ABC MADRID 11-01-1996 página 50

ABC Pág. 50 RAS una intensa y polémica gestación, el Congreso de- los Diputados aprobó definitivamente el pasado 14 de diciem- bre la Ley de las Telecomunicaciones por Cable. Tras la llegada de la esperada regulación se hace más necesario que nunca reflexionar sobre algunas características específicas que deberi ser contempladas en cualquier planificación del desarrollo del sector. A este respecto, pueden hacerse las siguientes consideraciones. Es de singular relevancia que los grandes núcleos urbanos queden divididos en varias demarcaciones y que en cada una de ellas se adjudique a un segundo operador la licencia para el tendido de las redes y la gestión del servicio. La división de las grandes ciudades es decisiva para que el servicio universal pueda llegar a ser una realidad en España. En los EE. UU. país pionero en el desarrollo de la industria del cable, se ha seguido ese modelo. Así, la ciudad de Chicago, por ejemplo, fue dividida en 5 demarcaciones, Nueva York en 6, Los Ángeles en 5, Filadelfia en 4, etcétera. Aunque lo más beneficioso para los operadores que ahora están en disposición de acudir a los concursos que se puedan convocar sería que el mercado quedase básicamente repartido entre la docena de grandes consorcios actualmente existentes, tal situación no sería beneficiosa para el país en su conjunto, ni para los consumidores, ni para la industria misma del cable. Es importante que él modelo de acceso al servicio de las telecomunicaciones por cable permita la entrada de tantos operadores como el mercado esté dispuesto a asumir. Hay que tener en cuenta la cuestión de las inversiones a realizar. Cuantos menos operadores haya, menos capital se aportará al mercado. Haciendo un cálculo de coste aproximado, a la baja, de 60.000 pesetas por hogar cableado, el coste total en la ciudad de Madrid sobrepasaría los 70.000 millones de pesetas. Se trata de otro argumento a favor de la idea de permitir la entrada del mayor número de operadores posibles. También debe considerarse que, si intervienen múltiples operadores simultáneamente, el desarrollo de las redes será más rápido y el servicio podría prestarse a toda la comunidad en un tiempo razonable. Lo contrario, que un sólo operador obtuviese una licencia para todo el territorio de una gran demarcación significaría, en la práctica, que ese operador concentraría sus esfuerzos iniciales en las zonas más rentables e interesantes de la demarcación, quedando los núcleos menos atractivos postergados en la Implantación del servicio. Teniendo en cuenta el tiempo que llevan esperando los consumidores para que sus hogares sean cableados, éste es un argumento a tener en cuenta. El que haya muchos operadores significa no sólo mayores cantidades de capital (como ya he señalado) sino además mayores posibilidades de crear empleo, con la subsiguiente mejora del desarrollo económico. Dividir las grandes ciudades en varias demarcaciones supondría también evitar riesgos innecesarios. Si un operador tiene dificultades financieras, técnicas o de otra índole, algún operador de las demarcaciones vecinas podría suplir sus carencias. La división en demarcaciones asegura que el cableado y la prestación del servicio puedan ser una realidad. Si cualquier operador experimenta dlfi- TRIBUNA ABIERTA JUEVES I M- 9 6 T LAS TELECOMUNICACIONES POR CABLE EN ESPAÑA tudiados y discutidos en su fase de elaboración. Cuestiones como la compatibilidad de los convertidores y la interconexión de las redes son esenciales. La segunda red, una vez Por Javier CREMADES construida, funcionará cultades financieras en su sector, es más fácil como una sola red a través de la interconeque haya otro dispuesto a salvar la situación, xión. Es necesario unificar Jos niveles estándar con lo que se prevendrían posibles situaciodel servicio para garantizar la intercambiabilines indeseables. dad. Desde un punto de vista operativo, una vez Otro punto básico es que se debe facilitar el que se haya pasado el cable por 200.000 hoacceso a las grandes concentraciones de gares, los niveles de las economías dé escala usuarios, como los bloques de pisos, etcéhacen su aparición. A partir de esta cifra, el tera. Los accesos obligatorios deben estar negocio puede ser mayor, pero no necesariacontenidos en la licencia municipal. mente mejor, las ventajas que conlleva dividir Asirriismo, el segundo operador debería gola ciudad en demarcaciones, no tiene por qué zar de los mismos derechos que Telefónica en impactar negativamente en los criterios de nelo que se refiere a derechos de paso por la, gocio del operador. red, conductos de acceso, posibles ayudas, Al mismo tiempo, la existencia de múltiples etcétera. operadores conllevará una mayor creatividad Son comprensibles las razones de orden en las ideas de marketing, en la programación político que fundamentaron la premura con y en producciones. locales. Se proveerá al que el PP impulsó los procesos concesionaconsumidor de una amplísima variedad de les en varios Ayuntamientos importantes. contenidos, con- los que se asegurará la caliTanto en estas iniciativas que parecen seguir dad de la oferta del cable. adelante, como en los nuevos concursos que En cuanto a los temores que han acomSe convoquen con arreglo a la nueva Ley, el pañado a las inversiones extranjeras, entiendo plazo de presentación de ofertas debe ser lo que la restricción a las mismas debe aminosuficientemente extenso como para permitir la rarse toda vez que la globalización de la ecoelaboración de detallados y rigurosos planes nomía y el proceso de construcción de la técnicos, planes de negoció, cálculo de riesUnión Europea apuntan a una ineludible libegos e inversiones, etcétera. En este sentido, ralización internacional de aranceles e inversería importante que se respetase un plazo siones. No tendría sentido restringir la entrada mínimo de cuatro meses. De no ser así se coa empresas como las norteamericanas, pionerrería el riesgo de obligar a los operadores a la ras y expertas en el sector de las telecomunielaboración de propuestas no realistas y poco caciones, que pueden aportar importantísimas fundamentadas (y a la larga invíables) cantidades de capital, además de que faciliLa cláusula de reversión de la red al patritarán un know- how de relevancia en un mermonio municipal transcurridos quince años cado como el español, coh grandes riesgos desde la concesión que se prevé en el pliego de malformación inicial por las difíciles cirde condiciones técnicas que ha elaborado el cunstancias que ha atravesado (ilegalidadAyuntamiento de Madrid en vistas a su propio alegalidad del vídeo comunitario, protección concurso municipal, constituye, una seria difide la jurisprudencia constitucional, proyecto cultad para cualquier operador interesado en de ley, concursos, etcétera) el negocio. De un lado, oo de aría de ser paSi se quiere permitir una competencia efecradójico el crear un competidor al operador tiva a Telefónica de España, S. A. entonces estatal para que después se convierta en uno se debería impedir que esta compañía preste municipal. Esta cláusula, si no es estudiada servicios de televisión hasta que no se autoricuidadosamente, tiene como primer efecto la zase al segundo operador a distribuir a su vez huida del capital necesario para construir sistelefonía. vocal básica. Es el llamado modelo temas con alta tecnología. Los operadores de simetría que siempre ha defendido el Parsólo acudirán a los concursos si se les ofretido Popular. cen las debidas garantías de que podrán reEn lo que se refiere a los reglamentos técninovar su licencia al término de la concesión, o cos, éstos deberían ser cuidadosamente esen el peor de los casos, que serán indemnizados con un precio justo. Por otro lado, el plazo. de duración de las, concesiones que se fija en el mencionado pliego (20 años) parece adecuado, dada la lenta amortización de los activos en el sector del cable, estimada en un mínimo de siete u ocho años. La fuerte carga financiera que A toda velocidad. Poniendo su anundo por suelen conllevar estas inversiones parece palabras en ABC. aconsejar un período concesional (al menos inicial) de la duración prevista. De lo contrario, en ciertas localidades instalar una red de cable no llegaría a ser rentable o implicaría asumir un riesgo excesivo de que no lo sea, lo que haría muy dudoso que en tales demarcaciones lleguen a existir proyectos serios y adecuadamente sólidos. t o s futuros operadores, dentro y fuera de nuestras fronteras, están ya en la línea de salida. España se ha convertido en el último gran mercado europeo en el que la industria del cable aún no ha entrado de lleno. Once millones de hogares y unos 700.000 millones de pesetas están listos para ser invertidos de aquí al año 2000. VENDA SU OeHE SOBRE m MARCHA rr n