ABC MADRID 13-08-2000 página 11

ABC DOMINGO 13- 8- 2000 OPINIÓN 11 BREVERÍA Gerhard Alarma y auge neonazi En los últimos dos años, los delitos de carácter xenófobo han alcanzado en el centro de Exuropa un grado preocupante según los más decientes informes. Sólo en 1999, se registraron en Austria 717 denvincias por actividades delictivas de carácter neonazi, xenófobo o antisemita, con un incremento del 55 por ciento respecto a 1998. La escena neonazi se encuentra en Austria en fase de recuperación, después de que en 1992 fueran condenados a largas penas de cárcel dos de sus activistas más destacados. En Alemania, el Partido Nacionaldemócrata (NPD) se ha convertido en xma amenaza cada vez más real, con capacidad para captar a un número nada desdeñable de jóvenes, ligados en su mayoría a bandas de skinheads (cabezas rapadas) El NPD mantiene estrechos lazos de amistad con bandas austríacas como Blood Honour (Sangre y Honor) que so- brecogen no ya sólo por el nombre sino, sobre todo, por la violenta actitud de sus miembros. Especialmente sensible a los riesgos de la ideología neonazi, Aler manía tntenía poner coto legal a la proliferación de grupos xenófobos, responsables de no pocas actividades delictivas. La sombra del pasado ha puesitoen guardia a la opinión pública germana, que se ha echado a la calle para plantar cara a la barbarie. Ayer mismo, en Mimich, varios mUes de personas se manifestaron en contra de lavvíolencia xenófoba y antisemita, que es considerada como imo de los más graves peligros que amenaza la convivencia de xma nación especialmente alerta ante la proliferación de este tipo de movimientos. Asunto especialmente polémico es el relativo a las medidas empleadas por. los distintos Estados para defenderse del auge en Internet de la ideología nazi, que ha encontrado hasta ahora pista libre en la Red como consecuencia del vacío legal existente. En este sentído, merece subrayarse la decisión de la Justicia francesa de forzar un cambio en la jurisprudencia parai arbitrar medidas que impidan el acceso a las web de carácter nazi. 1 Soíeciaci ara eác OJCvUcactt Sihto ene v i u) ocvvuo sí todos los veranos C OMOvezcitabastanteplaya. heLoacudido a mi con la hago sólo vina y a disgusto. La arena es un tormento, y más aún si es fina y blanca cOmo la cantábrica. Me entero por la Prensa- -en algo me tenía que parecer a Felipe González- que de Estepona a la Línea de la Concepción la mar muere en las playas desde espesas olas de alquitrán. En Sotogrande, donde se reúnen tantos viejos veraneantes donostiarras, llaman a sus playas la Concha y Ondarreta, para no perder Ik costumbre. Perdido el paraíso, es bueno mantener el hábito. AUí. -en San Sebastián, al alquitrán se le decía galípó o chapapote y era ima porquería. Se quitaba con algodón rociado de alcohol, y siempre quedaba un resto de pie sucio, nada atractivo. En los tiempos de mi juventud a los píes se les daba mucha importancia, y los pies grandes en las mujeres contaban con mí mayor consideración. Pero el píe grande de la mujer más deseada perdía toda su atracción con el dedo gordo impregnado de chapapote. Por esa razón paseaban tanto las dulces sirenas de mis ayeres por la orilla. Para esconder sus pies petroleados. Y por ese mismo motivo se sucedían las picaduras de los sabirones o sabiroyas, que así son bautizados en las Vascongadas a los peces escorpiones, unos cabrones de peces que se ocultan bajo la arena y cuando son pisados alzan la espina dor- sal y clavan un puñal venenoso que duele una barbaridad. Mis playas de La Montaña están plagadas de escorpiones y los chicos de la Cruz Roja atienden cada día a decenas de afectados. A pesar del riesgo, miles de homínidos se bañan en las playas ajenos al peligro que corren. Los restantes mí- ALFONSO USSÍA Playamóvil ¿Cpmo podíamos soportar en nuestro ayer las playas sin teléfonos? me pregunto y no me respondo les, toman el sol y hablan por teléfono. Porque ahora la gente va a la playa a hablar por teléfono, princg) almenté. ¿Cómo podíamos soportar en nuestro ayer las playas sin teléfonos? me pregunto y no me respondo. Llega ahora una famUia a la playa, y después de montar la sombrilla, desplegar las sillas, hinchar el cocodrilo de Kevin Rubén y el delfín de Vanessa- -que Ueva por precaución un evas o tampas de doble absorción, con alas o sin alas- y de preparar las palas, las pelotas, los balones y la nevera portátil, se ponen a hablar por teléfono. No el padre o la madre, sino todos los miembros de la familia. El padre llama a la oficina, la madre al colegio de Inglaterra donde aprende inglés Jhonatán Luis- -el peque de la casa- Kevin Rubén con su novia y Vanessa con suamiga Gladys, que se halla a veinte metros de ella formando parte de otro grupo familiar que monta la sombrilla, despliega las sillas, e hinchan el cocodrilo de Gorka Imanol con toda la rapidez del mundo para, inmediatamente después, sacar el móvil y hablar por teléfono. Gladys, llama a los Moroño y dUes de mi parte que en esta playa hay menos olas que. en la suya Es qué están fuera de cobertura, papi Pues hay que ser idiota para ir a una playa sin cobertura Las playas de hoy, no son buenas o malas por la limpieza del ua, la calidad de la arena o sus servicios generales. Son buenas sí hay cobertura y malas si los móvües no funcionan. Y encima lo del vibrador. En mis tiempos se le llamaba víbradon á otro chisme. ¡Vanessa, que tienes puesto el vibrador! Y nadie mira a Vanessa. En los trajes de baño de moda sé aprecian vmós bolsillos que cierran a la perfección para llevar el teléfono móvñ. Suenan o vibran, y las orillas de las playas ya no suenan a mar que rompe, a ola que muere, a espuma que va y viene. Suenan a cxialquier cosa, con mil musíquiUas entremezclándose continixamente; Mientras me baño cuídame el móvU Antes lo que se cuidaba era a los niños, para que no se ahogaran. Ahora se vigila a los móviles. Mami, me ha llamado Mafalda desde las rocas, que han cogido tres cangrejos y un montón de quisquillas pues dñe que venga pronto, que como tarde le an- eo ima leche que se va a enterar Mami, que dice Mafalda que la llames a su móvil que se va a quedar en las rocas porque le da la gana Que me Uame ella para pedirme permiso es que le queda poco crédito en su tarjeta bueno, pues- que se quede, pero que no quiero saber nada si papi se enoja no mami, que ya ha hablado con papi que está haciendo planting y papi le ha dicho que h a lo que le salga del chichi pues entonces, de acuerdo ¡Qué ganas tienen las playas de alcanzar el otoño!