ABC MADRID 12-01-2000 página 47

ABC MIÉRCOLES 12- 1- 2000 47 CULTURA LEGADO DE UN ARTISTA ATÍPiCO Emilio Ybarra y Francisco González inauguraron ayer en las salas del Banco Bilbao Vizcaya Argentaría una muestra con 65 obras del genio francés, casi un desconocido en España Madrid expone la obra íntima de DubufTet, inspirador del arte español de este siglo Son los d u b u f f e t de D u b u f f e t Los cuadros más queridos por el a r t i s t a f r a n c é s q u e g u a r d ó para s í y q u e por a m i s t a d con el d i r e c t o r del Museo de A r t e s Decorativas de París, donó a esta pinacoteca. Una numerosa e i m p o r t a n t e selección de estos f o n d o s se exhibe e n M a d r i d Los v i s i t a n t e s p o d r á n descubrir a un h o m b r e fascinante, que ha marcado la p i n t u r a de la segunda m i t a d de este siglo. Aznar y Almunía asisten al funeral por José Antonio Fernández Ordóñez MADRID. A. Astorga MADRID. Natividad Pulido n recorrido por esta exposición nos conduce ineludiblemente a lo mejor del arte español de este siglo. En los cuadros de Dubuffet se entrevén colores, formas y volúmenes de Tapies, Saura, Millares, GordUlo, Arroyo, Torner, Rueda, Barceló. García Sevilla... Muchos de ellos han profesado una gran admiración por el trabajo del artista francés. Ello no quiere decir, como apuntaba ayer Carmen Giménez, directora del proyecto, que sean meros imitadores de Dubuffet: Fue el punto de partida de todos ellos, pero van más lejos y desarrollan sus propios lenguajes. Klee también influyó mucho a Dubuffet. Esas relaciones enriquecen el diálogo artístico En España, la Fundación March fue ima vez más pionera, exponiendo en 1976 ochenta y tres obras de este polifacético artista. Años más tarde, en 1992, sería La Caixa la que hiciera lo propio. A pesar de ello, y aunque la crítica le considera uno de los artistas más destacados e influyentes de la segunda mitad del siglo, sigue siendo un nombre desconocido para el gran público. DEL INFORMALISMO A LA FIGURACIÓN U El presidente del Gobierno, José María Aznar, y el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, asistieron anoche, en la cripta de la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, al funeral por el ingeniero, académico de Bellas Artes y presidente del Patronato del Museo del Prado, José Antonio Fernández Ordóñez, fallecido el pasado día 3. La ceremonia congregó al mundo de la política y la cultura: el ministro Mariano Rajoy; el secretario de Estado Miguel Ángel Cortés; el ex ministro José Liado; los académicos de San Femando José Luis Álvarez, José Hernández, Alfredo Pérez de Armiñán; el conservador jefe del Thyssen, Tomás Llorens; Rodrigo Uría; el presidente de la Asociación de Amigos del Museo, Carlos Zurita, duque de Soria; el director general de Bellas Artes, Benigno Pendas; el arquitecto Rafael Moneo, autor del proyecto de ampliación del Prado, por el que tanto lu- chó Fernández Ordóñez e innumerables amigos como Alberto Schommer, Femando Higueras, Juan Gallardo, Salvador Pérez Arroyo, Kosme de Barañano o Manuel Gómez de Pablos. RENOVADOR DEL PRADO Siawny Labrouste Jean Dubuffet, en una instantánea tomada en 1969 ¿Cómo clasificar a im artista tnclasiñcable? Creador del Art Brut, su obra, irregular e imprevisible, le llevó a pasar del informalismo más radical a una figuración obsesiva. Y esa esquizofrenia se aprecia claramente en esta exposición. Cuelgan, compartiendo pared, retratos, paisajes, texturologías, ensamblajes, materiologías y su serie L hourloupe Como curiosidad, esta serie tuvo su origen en una conversación telefónica. Dubuffet se entretuvo mientras hablaba dejando correr libremente su bolígrafo rojo sobre ima pequeña libreta. Después recortó estos dibujos y los pegó sobre un fondo negro. Las 65 obras que han viajado a Madrid forman parte del legado personal del artista (163 piezas) que donó en 1967 al Museo de Artes Decorativas de París, gracias a su amistad con el director, Frangois Mathey, quien le dedicó en vida su primera gran retrospectiva, con 402 obras. Y eso que su fobia a los museos era bastante explícita. Hace tiempo que declaré la escasa afición que siento por estos tanatorios del embalsamamiento, estas cindadelas de la cultura mandarín que son los museos escribió en cierta ocasión. Jean Dubuffet (Le Havre, 1901- París, 1985) siempre fue un artista atípico. Sus idas y venidas en las tendencias pictóricas tenían correlación en su vida privada. Un breve repaso a su biografía así lo constata: tenía un negocio de vinos, coleccionaba mariposas, hizo experimentos musicales con Asger Jorn, fue un polémico escritor, viajó seis meses por el Sahara argelino... Su obra ha visitado los mejores museos del mimdo. Y no sólo los museos. Las caUes también lucen su arte. Una monumental escultura de doce metros de alto, Groupe des quatre arbres situada en la Chase Plaza de Nueva York, es uno de los símbolos de la ciudad. La muestra que se exhibe en las salas del BBVA tiene un indudable carácter intimista, que la convierte en única. Son los dubuffet de Dubuffet, los cuadros que guardó para sí mismo. Es de elogiar que hayan viajado a Madrid, im año antes del centenario de su nacimiento, algimas de sus obras maestras, que no suelen salir de Francia. Es el caso de Los seis mensajes o El asno perdido Miguel Zugaza, director del Museo de BeUas Artes de Bilbao, adonde viajará después la exposición, subrayaba ayer el grandísimo esfuerzo que han supuesto estos préstamos. La ceremonia fue oficiada por su hermano sacerdote Carlos Fernández Ordóñez, que invitó a los presentes a expresar su testimonio sobre su obra. Así lo hicieron su hija Inés y su hermana María del Carmen, que glosaron su amor por la famUia, la vida y la belleza que como él recordaba, citando a Platón, es el esplendor de la verdad Cristóbal Halffter, Eduardo Chülida- -con quien Fernández Ordóñez colaboró en sus esculturas en hormigón- -y Emilio Lledó enviaron irnos emotivos textos en los que expresaban el entusiasmo, sabiduría y humanidad de un amigo inusual Una persona de pensamiento amplio y abierto que compartía con el poeta Wiliam Blake la pasión por las artes, el espíritu de justicia y el deseo de libertad. HaHñer evocó su amor por la esfera armüar, proyecto con el que hemos vencido a tanto mediocre y a tanto enano intelectual Emotivos también fueron los testimonios de sus alumnos y compañeros del Colegio de Ingenieros. El director del Prado, Femando Checa, confesó que le fascinaba de Fernández Ordóñez el amor a la perfección tendiendo puentes entre personas, instituciones, partidos, entre pasado y el futuro. Y subrayó: Él es el autor de la renovación del Prado