ABC MADRID 10-10-2007 página 47
- EdiciónABC, MADRID
- Página47
- Fecha de publicación10/10/2007
- ID0005014580
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ABC MIÉRCOLES 10- -10- -2007 MADRID www. abc. es madrid 2. Si este paso no funciona, tiene que saber que no siempre es posible denunciar. Si una foto es tomada en un lugar público, la vía judicial es difícil. El juez puede considerar que la imagen supone una lesión a la dignidad de la persona y, al salir en internet, podría tratarse como una injuria. 3. Cuando alguien cuelga sin su permiso una imagen en la que usted es el protagonista- -muestre algo íntimo o no sobre su persona- la acción última y más efectiva es denunciarlo al Grupo de Delitos Telemáticos o a la Brigada de Investigación Tecnológica. 47 QUÉ HACER SI SU IMAGEN ESTÁ EN INTERNET SIN SU PERMISO 1. En primer lugar, una vez localizada la imagen en una página web, tiene que dirigirse al propietario de la página para que retire la imagen. Si el titular del dominio (no el servidor) está en el extranjero, hay que comprobar si en alguno de los apartados de la web indica cómo reclamar. 4. La publicación de una imagen en internet puede afectar a cuatro derechos distintos: la intimidad, el honor, la propia imagen y la protección de datos. Las penas conllevarían el cese de la publicación y sanciones económicas. En último extremo supondría penas de prisión de entre dos y cinco años. Un padre reclama a YouTube que retire un vídeo en el que humillan a su hijo deficiente El afectado se lo exigió al portal web y lo denunció en los tribunales, mientras que Youtube replica que basta con que siga los procedimientos para retirar el vídeo MARIO DÍAZ MADRID. Román, discapacitado psíquico de 46 años, es muy conocido en su barrio de Móstoles. Totalmente inofensivo, afirma su familia, va a su aire por la zona sin que, hasta hace un año, tuviera ningún problema. Fue entonces cuando unos desconocidos grabaron varios vídeos en los que se mofaban de él y de su familia con acciones y palabras humillantes. Después, lo colgaron en el portal de internet de intercambio gratuito de vídeos YouTube. Desde entonces, la familia ha iniciado una batalla, también judicial, para que la web elimine esos vídeos. José Martín Roldán, pensionista de 70 años, es el padre de Román. Aunque le interesa la informática, se enteró de los vídeos el pasado mes de junio, cuando uno de sus ocho hijos lo vio ojeando YouTube. Llevaban colgados allí desde 2006. En ellos aparecía Román sufriendo diferentes mofas de un grupo de personas, jóvenes por las voces, probablemente vecinos a juzgar por la familiaridad con la que le trataban. ¿Vas de guerra? preguntan riéndose a Román, al que han pintado la cara. Porque soy un indio sioux responde con su vocecita. Después le piden que haga abdominales, pero no sabe. ¡Eso es hacer flexiones! ¿Te van los porrillos? le espetan. Román sigue hablando entre las carcajadas. Román es esquizofrénico en grado extremo, no razona bien, es como un niño dice su padre. Cuando ayer hablaba con ABC pidió a Román que se marchara: Es para que no se entere de nada, ahora está mucho mejor, pero en aquella época estaba muy mal Aquella época fue cuando se grabaron los vídeos. ¿Han violado a tu madre, Román? le preguntaban entre grandes risotadas en una de las rústicas grabaciones, probablemente de teléfono móvil. Los vídeos eran tan denigrantes que no los pude ver enteros; mi mujer está deprimida prosigue. Cuenta este padre de familia que comenzó a enviar correos electrónicos a la única dirección que encontró en YouTube para solicitarles que retiraran los vídeos y que le informasen de quién los había colgado. Les adjunté el certificado para que les constara que la patria potestad es nuestra, ya que Román está incapacitado, pero nada, los vídeos ahí seguían YouTube sí le contestó, aunque diciéndole que los vídeos estaban protegidos prosigue Martín. Casi fue una amenaza, y yo les respondí que los derechos humanos protegían a mi familia y a mi hijo, que no se podía consentir esta humillación Y se decidió a denunciar. Así, José acudió al juzgado número 2 de Móstoles a finales de junio y denunció los hechos, ya investigados por la Policía de delitos informáticos. Además, comenzó a escribir cartas a los medios de comunicación estadounidenses denunciando lo que le hacía YouTube, y se registró para criticar estos vídeos en la web. El vídeo con mofas sobre este discapacitado psíquico podía verse ayer aún en el portal Youtube. com Su lucha siguió sin parar: pidió una cita con el Defensor del Pueblo, amparo al fiscal de Móstoles y ya ha solicitado un abogado de oficio por si siguen sin hacerle caso y para que no se vayan de rositas los responsables de los vídeos. Fuentes de Google remarcan que sólo facilitarán datos de sus usuarios bajo orden judicial. Después de la primera denuncia, José la amplió dos veces, cada vez que se encontraba con los vídeos aún colgados, ayer la última vez: al menos, los tres primeros ya no estaban, aunque permanecía otro colgado el pasado 26 de septiembre por alguien que se hace llamar tuarxienemigo En los comentarios, un arsenal de críticas al vídeo y a sus autores. Mientras, la correspondencia vía e- mail con YouTube siguió, aunque sin mucho éxito, según este padre. Google afirma lo contrario: Si los vídeos no cumplen la política de Youtube (discriminación, violencia explícita, etc. se retiran, basta con que un usuario lo vea inapropiado para que se re- ABC Vídeos protegidos Varios desalmados le pintan la cara y se burlan de él mientras le instan a hacer abdominales. En otros vídeos insultaban a su familia vise y, si procede, se retire A su juicio, por lo tanto, este vídeo que ayer se veía en YouTube no era lo suficientemente denigrante para ser retirado. Google explica que los vídeos también pueden ser retirados con el requerimiento de los tutores, que, como todos los protagonistas, tienen unos mecanismos perfectamente claros para retirarlos Eso hizo este señor con los tres primeros vídeos, pero no con el cuarto, aunque le volveremos a pedir que mande toda la documentación para retirarlo añaden. A José no le consta que hiciera nada diferente en su primera petición de que retiraran los vídeos de las siguientes, y rechaza que YouTube, además, nos imponga sus condiciones