ABC MADRID 30-04-2008 página 54
- EdiciónABC, MADRID
- Página54
- Fecha de publicación30/04/2008
- ID0005036264
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54 MADRID www. abc. es madrid MIÉRCOLES 30- -4- -2008 ABC La avioneta privada regresaba a la base de Cuatro Vientos tras una hora de vuelo, cuando comenzaron a fallar los motores, según explicaron los testigos La catástrofe sobrevuela la M- 40 Un instructor de vuelo y un piloto que iba a verificar su licencia se estrellaron ayer en Carabanchel, a escasos cuatro metros de la M- 40. Murieron en el acto. La pericia del primero evitó una catástrofe al salvar pisos, una gasolinera, un centro comercial y la circunvalación POR M. J. ÁLVAREZ FOTO DE SAN BERNARDO MADRID. ¡Niño, que se estrella! ¡Que se va a estrellar la avioneta! Esas eran las advertencias que le hacía Mercedes a su marido Quiterio, como si pudieran evitarlo. Acababan de aparcar en el centro comercial Isla Azul de Carabanchel, situado junto a la M- 40 y la Vía Lusitana, para ir a comprar. Faltaban pocos minutos para las 11. Desde la loma en la que se encontraban, les llamó la atención cómo el aparato sobrevolaba encima de los pisos del PAU a escasa altura y el extraño ruido de los motores, intermitentes. Se notaba que fallaban. Miramos hacia arriba. La nave iba de lado a lado, virando de izquierda a derecha y viceversa. Comenzó a hacer maniobras extrañas en espiral y giros. Yo creo que intentaba salvar las viviendas, la gasolinera, el centro comercial y la M- 40, atestada de vehículos explica Mercedes, quien por un momento llegó a pensar que el aeroplano estaba haciendo acrobacias. Nada más traspasar la M- 40 (kilómetro 27) junto a una vía de incorporación y un cable de alta tensión, tras levantar un poco el vuelo, la avioneta cayó en picado al lado del arcén y se estrelló en una explanada aledaña a la R- 5. El motor dejó de sonar y el morro chocó contra un montículo de tierra y cayó a plomo, sobre sí misma, a escasos 25 metros de la M- 40 agrega Quiterio. La secuencia duró escasos segundos y los conductores que se iban a incorporar a la circunvalación se quedaron atónitos. Cayó justo a mi lado. Nos separaba la valla. Me bajé, asustado, y eché a correr a ver si podía ayudar o hacer algo indica Manuel. Lo mismo hicieron Mercedes y Quiterio, tras llamar al 112, así como otros testigos. Los dos ocupantes de la avioneta fallecieron en el acto y la pericia del instructor impidió una catástrofe de grandes dimensiones, extremo que recalcaron quienes presenciaron el siniestro. Hasta el lugar, se desplazaron los servicios de emergencias del Samur- Protección Civil, Bomberos del Ayuntamiento, Policía Nacional, Municipal y Guardia Civil, quien procedió a cortar el enlace entre la M- 40 y la M- 425, situación que mantuvo hasta primeras horas de la tarde. Los fallecidos, de unos 30 años, viajaban en una nave privada, una bimotor de recreo de cuatro plazas. Se trata de una Cessna 310 Q, matrícula ECDZV del año 1969. Habían salido a las 10 desde el aeródromo Últimos accidentes 15- 04- 08. Heridos grave los tres ocupantes de una avioneta que se precipitó en Valdequemada. 02- 08- 07. Muere un instructor de vuelo de Cuatro Vientos y su alumno al caer su avioneta en Villanueva de la Cañada. 04- 07- 07. Un hombre portugués muere al estrellar su ultraligero contra el suelo en El Álamo. 19- 04- 06. Muere un instructor y su alumna al chocar en el aire con otra avioneta en El Álamo. Un vecino mío ha visto estrellarse ya a seis avionetas. ¡Ya está bien! se quejaba Fernando de Cuatro Vientos y regresaban a la base cuando ocurrió el accidente. Sus ocupantes eran el instructor Francisco José Ruiz Cortijo y el piloto Adrián Muñarriz, que iba a verificar su licencia de vuelo. Ambos tenían mucha experiencia y eran muy buenos profesionales, según relataron sus alumnos y compañeros, algunos de los cuales acudieron hasta el lugar de la tragedia. Adrián era muy bueno y muy prudente, fue instructor de Aeromadrid, una escuela de vuelo de Cuatro Vientos, y no salía a volar si veía que no había condiciones comentaba Enmanuel Adiosdado, un alumno suyo. Francisco acaba de empezar a trabajar en una compañía de bajo coste que pertenece a Iberia, Cliker. Estaba casado y tenía dos hijos. Era muy buena persona. Se veía obligado a dar clases para ganar algo más de dinero, aunque pagan muy poco decía un allegado. Todo apunta a un fallo en uno de los dos motores de la avioneta, según las fuentes con-