarla. Concretamente, la mujer estaba bajando la tela metálica del local cuando apareció el ladrón. Fuentes del caso explicaron a ABC que le dio un empujón a la víctima, hacia dentro del despacho de loterías. Luego, se produjo un forcejeo entre ambos. Elena, pese a ser de complexión menuda, bastante baja de estatura, opuso fuerte resistencia. Pero el agresor actuó de manera aún más violenta. Todo ocurrió en apenas unos segundos. Le asestó, al menos, tres navajazos en el vientre, otro en el cuello y un quinto, el mortal, en el hemitórax izquierdo, que le alcanzó el pulmón, informó Emergencias 112. El primer aviso entró en el 112 a las 13.32. La víctima tenía aún un halo de vida cuando gritaba ¡Socorro! a apenas unos metros del lugar. La primera persona que salió a ver qué ocurría fue Virginia, una empleada de la agencia de viajes aneja a la administración de loterías, que, precisamen-