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ABC MADRID 13-11-1989 página 32
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ABC MADRID 13-11-1989 página 32

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC. póg. 32 TRIBUNA ABIERTA LUNES 13- 11- 89 UANDO en un Pleno de las Cortes de junio pasado Felipe González, rememorando a la General Motors y los Estados Unidos, dijo seriamente que lo que es bueno para Europa, es bueno para España hacía bien si no encontró otros argumentos para defender su gestión como. presidente de la Comunidad. Mas si los españoles aceptáramos su frase, seríamos unos simples. Me remito al contenido de mis anteriores artículos y añadiré unas apostillas finales. Al día de hoy es preciso aceptar que los viejos países han de integrarse en áreas comerciales superiores para competir en condiciones aceptables. Pero ello no significa que necesariamente la integración haya de traducirse en unidades políticas o superestados. Ni evita que la unión pueda generar desventajas, sobre todo en ciertos períodos. El Instituto de Estudios Económicos, al publicar en su número 4 de 1988 los informes de Cecchini y Catherwood sobre Las ventajas del mercado único europeo y Las consecuencias institucionales del coste de la no Europa refleja algunas afirmaciones elementales que, no obstante, conviene recordar. Se parte de la consideración cuantificada de los beneficios adicionales que el mercado único representará para Europa. Pero con dos precisiones. Una es que también los efectos negativos de una crisis de confianza serán tanto mayores cuanto más abierta esté una economía, es decir, que la unidad puede convertirse en un mal en ciertas coyunturas. Otra es que, aun en épocas favorables, las indudables ventajas económicas de la unión, lo son para el conjunto, pero no para todos los sectores, empresas, ni para todos los países, pues algunos pueden resultar perdedores netos. No obstante, parece claro que frente al Este, pero especialmente ante los retos de Norteamérica, Japón y en general el área del Pacífico, la integración económica europea es hoy una óptima solución, por su potencial económico unido, por su contigüidad geográfica y por el común sustrato cultural greco- judeo- cristiano. Y una unidad económica de tales características puede desembocar en una más perfecta unidad política. Sin embargo, esta solución que hoy es buena para los países de Europa, no tiene por qué serlo para todos ellos dentro de diez o veinte años. Ni la historia anima a considerar consolidada Europa, ni el análisis de voluntades políticas futuras lo asegura, ni el puro factor geográfico es decisivo. Tampoco existe hasta ahora un patriotismo europeo. La historia de Europa recoge una serie indefinida de matanzas entre sus civilizadísimos pueblos. Las dos últimas y más trágicas, en este mismo siglo. Y si no existe ese patriotismo, el tema de si España debe o no integrarse y participar en Europa hay que definirlo por puras razones de conveniencia. Pragmáticamente. Porque España es nuestra patria, mientras que los europeos son nuestros nuevos socios. Yo estoy dispuesto a ser solidario con Europa, pero me sacrificaré antes por los andaluces que por los parisinos. Y no más por los parisinos que por los bonaerenses. Pensando, pues, en el bien de España, creo que hoy nos es útil integrarnos en Europa, aunque no cabe asegurar que a la vuelta de unos lustros no nos convenga otro tipo de uniones. Y aún hoy, nos conviene según y C conclusión de que hoy el socialismo sólo puede implantarse de verdad si se hace desde Europa y para toda Europa. Es decir, no sólo Por José Manuel OTERO NOVAS afirma que sea posible una Europa socialista, sino que sostiene que el socialismo sólo es cómo sean las condiciones de la integración. viable a nivel europeo y que hay que establePorque las que hemos aceptado, es muy pocerlo efectivamente desde las instancias cosible que no sean las óptimas y ni siquiera munitarias. Y cuando llegaron las elecciones equitativas. Algunos datos así lo indican. al Parlamento Europeo de 1989, en su última Nuestra balanza comercial con los países de intervención en TVE, postuló que Europa se la CEE arrojaba en 1985, año anterior a la abra a los países hoy comunisa d h e s i ó n un superávit de tas, que con la perestroika se 269.000 millones de pesetas. En quedarán previsiblemente en so 1986 pasamos a tener un déficit cialistas, con lo cual, dijo él, se de 194.000 millones, que ascenasegurará para el futuro una Eudió en 1987 a 381.000 millones, ropa de socialismo democrático. y en 1988 a 924.000 millones. Si como consecuencia de cuáles En 1989 parece que el déficit va son los países que se integren a rondar los 1,4 billones de peen Europa y cómo y cuándo se setas. Pese a tener con mucha produzca la integración, Europa diferencia la más alta tasa de va a ser estructuralmente sociaparo de Europa, estamos finanlista, desde el punto de vista del ciando, cada año en mayor proprogreso económico y social de porción, la creación de empleo España, de su modernización, fuera de nuestras fronteras y de la generación de empleo y de perdiendo cotas de mercado en la felicidad de los españoles, nos perjuicio de nuestra producción interesa mucho más una España J. M. Otero Novas industrial. Dicho en otros térmiliberal y autónoma, con tratados Abogado nos: aun suponiendo, en contra preferenciales o de mera asociade las tendencias actuales, que ción con la CEE y o con otras a partir de 1990 nuestro déficit áreas, que estar integrados en Europa. Una comercial con Europa no aumentara, el ritmo España integrada pesa hoy el 12 por 100 de de 1989 (1,4 billones) en cerca de veinticinco Europa y ha de someterse a las decisiones de la mayoría en el futuro. Mientras que una años habríamos perdido en favor de nuestros España autónoma tiene el 50 por 100 del socios europeos una cantidad igual a todo peso político en una mesa de negociación nuestro PIB actual (39,9 billones) ¡Y aún escon la CEE si juega bien sus bazas alternatitamos hasta 1992 en período de transición, vas. con medidas protectoras para España! Por su parte, el campo español, que siempre miró con envidia al francés o alemán, se queja de En el presente, y por diversos motivos que los sacrificios que ha de hacer en favor del no he podido explicar en este trabajo, yo sigo comunitario. Y en el mar, no es nada estimusiendo un firme partidario no sólo de una Eulante leer las listas de los anexos IX y X en ropa unida, sino también de nuestra integrarelación con el artículo 158 del Acta de Adheción. Es un meta positiva e ilusionante. Pero reflexivamente y sin ingenuidades. Lo cual sión, que deja en 150 el número de buques exige: españoles con posibilidades simultáneas de pesca en aguas comunitarias, rebajando susRenegociar las condiciones de nuestro intancialmente nuestros derechos históricos. greso hasta asegurarnos que al menos no damos más de lo que recibimos y aunque Cierto que la integración nos debe reportar nuestros socios dejen de aplaudirnos. otras ventajas. Que la economía española se Abstenernos de cuanto signifique cesión modernizará. Pero la modernización será corirreversible de nuestra soberanía o capacidad ta y transitoria, no sabemos aún si a un prereal de autodeterminación, por si en algún cio admisible y quizá la habríamos conseguimomento tenemos que ejercitarla, o simpledo más intensa si el desarme arancelario lo mente invocarla a efectos negociadores. Culhiciéramos con Japón o USA. tivando siempre a nuestros eventuales socios Y no vale el consuelo de que la integración alternativos. europea es un seguro de libertad. En un arOponernos a cualquier proceso de ampliatículo anterior ya razoné contra esa engañosa ción que por su composición sociológica geapariencia. Pero no soy yo sólo quien espenere una Europa estructuralmente socialista culativamente concibe la posibilidad de una aunque lo sea democráticamente. Europa socialista. También lo dicen mis adEjercer dentro de España un eficaz control versarios políticos. En el prólogo al Manifiesde la política de nuestro Gobierno en Bruseto por una nueva izquieda europea de Peter las, que sólo excepcionalmente requerirá Glotz, Felipe González razona cómo es impounanimidades, y cortando la tentación de que sible que con el actual grado de internacionasea usada como factor de distracción y domilización pueda un país europeo llevar a cabo nio interno al modo que se recomienda en una política interior socialista. Y llega a la El príncipe por Maquiavelo sobre el ejemplo de Fernando el Católico (capítulo XXI) Volcar en las elecciones europeas, en ¿NECESITA CLASES cuanto el Parlamento sea efectivo, todo nuesPARTICULARES? tro esfuerzo para que los partidos triunfantes sean los que garanticen libertad, eficacia, La Sección de Anuncios avance tecnológico, solidaridad y madurez por Palabras de para la Europa unida. Porque a pesar de nuestro entusiasmo, nada de ello nos lo va á se lo resuelve. regalar la mágica Europa. Europa como mito CODA

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