Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 31-05-1998 página 28
ABC MADRID 31-05-1998 página 28
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 31-05-1998 página 28

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página28
Más información

Descripción

28 ABC OPINIÓN Panorama DOMINGO 31- 5- 98 PALABRAS N jovenzuelo imberbe, de turista aquí en la Luna, defiende en la mesa, con candido orgullo, su derecho a hablar mal, a trufar su discurso de palabras malsonantnes. Un psicólogo firma un trabajo defendiendo lo mismo, la necesidad de sacar del gueto a las palabrotas, de hacerlas normales Y, como ejemplo, da una carta de Voltaire a su sobrina, una carta de enamorado rijosillo en la que verdaderamente, sin discusión, el empleo de palabras crudas otorga mucho más sabor y fuerza a lo escrito. Lo que el joven imberbe convencional, el psicólogo metido a estüista y la sociedad española en general practican, siguiendo la vía que abrió en su momento don Camilo José Cela, adahd de la democracia y de la hbertad de expresión, la aboUción sistemática del tabú, el estrangulamiento y reducción de la. palabrota a vocablo de uso normal, supone en mi opinión un empobrecimiento radical, y un peligro. No voy tan allá como para añorar, Lesbia pudorosa, los tiempos fehces en que los viajes en tren daban ocasión para admirar y valorar los tobillos de las señoras, pero convendrás conmigo en que algo han perdido los tobillos desde entonces. Si usamos las palabras fuertes como si no lo fueran, si las castramos, las pri; vamos de su expresividad, ¿qué ganamos? ¿Creernos más libres? Puede. Pero a cambio nos quedamos efectivamente sin palabras fuertes, perdemos un recurso, un arma que en ocasiones- contadas, afortunadamente- puede resultar vital. U Cosas que pasan FERIA DE LAS VANIDADES no humillar a PAEAdel El Príncipe ladetradición, la Feria Libro de Madrid se inauguró con lluvia. Asturias cortó la cinta al mediodía y abrió los caminos de la prodigiosa cita anual del libro y los lectores. Viernes triste y casi invernal. Los magnolios del Paseo de Coches están despistados y no salen de su asombro. De sus verdes cuerpos esbeltos no ha nacido aún ni una flor de primavera. Este fin de semana empieza el durísimo guiñol de las firmas. Durísimo para los autores con lectores, por cuanto no paran de dedicar libros, aunque es dureza dulce y apetecida. Más jiuro para los escritores sin lec tores, que ven pasear ante sí a la gran multitud de la indiferencia. Según el director de la Feria, Jesús García Bayón, que como toda persona prefiere a unos autores y imas editoriales que a otros y otras, respectivamente, los grandes triunfadores de la presente edición de la Feria van a ser Antonio Gala y Fernando Fernán- Gómez. Vaticinio o deseo. Lo cierto es que se juntan firmantes de altísima calidad Mteraria y mucho me temo que alguna sorpresa puede romper las esperanzas del buen director. Ahí estará Jaime Campmany con su Pecado de los dioses y Jinojita El Lila Su última novela, El pecado de los dioses tan magistral y atrevida que ni sus más decididos detractores han osado arremeter contra ella. Lo más que han hecho es lamentarse de no haberla escrito, o mantener el contumaz silencio del sectarismo. Antonio Mingóte termina de ver nacer una edición bellísima, amphada, de la Historia de Madrid Y Juancho Armas Marcelo podrá comprobar lo mucho que interesa su Así en La Habana como en el cielo Y claro, Rosa Montero, Terenci Moix, Fernando Vizcaíno Casas, Torcuato Luca de Tena, Fernando Sánchez Dragó, Fernando Savater, José María Carrascal, Carmen Martín Gaite, Manuel Vicent, Amando de Miguel, Paul Preston, Nativel Preciado, Maruja Torres... los clásicos de la Feria. Firmaba mi Sotoancho Poco antes, gracias a la amabilidad de María Vega de Seoane, en el stand de ABC, tuve la oportunidad de firmar un libro új i al Príncipe. Mi editorial no estaba entre las elegidas por el director. Pero Ana García D Atri es mucha mujer y le ha cogido una especial simpatía al t marqués de Sotoancho. Todo fue como debía. Empezó a llover y una buena señora se acercó hasta la caseta de Ediciones B para que le, firmara el libro. Imposible superar su capacidad para el error. -Don Alfonso, me encantan sus artículos de El Mundo -sus intervenciones en la COPE y su hbro del marqués de Sotogrande- Javier Rioyo y Julio Lljamazares, acompañados de Asumpta Serna, concebían bajo la lluvia planes de repliegue. EL tiempo no estaba para bromas. Pero ya la Feria ha estallado, y Madrid, como todos los años, se prepara para toparse, de golpe, con el libro. Este año el gran protagonista será Federico García Lorca, y recibirá un homenaje el extraordinario editor Rafael Borras Betriú. Preparadas están las muñequeras, las plumas, las paciencias, las sonrisas y los sinsabores. Dicen que el tiempo va a mejorar y que, qrdzá, cuando la Feria se culmine, los magnolios del parque de El Retiro serán obhgados a nacer sus flores por exigencia de la más cínica de las primaveras. Pero ya, la Feria Alfonso USSÍ A Mal podría haber expresado Voltaire la vehemencia y el descaro de la pasión que le inspiraba su sobrina usando las palabras glúteos miembro viril etcétera. Peor aún habría sido si las palabras que usó, sus contrapartidas obscenas, a fuerza de psicología y liberalidad, hubieran quedado tan desteñidas, tan lánguidas como las anteriores. La obscenidad, la ira, el desprecio, el insulto, forman parte de nuestras emociones y necesitan ser expresadas. Para poder ser expresadas con algo más que la mera entonación, piden palabras prohibidas, palabras de uso restringido. Por otra parte, esas mismas emociones, por razones obvias, conviene no aumentarlas ni exacerbarlas demasiado: odiar, despreciar, insiiltar a tontas y a locas, como si ello no tuviera importancia, es una mentira que tarde o temprano acarrea malas consecuencias, empezando por la propia salud física. La gente malhablada suele tener problemas digestivos, por ejemplo. De hecho, no estoy nada seguro de que baste con la voluntad de abolir el tabú para abolir efectivamente el poder psíquico de las palabras feas. Si renunciamos a los eufemismos, si abusamos del pseudorrealismo, no me extrañaría que termináramos por ver el mundo, sentirlo y vivirlo no tal como pretendíamos acaso, limpio, libre y sincero, sino sucio, pútrido, dislocado en función del antiguo sentido que anidaba en la voz pretendidamente homogeneizada, víctimas del mágico veneno que creíamos haber neutralizado. Las palabras no crean el mundo, pero sí lo determinan. Y, lo que es más importante; no somos nosotros quienes creamos las palabras, nos limitamos a usarlas y ser usados por eUas. No hace falta decírtelo a ti, oh Lesbia sin par, pero lo diré por si alguien nos escucha y todavía no se había enterado: la buena educación no es un capricho absurdo, ni una barrera de clase, ni una superstición pagana, ni un simple barniz. Es un saber, y una necesidad, Agustín CEREZALES

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.