ABC MADRID 25-08-2006 página 56

25 8 06 VIERNES DE ESTRENO Becky London y Tom O Rourke interpretan a dos de los pasajeros secuestrados en el trágico vuelo que rememora la película ABC United 93 Recuerdo de los héroes Pese a la reluctancia a abordar la tragedia del 11- S, Hollywood empieza cinco años después a explorar la traumática ofensiva terrorista con producciones como United 93 que ahora llega a España POR PEDRO RODRÍGUEZ CORRESPONSAL EN WASHINGTON urante la II Guerra Mundial, Hollywood hizo películas sobre la II Guerra Mundial. Durante la guerra de Vietnam, Hollywood hizo películas sobre la guerra de Vietnam. Y se supone que tras la pesadilla de Watergate, la primera película que Jimmy Carter disfrutó en la sala de proyecciones de la Casa Blanca fue Todos los hombres del presidente Para la industria del cine de Estados Unidos, la actualidad ha sido siempre una tentadora e inmediata fuente de inspiración. Hasta que hace cinco años se materializó la ofensiva terrorista del 11- S y sus tres mil muertos. Durante estos años, Hollywood ha resistido la tentación de abor- D dar esta cuestión como contagiado por la afonía de voces disidentes y el cierre de filas que los atentados provocaron en la sociedad y la política de Estados Unidos. Entre excusas de que era demasiado pronto para hacer películas sobre el 11- S, demasiado doloroso, demasiado poco rentable y demasiado polémico. Pero al final, el cine ha terminado por arriesgarse y explorar la gran tragedia que enmarca el comienzo el siglo XXI. La primera entrega en forma de largometraje sobre lo ocurrido el United 93 ha contado con un reparto de actores poco conocidos y voluntarios como Ben Sliney, que era el director de operaciones de la aviación estadounidense aquel día 11 de septiembre del 2001 ha sido United 93 (Universal) estrenada por en abril en Estados Unidos y esta semana en España. Sin ayuda de los golpes de efecto habituales en el cine comercial, el guionista y director británico Paul Greengrass El mito de Bourne Domingo sangriento cuenta la historia de una de las partes menos conocida pero quizá más heroica del 11- S: el cuarto vuelo secuestrado aquel día por cuatro terroristas de Al Qaida, que terminó por estrellarse en un campo de Pensilvania tras la rebelión de los cuarenta pasajeros y tripulación a bordo. Según el consenso de las críticas a este lado del Atlántico, Paul Greengrass, aprovechando su experiencia en documentales para la BBC, ha sabido exhibir un emocio-