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ABC MADRID 20-02-2005 página 22
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22 Nacional EL DESASTRE DEL CARMELO DOMINGO 20 2 2005 ABC La alegría del Carmelo por la llegada del Metro a esta colina de Barcelona se ha truncado en tristeza y desesperación. El millar de vecinos desalojados de sus casas hace un mes por la aparición de un enorme socavón no ve todavía la salida al final del túnel Un barrio hundido y burlado TEXTO: ÁNGEL MARÍN FOTO: ELENA CARRERAS BARCELONA. Con la vida a cuestas. A los 15.000 vecinos del barrio del Carmelo de Barcelona, acostumbrados a caminar tranquilamente por las empinadas calles de esta colina barcelonesa, se les hace más cuesta arriba que nunca al presenciar el caos en que está sumida esta barriada obrera desde hace un mes. La pesadilla empezó el pasado 27 de enero, cuando apareció el primer socavón- -un enorme agujero de 35 metros de diámetro por 36 metros de profundidad- -provocado por el hundimiento de un túnel en construcción para ampliar la línea 5 del Metro. El suceso obligó a desalojar a 1.057 personas- -un total de 84 inmuebles- y todas ellas permanecen aún en hoteles (631) o en casas de sus familiares (420) sin tener hoy ninguna certeza sobre su futuro. Los desalojados, y el barrio en general, no levantan cabeza desde entonces. El enorme socavón y, sobre todo, sus graves consecuencias económicas y sociales para el barrio- -como mínimo, unas 200 familias perderán todo lo que tenían por culpa de un error en la construcción del túnel- -han cambiado la cara del Carmelo. Una barriada construida encima de un cerro donde los inmigrantes levantaron sus barracas en los años cincuenta y que fueron sustituidas dos décadas después por centenares de bloques de pisos edificados por inmobiliarias sin ningún tipo de escrúpulos. Pese a las pendientes y las carencias del suburbio, la vida en el Carmelo era bastante apacible para los trabajadores que un día decidieron comprar una vivienda en esta zona de Barcelona. Las prisas para derribar el primer edificio afectado por el hundimiento del túnel- -otros tres serán demolidos en los próximos días- -crearon una terrible angustia entre los vecinos del barrio, que tardará meses en recuperar la normalidad. Una treintena de familias vieron con sus propios ojos cómo derribaban su bloque sin poder sacar nada de sus casas. Esta decisión de las autoridades catalanas, tomada 24 horas después de la aparición del socavón, incrementó la alarma social en la zona porque el resto de afectados temían seguir los mismos pasos que sus convecinos del número 10 del Pasaje Calafell. Un barrio muerto A la rabia e impotencia que sentían los afectados se sumó la desesperación de los propietarios de tiendas que, en palabras del presidente de la asociación de comerciantes de Carmelo Centro, Josep Maria Mas, tenían la sensación de vivir en un barrio muerto Unos 52 establecimientos fueron obligados a bajar las persianas por estar dentro del perímetro de seguridad; otros 60 cercanos a la zona cero están abiertos pero, según afirma Mas, no venden para cubrir gastos. La aparición de un segundo agujero, de seis metros de profundidad, un día después de que el Ayuntamiento diera certificados de solidez de algunos edificios para que unos 270 desalojadas vol- CRONOLOGÍA 27 de enero. Desalojan a 1.057 personas por un enorme socavón, causado por las obras del Metro, que engulló un edificio del barrio del Carmelo que había sido evacuado dos días antes. 1 de febrero. Derriban el edificio del número 10 del Pasaje Calafell, contiguo al que se hundió. Las familias afectadas no pudieron sacar nada de sus casas. 3 de febrero. Aparece un segundo socavón, de seis metros, que incrementa la alama social y la desconfianza entre los vecinos. Anuncian la demolición de otros tres bloques. 10 de febrero. El consejero de Obras Públicas reconoce que hubo errores en la ejecución de las obras y que el accidente era evitable CiU y PP piden su dimisión y la creación de una comisión de investigación. Las dos demandas son rechazadas por el Gobierno catalán. 16 de febrero. Finaliza el sellado del túnel con hormigón y la Generalitat afirma que el terreno está estabilizado para que la gente pueda volver tranquila a sus casas Los desalojados exigen una garantía de 10 años de sus fincas. 18 de febrero. La juez admite a trámite la querella por estragos y daños por imprudencia presentada por comerciantes del barrio contra las constructoras. La colina más socialista La gestión de la crisis del Carmelo por parte de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona, que pretendían hacer llegar cuanto antes el Metro hasta la colina más socialista de la Ciudad Condal- -más del 56 por ciento de los electores votaron al alcalde, Joan Clos, en los últimos comicios locales- -ha sido duramente criticada por los afectados y también por los partidos de la oposición, CiU y PP. Hasta hace pocos días, los desalojados no podían entrar a sus casas para sacar los objetos de más valor económico o personal. El cordón policial de la zona cero (el perímetro de seguridad establecido alrededor del socavón) sólo permite el paso a los vehículos oficiales (Policía, Bomberos, ambulancias... y a los relacionados con las obras (camiones, excavadoras, hormigoneras... mientras que el acceso está completamente prohibido a los peatones. Los propietarios de las viviendas desalojadas pueden acceder ahora a ellas, siempre en compañía de los Bomberos y tras identificarse (DNI) ante los agentes de los Mossos d Esquadra. Los trabajos en la zona cero continúan para tapar el socavón con hormigón

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