Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 05-05-2007 página 104
ABC MADRID 05-05-2007 página 104
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 05-05-2007 página 104

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página104
Más información

Descripción

Sábado 5 de Mayo de 2007 Editado por Diario ABC, S. L. Juan Ignacio Luca de Tena 7. 28027 Madrid. Teléfono: 913399000. Publicidad: 902334556. Suscripciones: 901334554. Atención al cliente: 902334555 Diario ABC, S. L. Madrid 2007. Prohibida la reproducción total o parcial sin el permiso previo y expreso de la sociedad editora. Número 33.379. Depósito Legal: M- 13- 58. Apartado de Correos 43, Madrid Precios de ABC en el extranjero. Alemania: 2,05 Bélgica: 2,00 Estados Unidos: 2,50 USD. Francia: 2,05 Irlanda: 2,10 Italia: 1,75 Holanda: 2,00 Portugal: 1,35 Reino Unido: 1,20 LE. Suiza: 3.40 CHF. Marruecos. 16 Dh. DESDE MI BUHARDILLA Laura Campmany PAÍS a Pantoja, la madre de la Pantoja, la ex novia de la Pantoja o el novio con tirantes de la Pantoja. Qué más da. Todo vale para hipnotizar a la gente con chismes y folclores: acordonar las calles para que pasen ellos, los supuestos famosos y sus guardias, o pintar de alcaldesa a la mujer morena, o jugar a un palé de maletines, o inventarse una casta analfabeta que amontone facturas, relojes, calcetines, lujos de nuevo rico, artistas de subasta, criterios sobornables, llamadas sospechosas con su trinca y afloja o su tela y su pasta, documentos perdidos, dientes de excavadora, glamoures de panceta, fular y zapatilla, nubes de prensa rosa, prensa de carne en salsa, la insaciable avidez ostentativa, estentórea, ostentórea y chabacana del me das y te doy, tú firmas, yo apoquino, Marbella, cuentas negras, cuentas blancas... La Pantoja, la tragedia de la Pantoja o el delito de la Pantoja. Tanto da. Todo vale para que se pongan de moda las gafas oscuras que lo mismo te sirven para ocultar la pena, la ojera o la vergüenza, que para irte de tapas o jereces, o a degustar las mieles del martirio. Para que ande la chusma entretenida tirando piedras o cascando nueces. Esa chusma que antaño la aplaudía, anhelando apropiarse de las sobras de aquellos despilfarros y festines, es la misma que está de imaginaria delante de la puerta del juzgado, que increpa a la cantante conocida, zarandea su coche, la insulta con un odio alquitranado, se afila los colmillos, la juzga, la condena sin juzgarla. Ponemos reyezuelos y coristas en nuestro corazón de glicerina tan sólo para ver cómo se caen, qué rictus se le queda al que resbala. Tierra de linchamientos. País de gente mala. L I m Harry (Yo soy Harry) inscripción que aparece en las camisetas que lucen los compañeros de regimiento del príncipe El príncipe valiente, en la diana Ante las amenazas contra Harry por incorporarse a su regimiento en Irak, sus compañeros usarán una camiseta, también a la venta en Inglaterra, que recuerda la legendaria frase de la película Espartaco MANUEL DE LA FUENTE s desde hace ya casi medio siglo una de las secuencias más legendarias, impactantes y hermosas de la historia del cine. Frente a las legiones de Craso que acaban de derrotarles, los esclavos se niegan a entregar a su jefe y cabecilla Kirk Douglas y dan el do de pecho al grito solidario de Yo soy Espartaco Sabido es que, a menudo, mucho más a menudo de lo que podamos darnos cuenta, la realidad supera, y con creces, a la ficción, aunque ésta lleve el sello de dos de los grandes genios y mitos del Séptimo Arte, el director Stanley Kubrick, y el popular y macizo actor de origen ruso. Aunque en esta ocasión, la cruda (y no es necesariamente una referencia al petróleo) realidad esté protagonizada por alguien que también tiene parangón ficticio y literario, el príncipe valiente o, lo que es lo mismo, el príncipe Harry de Inglaterra, tercero en el orden de sucesión al trono británico, que en breve será destinado a Irak, donde la insurgencia ya le ha puesto en la diana de su ira fundamentalista, alguno de cuyos líderes ha asegurado que uno de sus objetivos prioritarios sería capturar a Harry De momento, parece que la partida del príncipe Harry se ha demorado, con vistas a que la unidad en la que se integrará en Mesopotamia tenga tiempo suficiente de habituarse al terreno y de familiarizarse con las maniobras enemigas, con el fin de que los riesgos que corra sean menores, según informaba ayer mismo el tabloide The Sun Mientras llega ese día, y mientras los británicos han tenido que digerir la muerte de doce militares compatriotas durante el pasado mes de abril, el Reino Unido vive una nueva campaña espartaquista de solidaridad y de camaradería, en forma de camiseta como la que muestra la imagen, que se ha puesto a la venta, en edición limitada, por un precio cercano a los treinta euros. I m Harry Yo soy Harry clara referencia a Espartaco se lee en las letras impresas en ella, junto a una temible y desasosegadora diana. Pero, además de su comercialización, la prenda será usada por los compañeros de regimiento del príncipe inglés, en un gesto de ardor guerrero y de amor patrio henchido el corazón, pero también de desafío a las siniestras amenazas vertidas contra el hijo del príncipe Carlos. La papeleta (menudo papelón, a la altura del mismísimo Kirk Douglas) para el Ejército y los servicios de inteligencia de Su Graciosa Majestad está servida. Que no olviden que en Hollywood los guiones se adaptan a las exigencias y los gustos del gran público. Pero lo de Irak, tristemente, tiene toda la pinta de ser otra película. E Los fines de semana a lo La revista más leída, cada domingo con al. com abc. xlseman

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.