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ABC MADRID 21-01-1994 página 85
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ABC MADRID 21-01-1994 página 85

  • EdiciónABC, MADRID
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VIERNES 21- 1- 1994 ESPECTÁCULOS -Crítica de teatro ABC Pág. 85 Feliz cumpleaños, señor Ministro dura estampa de un mundo marginal Título: Feliz cumpleaños, señor Ministro Autor: Rafael Mendizábal. Dirección: Fermín Cabal. Escenografía: Ana Garay. Vestuario: Félix Ramiro. Iluminación: José Manuel Guerra. Intérpretes: Tomás Gayo, Iñaki Miramón. Valentín Paredes, Paula Sebastián, Luís Hostalot y Antonio Carrasco. Teatro: Centro Cultural de la Villa. Avalada por un prestigioso jurado que le cita el impulso de la venganza, es arriesgado. concedió el Primer Premio de Teatro Ciudad Hay unidad de tiempo, de lugar y de acción de San Sebastián, se estrena en el Centro en la estructura dramática calculada por ManCultural de la Villa la comedia de Rafael Mendizábal. El descuido de que el cadáver desdizábal Feliz cumpleaños, señor Ministro nudo que aparece en el momento propicio de Mendizábal es un autor experimentado y esa acción real y que corresponden a un supeculiar. En nueve años ha estrenado, con ceso que ha ocurrido antes de que la acción ésta, doce piezas que denotan una decidida- l a reunión de los amigos- comience no se atención al mundo actual con sus personajes parece al muerto. Al último personaje, el del y sus problemas en que se describe un ammomento no real, es decir no presente, y no plio panorama de caracteres individuales y de pasado, no se parece nada a Toni, el intruso problemas personales o sociales que, en su que ha roto la profunda relación homo, del mayoría están en la calle, corresponden a un Ministro y del invitante. clima social en permanente mutación y camPor lo demás, la acción, el tiempo o tiembio. Aquí, en Feliz cumpleaños, señor Minispos que son tres: el pasado evocado, el del tro Mendizábal plantea con duro realismo un crimen conocido posteriormente y desencadegrupo marginal en los comportamientos pernante de la resolución trágica inevitable y sonales aunque, de mejor o peor manera, sancionadora, y el de ese encuentro triste de muchos de los personajes estén inscritos en cinco amigos que en su vida juvenil se comuna sociedad convencional en la que han alprometieron por los contactos homosexuales, canzado niveles diferentes. denotan una acertada aventura constructiva Se trata de cinco homosexuales a los que del autor, bien servida por ios actores, el director y la refinada escenografía. uno de ellos convoca en su casa a los otros cuatro. Todos iniciaron juntos su vida escolar, todos se iniciaron en juveniles prácticas homosexuales que algunos mantienen en distintos grados; que algunos ocultan por que han Esta nueva creación con la que Els Joglars alcanzado posiciones que imponen el silencio, el disimulo, mientras otros, como Ro- Viene una vez más a Madrid, piedra de toque de su permanente aventura creadora, es algo berto, que es un travestí que se prostituye, así como una atroz diatriba contra las formas están descaradamente integrados en la marconvencionales del arte, en el caso de que ginalidad. no sea una antiópera. Desde luego, es fiel al El autor, prepara la situación inicial, el enestilo tradicional del gran grupo catalán, un centro de los antiguos camaradas por el ciejercicio más de provcación. tado ocupante de la casa, liberándose del esAlbert Boadella nos propone en forma de tricto realismo. Los personajes llegan, se desenorme alegato contra lo convencional y criben directamente dirigiéndose al cuantos espurios personajes o instituciones espectador. Tras esa teatralidad digamos bastardean la pureza del simple acto creador. pura, con la que se informa de la condición Unos oficios de canallas, juglares, y payade cada uno, el realismo se inserta en los cosos a quien don Josep, viejo acomodador loquios que los amigos sostienen entre ellos. de un teatro, El Nacional, cerrado y promeTodos se sienten comprometidos por su patido al derribo, selecciona, educa y adiestra sado homosexual. Tras veinte años de no en los ruinosos salones desiertos del local, verse, confiesan sus fallidas esperanzas, sus vendrá a ser el movimiento regenerador resufrustraciones sociales, sus antiguos contactos citador de la belleza. de lo que, de pronto se saben esclavos. Fiel a su estilo, Boadella lleva al extremo la La llegada, finalmente, del que ha llegado a violencia verbal, la brutalidad primera de los Ministro, intensifica la situación dramática. personajes reclutados para que en ellos Todos tienen motivos de resentimiento connazca un nuevo teatro vivo y puro, para lo trario. Estamos ante el viejo sistema de las cual, la condición primera es que nada sepan construcciones policíacas. Cuando aparezca de teatro, jamás hayan intentado o conocido el muerto, el asesinado, todos serán sospeuna acción teatral. Serán, pues, los elegidos, chosos: los buenos salvajes otra vez: los poseedores En ese planteamiento, Mendizábal introde la incocencias. Es decir de la pureza. duce otro fenómeno técnico. La atemporaliEl gran truco del juego consiste en que a la dad. La huella de Priestley aparece en ese rudeza inicial de estos personajes, se enrecurso. Sigilosamente se dan los actos del frente el violento contraste de que desde su suceso al espectador y en ese juego, el trateórica torpeza, de su brutalidad, broten, probajo director de Fermín Cabal corresponde a gresivamente, preciosos fragmentos de Risu notable pericia de autor. Aunque los pergoletto la ópera de Verdi que Don Josep, sonajes muestren más sus fallos humanos y en signo o símbolo de protesta, atribuye sus menudas querellas personales que unos constantemente a Shakespeare. El juego funsentimientos o cuestiones humanas y sociaciona perfectamente porque Manuela Castales de más alta preocupación dramática, rediva, o sea Begoña Alberdi, es una estusultan bien definidos. Del travestí al Ministro, penda soprano de hermosa voz y refinada son cuadros humanos diferenciados, netaescuela; Finito, en la que persona de Joan mente definidos. Gallami un excelente barítono y los personajes que se definen como torpes aprendices El punto difícil, el momento intemporal en son los notables músicos, el violinista Angeque el asesinato de un intruso, otro invertido let, el violonchelista, Fontserpe, la jugadora que ahora es el predilecto del Ministro y susEl trabajo director de Fermín Cabal corresponde a su notable pericia de autor La pieza resulta más mostrativa que argumentativa y conduce directamente a una conclusión final: ser homosexual practicante no resulta conveniente. Bien Paula Sebastián, hace vigorosamente un travestí. Hay momentos en que parece una mujer y otros en los que saca visos de hombre. Exactamente. Iñaki Miramón es el de siempre en un tipo que pide mayores cuidados psicológicos. Gayo, Paredes, Hostalot, los cinco mosqueteros logran una ajustada composición, completa en una buena escena, y la extratempo- r ral, por Carrasco. Espectáculo muy teatral que debe funcionar bien ante el público. Lorenzo LÓPEZ SANCHO El Nacional preciosa antiópera protesta de Els Joglars de viola Minnie Marx que interpretan; fuera de contexto, en situaciones paralelas y renovadas sobre las de la preciosa ópera, números que adquieren nueva y distinta belleza como, por solo citar algunos, el Caro Nome Cortigiani vil razza La vendetta o, para un final que lleva todo el juego a su momento más sugestivo, de más lograda belleza La Naledizione El maestro de orquesta, el personaje central de esta provocativa, inteligente, ingeniosa aventura, Don Josep, en algunas de sus frases, Boadella evoca otras de aquel gran periodista y escritor catalán, grande y no olvidado amigo de éste crítico, Josep Plá, en una interpretación llena de ironía, de agilidad. Todas las cualidades características de Els Joglars llegan en este trabajo a sus eficacias mayores. Las incidencias se suceden en bien trabadas escenas en las que Boadella juega con- y alegría y moderna estética los contrastesd el sonido, las gracias en el movimiento, los bruscos pasos, especialmente en los momentos finales entre los sonidos de los cantares y las músicas y la brutal estridencia de las máquinas que empiezan a demoler el viejo edificio, valiosa metáfora en que se describe y se condena la destrucción de hermosas formas del arte por el escritor de las máquinas. Llena de símbolos, de graciosos usos antitópicos de numerosos tópicos, de atroces acusaciones, condenas de muchos valores en citas más abstractas o genéricas que concretas con lo que el tono condenatorio de los Juglares divierte a todos sin enfadar a nadie. Finalmente, el gusto por el choque de lo kitchs voluntariamente buscado y la belleza; operística, bien cantada de los pasajes del Rigoletto levanta al máximo el placer de un espectáculo en el que Boadella y Els Joglars resucitan sus creaciones mejores. L. L. S.

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