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ABC MADRID 06-02-1995 página 80
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ABC MADRID 06-02-1995 página 80

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página80
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80 ABC CAMPEÓN LUNES 6- 2- 95 E I g ol má s 1 a r g o Suker intenta regatear a Lasa, que le corta el balón Lasa aprovecha el rechace largo, para superar en velocidad a Suker, que sale I en su persecución Lasa levanta la cabeza, observa I que Unzúe está fuera del área grande y opta por el remate de larga distancia 2- 0: Hierro explota la veta buena de Raúl Madrid. Ignacio Torrijos Cortocircuito del Madrid en el juego, pero no en el marcador. El Sevilla cegó sus cauces clásicos. Fue el partido de Sanchís, Hierro y Lasa. Y el de Raúl, a pesar de sus fallos en el remate. El espectáculo de Raúl desmarcándose supera al de Raúl fallando. Uno de sus desatinos más palmarios ante Unzué, por ejemplo Fue un partido pelma, antipático para los jugadores adictos a la fluidez. El Madrid topó con un Sevilla casi impermeable. El fútbol líquido, deslizante, de Laudrup y sus aguadores se encharcó en la doble línea defensiva del adversario. La pelota circuló siempre pesada por donde otras veces fluye tan ligera. El Sevilla no quería nada más. Deseaba más, quizá, pero eso es distinto. Entre el desear y el querer está como diferencia la voluntad, la aportación de los medios necesarios. El Sevilla no allegó esos medios (empezando por Moacir, el medio centro, uno de esos jugadores que no van más allá de la pulcritud y el aseo, o sea un jugador bastante malo) Enseguida se insinuó la tarde como especial para los zagueros, guardametas incluidos. La primera jugada interesante fue para Unzué y Buyo, a los cinco minutos. El portero del Sevilla- que (minuto 65) fue precedido por quince segundos para la degustación: corrió hacia la banda mientras le ordenaba por señas a Zamorano que se cruzara con él; después, engañó, despistó y se embaló hacia el área, con otra orden para el pase de Laudrup. Siempre es así. Puro instinto. No es raro que encontrara premio. los blancos contra la negación del Sevilla. Esta concreta apuesta la ganó el Sevilla: el Madrid apenas jugó. A cambio de esa pobre satisfacción, el equipo de Luis perdió el partido. El Sevilla pagó su propia racanería. Lasa, que está jugando muy bien, marcó el gol pirotécnico. Queda como un símbolo: este Madrid puede alumbrar incluso a un futbolista como él, de clase tenue. Antes, habían asumido la carga, desde atrás, Hierro y Sanchís. El Madrid se había pasado el primer tiempo devolviéndole él balón a Hierro. Era él, en fin, quien tenía que hacer algo. Lo hizo como cuando era centrocampista, a lo grande (salvo que entonces, además, remataba Ja jugada) Cortó un pase, cruzó el campo y sirvió el gol a Raúl y el triunfo al Madrid. Mal partido con buenas conclusiones para el equipo blanco: el recurso salvador siempre surge. Arbitro: Daudér Ibáñez. I Mostró tarjeta amarilla a Dumitrescu, Moacir y Hierro j G o l e s 1- 0, m. 62: Raúl, con la derecha, a pase de Hierro 2- 0, m. 90: Lasa, desde su propio campo. emuló con este detalle al del Madrid- lanzó desde su puerta a Suker, dejándolo solo ante Buyo. Se vio Suker en una situación parecida a la de Julio Salinas frente al italiano Pagliuca, en el último Mundial. Un poco más difícil era; no mucho. El croata se asustó ante Buyo, que eludió el 0- 1. La vacilación de Suker dejó para siempre el partido en poder del Madrid. El empeño creador de Ojo crítico Así jugaron Real Madrid Buyo: Bien. Quique Sánchez: Aceptable. Hierro: Muy bien. Sanchís: Bien. Lasa: Muy bien. Luis Enrique: Mal. Milla: Mal. Amavisca: Mal. Laudrup: Mal. Zamorano: Mal. Raúl: Regular. Martín Vázquez: Sin calificar. Lo mejor: La pareja HierroSanchís. Seguros en defensa e impulsores en ataque (he ahí el 1 0) Lasa, listo y preciso en el 2- 0. Los desmarques de Raúl. Lo peor: Los medios y los delanteros no encontraron vías para el pase y estuvieron torpones en los intentos individuales. Laudrup falló en sus facetas clásicas. Raúl y Zamorano, sin tino. LASA, EL ULTIMO REFLEJO El gol de Lasa es el vivo reflejo de un equipo que está en racha, que, juegue bien o menos bien, casi siempre gana, entre otras cosas porque es bastante superior a los demás. Lasa ha sido el último en llegar al once titular. Y casi por obligación. La lesión de Míchel hizo que Vaidano colocara a Luis Enrique en su puesto, y Lasa se quedó con el lateral izquierdo. Hasta aquel partido en Valladolid, Lasa sólo había disputado un encuentro completo. Desde entonces ha encadenado seis partidos como titular. Justo los que el equipo lleva sin recibir un gol. Cada día ha ido a más. Se acopló perfectamente al sistema y en el plano individual comenzó a estar siempre entre los mejores. El tanto de ayer es el reconocimiento a su esfuerzo, amén de servir para resumir un partido poco brillante, pero intenso desde el punto de vista táctico. El Sevilla, como tantos otros, vino a retrasar su derrota, y el Madrid tardó más en encontrarla porque estuvo menos inspirado. Nada más. Enrique ORTEGO Sevilla Unzué: Regular. Cortijo: Mal. Prieto: Aceptable. Diego: Bien. Martagón: Aceptable. Soler: Regular. Rafa Paz: Regular. Moacir: Mal. Dumitrescu: Regular. Suker: Regular. Estebaranz: Mal. Tevenet: S. C. Lo mejor: Su trama defensiva ofuscó al Madrid. Un 5- 3- 2 esmerado y muy poco poroso. Las líneas de pase fueron cortadas. Lo peor: Obsesionado en la defensa (y siempre llega el gol ante el Madrid. Cuando se estiró, era tarde. Esperar la suerte, antes, era demasiado. Mal en los pases de contraataque. El hallazgo de Moacir,

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