ABC MADRID 21-06-1996 página 83

VIERNES 21- 6- 96 LA FIESTA NACIONAL Corrida de la Beneficencia ABC Pág. 83 Unas gotas de arte de Curro Romero, más decidido que nunca Su Majestad el Rey honró con su presencia la Corrida de la Beneficencia Corrida de la Beneficencia. Siempre gala de Madrid. Festejos con múltiples circunstancias históricas, que van, desde la consagración de Luis Miguel Dominguín- ahora se va a cumplir el cincuentenario- a un mano a mano memorable de Ortega Cano y César Rincón, hace tan sólo cinco años. Un cartel presidido- como es tradicional- por Su Majestad el Rey, y en el que todos los toreros se peleaban antes para estar presentes en él. Ahora, los tiem- pos han cambiado. Las figuras ponen pegas: uno exige un mano a mano; otro pone de pretexto un contrato inexistente; promesas jóvenes se descuelgan pidiendo el oro y el moro. En última instancia se tuvo que recurrir al currismo fenómeno que nunca muere, a pesar de que muchas veces parece una muerte anunciada, que se ¿í vuelve a reavivar cada equis tiempo Su Majestad el Rey, los Duques de Lugo y la Condesa de Barcelona con un ¡levántate y presidieron la corrida desde el Palco Real anda! a la manera de Lázaro, para surgir más esplendoroso. conjunción, pero cuando se tienen sesenta y ¿Qué es el currismo Pienso que no sólo es dos años y se está con esas renovadas ganas, una forma de torear, sino ima manera de ser, no caben más que plácemes. Media estocada un modo de vivir, un agarrarse a la esperanza fácil. El toro cae; luego se relevanta y Ciurro de reencontrarse con una ilusión, con xm toreo tiene que descabellar tres veces. La ovación, al de formas perdidas, pero, también, una idiosin- ñnal, es fuerte, aunque la frenan algunos pecrasia, una filosofía, una especie de rehgión queños pitos de los insensibles. una rehgión que a base de creer lo que no se De nuevo, Romero en acción ante el cuarto, ve de esperar años y años el soplo mágico, al que se le ve escaso de fuerzas. Curro se esnos hace ser partícipes de un verdadero sueño fuerza con el capote y ejecuta una buena verócuando se torna en realidad. Un sueño que, nica, así como una media por el lado derecho. muchas veces, ha sido verdad, nada de iluso- No se terminó de adaptar en las restantes. En rio. Siempre tangible. Pero el currismo que el quite pega tres lances armónicos, de pura nunca ha fallado en Madrid y es el único toreo estética, de marchosería y una media realque ha llenado Las Ventas fuera de feria en los mente prodigiosa. El bovino se cae mientras últimos años, no ha servido para que en esta que le colocan la segunda vara. Esplá interocasión acudieran a la Monumental nada más viene en im quite, aplaudido por luios y protesque tres cuartos de espectadores de su cabida, tado por otros. A nuestro juicio, le quitó irnos y es que la corrida se ha dado en fecha tardía. cuantos pases, que podían ir destinados a ima El púbhco recibe con una ovación a Su Ma- mejor faena de Ciuro. Romero prueba al toro y jestad el Rey, al que acompañan los Duques de se lo saca, al centro, entre las dos rayas. Éste Lugo y Su Alteza Real la Condesa de Barce- se apaga. Curro intenta estar en son. Se pelea lona. Ya está el primero en la arena. Una suave hasta- que ve que es imposible la brillantez. Se brisita que se agradece es handicap desfavo- le siguió viendo una desusada voluntad, recorable para los toreros. Curro no se logra aco- nocida en su mayoría por el púbhco. plar al veroniquear. Parece que trae ganas, pero éstas no las puede justificar. El de ToNada más rrestrella renquea después del largo castigo que le infiere el piquero de turno, José Muñoz. Paco Esplá venía a corroborar su triunfo isiEn el tercio de banderillas destaca Antonio drü. Pareció apuntar hacia el buen toreo que Chacón. Romero brinda al Rey- también lo hi- hizo en aquellas fechas en las verónicas iniciacieron sus compañeros- y saca a relucir unas les, que terminaron en un son de vulgaridad. ganas queno eran habituales en él. Lucha con- Banderilleó de forma fácil y de más a menos. tra el viento en los tanteos iniciales, se ve apu- Prueba al de Torrestrella con la franela, rado en la primera serie diestra, pero termina sacándoselo a las afueras. Muy buenos derecentrándose. En una segunda reencuentra el chazos con ese sabor nuevo que ha adqmrido sitio, la caricia, el mimo, la torería, y remata el ahcantino en su admirable veteranía. Mas con un ayudado precioso, tras haber adelan- todo queda en agua de borrajas. Tardea el de tado la muleta y embarcado la embestida. La don Alvaro en la segunda tanda y pierde los tercera tiene un tono embarullado, pero no se pies a mitad de ella. El tono de los pases es le puede negar la decisión que ha sacado en los muy inferior a la serie anterior, aunque reúltimos tiempos de su baúl de recuerdos. Dos mata con xm afarolado desempolvado de viejas derechazos más, el primero jaleado, y un ayu- tauromaquias. Torero cambio de mano y natudado de gusto. Cierto que falta un punto de rales de contenido vario- alguno bueno- Ficha de la corrida Plaza de toros de Madrid. Jueves 20 de junio de 1996. Corrida de la Beneficencia. Cinco toros de Torrestrella Nobles, primero, segundo y sexto, y deslucidos, tercero y cuarto. El quinto, del Conde de Mayalde, soso. Curro Romero, de grana y oro. Media y tres descabellos en el primero (ovación frenada con algún pito) Estocada baja y dos descabellos en el cuarto (división de opiniones al saludar) Luis Francisco Esplá, de azul marino y oro. Estocada, un punto bajá en el segundo (ovación) Media con derrame en el quinto (sUencio) Pepín Liria, de verde agua y oro. Estocada en el tercero (ovación) Pinchazo y estocada en el sexto (ovación) aguanta un extraño y los dobles pases de pecho parecieron elevar un trasteo qué termina siendo desigual y discontinuo en su final, además de largo. Una estocada baja, pero de buena ejecución, terminó con su rival. Pienso que pudo hacer más con su noble oponente. No mantuvo el ritmo que se adivinaba en un principio. El quinto, de Moura, fue devuelto a los corrales por su poca fuerza y sustituido por uno del Conde de Mayalde. Nada de particular pasó en el primer tercio, donde Esplá se mostró anodino. No cogió las banderillas, las dejó en manos de sus subalternos, y éstos pegaron un saínete. Luego, Esplá no se acopló para nada con su rival e incluso perdió la muleta. La verdad es que su antagonista era un sosaina sin trasmisión ninguna. Pepín Liria lanceó nervioso al tercero. El púbhco coreó con palmas de tango el tercio de varas por la poca fortaleza de la red. En los primeros muletazos Liria tuvo el error de doblarse por el morlaco, por lo que éste estuvo a punto de hacer una genuflexión. En unos derechazos posteriores denotó cierto gusto, pero tropieza al acabar uno de eUos y cae a la arena sin que, afortunadamente, su rival haga por él. Prosiguió con ambas manos, aguantando algunos extraños. El de Cehegín patentizó su reconocida valentía, con un contrincante que se había ido para arriba, manteniéndose entero tras los titubeos iniciales. Acabó con una estocada, entrando como una vela, de las que antes valían una oreja. Liria recibió al sexto con dos largas cambiadas, perdiendo en la segimda de ellas la tela. José Bernal picó con acierto y Alejandro Escobar se lució en banderillas. Liria empezó la faena con valor, con las dos rodíQas en tierra. Ya de pie, se pasó todo el toro por delante en uno de pecho. Encauzó y midió la embestida en una serie de forzados derechazos, y fue a más en unos naturales que denotaron una mayor cahdad. Mucho mejor una segunda tanda diestra, en la que junto a su habitual arrojo pareció apuntar una mayor plasticidad. Parecía ya todo encauzado con una nueva serie, conseguida de verdad y con su antagonista colaborando totalmente. Mas bajó el toro con la izquierda y, al insistir machaconamente en prolongar la faena, dejó pasar ei momento más plástico y se disipó lo que parecía conseguir en un principio. Al segundo envite volvió a matar con decisión. Y así terminó una corrida que se salvó gracias a Curro Romero. Sólo hubo goti- tas, pero que se siguen viendo con el mayor agrado y deleitación. José Luis SÜÁREZ- GUANES