ABC MADRID 19-07-2010 página 17
- EdiciónABC, MADRID
- Página17
- Fecha de publicación19/07/2010
- ID0005860254
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ABC LUNES, 19 DE JULIO DE 2010 abc. es nacional ESPAÑA 17 Saleh Al Fawzan, promotor del canal B Financiación El promotor es el jeque y teólogo saudí Saleh Al Fawzan, miembro del Consejo de grandes sabios y líder de la corriente más radical del wahabismo B Ejecución El canal, que emitirá en castellano para España y Sudamérica, se pondrá en marcha en octubre en el polígono industrial de Tres Cantos, después de haber sido rechazado por Marruecos B Obstáculos Las desaveniencias entre los imanes de las dos asociaciones musulmanas más importantes han hecho que el proyecto no se pusiera en marcha este agosto, coincidiendo con el ramadán B Expansión El plan de implantación mundial del wahabismo se extenderá, tras la experiencia de Madrid, a Francia, Reino Unido y China que Saleh Al Fawzan y su hijo pensaron instalar el canal de televisión Córdoba para emitir en castellano a España y suramérica. Pero el gobierno de Mohamed VI puso todo su empeño en frustrar el proyecto al valorar las muchas posibilidades de que terminara convirtiéndose en una fuente de alimentación de fundamentalistas. Después del no de Marruecos, la familia Al Fawzan, que en Arabia Saudí es propietaria de una empresa de comunicación y de un diario digital, puso sus ojos en Granada, pero sus gestiones terminaron en un callejón sin salida, por lo que meses más tarde lo pretendió en Córdoba, también con nulo éxito. De ahí, el intento de Madrid. Especialistas españoles en terrorismo islamista consideran que el canal de televisión, por su condición de órgano de expresión de la corriente wahabista, es un peligroso medio de captación y adoctrinamiento, así como de desestabilización en la comunidad musulmana asentada en España. De entrada, los expertos consideran una amenaza en sí que se llame Córdoba hecho que comparan a la denominación de Al Andalus del órgano de comunicación del grupo terrorista Al Qaida en el Magreb Islámico (AQMI) organización que mantiene secuestrados a los cooperantes españoles Roque Pascual y Albert Vilalta.