ABC MADRID 12-04-1988 página 18

18 ABC OPINIÓN Panorama MARTES 12- 4- 88 LA NOVELA DEL SÁBADO E dice un novelista que todos los sábados llevan dentro del corazón una nóvela; novela corta, ya que, de no serlo, el sábado, en su profundidad y en su víspera, resultaría insorportable, cansado, excesivamente barroco. Puede la novela terminar con las primeras luces del domingo y no pasa nada. Pero, sin embargo, el domingo hay que dejarlo en un especial lado del alma para que durante la tarde festiva se estremezca el rumor de la tibia tristeza, la de todos los domingos del mundo, que ni la filosofía sabe en qué consiste. Y consiste en que se produce, en que es real, en que se mete sin avisar por las rendijas de los sentimientos. La tarde del domingo puede ser también una novela del sábado. Me gustaría comer un poco de carne, aunque fuera de una especie protegida. Entre mis manos, o al alcance de ellas, hay otras novelas del sábado, pequeñas como hormigas de la literatura, ya heridas por el tiempo, pero resistiendo vigorosamente ante el espectáculo lírico o dramático de la muerte. Huelen estos Tratados del sábado a caja de mariposas disecadas, a café nostálgico, a OS señores diputados no asisten a las duce el absentismo del diputado. Ante el caviolín cansado, a mujeres entristecidas por el sesiones. Es natural. ¿Por qué han de tastrófico efecto de tal absentismo, comprodesdén de la Historia. Quienes escribieron estas novelas- L a tomarse la molestia si la mayoría sigue em- bado recientemente por un grupo de la pleando el rodillo? Los señores diputados de llamada- n o se sabe por qué- oposición, el novela del sábado. Precio del ejemplar, seis pesetas -vivieron el sábado y la novela; es la mayoría, tampoco asisten. Picotear tapas señor García Tizón desea establecer las mulen el bar de las Cortes, no es asistir. Pero tas como sistema corrector. decir, ese trozo de vida que deja de estar están en la Casa Cuando suena el timbre oculto durante unas horas para que la literaProbablemente, las multas a los señores tura pueda prorrogar el argumento y la frase, acuden al hemiciclo y votan. Si hace faíta. diputados que se queden en casa viendo los Todo esto sucede en el seno de la lógica partidos del Real Madrid por la tele, o en el el amor, la mirada y la música del amor, hasta el límite de la eternidad. Tamaño de la no- más impecable. La democracia que hemos bar de las Cortes jugando a los chinos con instaurado, no es una democracia parlamen- sus colegas de los otros partidos, serán tan vela, el de media cuartilla. Extensión, tres cuartos de hora de lectura. Hoy, más tiempo, taria. Las listas cerradas han reducido al di- incobrables como las que la ORA pone a los putado a simple número, poseedor de una automovilistas que aparcan mal. Y es que en precisamente porque ha pasado el tiempo y hay que leer despacio lo que se escribió para llavecita que funciona bajo la batuta en forma ninguno de los dos casos la medida responde de dedo, o del dedo con autoridad de batuta, al fondo de la cuestión. la posteridad. He descubierto con gozo estos ejemplares, de un diputado de categoría especial, llamaLo que falla no es la voluntad de trabajo de algunos, de La novela del sábado Estaban do portavoz. los diputados, que no parece mucha. Lo que Y, sin embargo de esta ningunización del falla es el sistema. El miedo al parlamentarisescondidos en mi biblioteca detrás de las obras de Goethe. Y una noche, al intentar re- diputado, el señor diputado posee algo muy mo devora como una carcoma la sustancia leer Las afinidades electivas tuve que peculiar: su escaño. Desde que en otras Cor- misma del parlamentarismo. De ahí que la abandonar la empresa, pues me encontré tes el señor Clavero Arévalo tralado impune- calle sea el centro de las reivindicaciones socon la síntesis narrativa, con la difícil breve- mente su escaño desde la mayoría ucedea al ciales y políticas. El otro día- m e decía dad, con las industrias literarias, sociales y corralito del grupo mixto, un hecho trascen- ayer un simpático taxista- batí mi propio réhumanas, de Baraja, Francisco de Cossío, dental quedó establecido. Pese a las listas cord. Me. encontré cuatro manifestaciones en Pemán, Ledesma Miranda, Musset, Noel Cla- cerradas, a las listas de partido, el escaño no un solo recorrido. ¿Para qué van a estar los rasó, Neville, García Serrano, Delibes, Car- es propiedad de las siglas. Es propiedad del diputados en el escaño si todo acaba por dismen Laforet, Elena Quiroga, Cela, Zunzune- nombre y apellidos del señor diputado. cutirse en la cochina calle? Por eso, aunque los partidos absorban la gui, Castillo Puche, César González- Ruano, Lorenzo LÓPEZ SANCHO Dolores Medio... Extraje el filón de la segun- esencia de la democracia parlamentaria meda fila. Era La novela del sábado de los diante la asunción de la representatividad años cincuenta y tantos. Un mundo ante mi conjunta por un superdiputado llamado portavista. El tiempo ha pasado y no ha pasado. voz, los señores diputados, en el fondo y si al buen comer llaman Pretendo leer todas las novelas en seguida se atreven, hacen lo que les da la parlamentaria gana. para encontrarme con la fantasía de los rinEn aquellos tiempos del reinado de Don Alcones, de las pocas líneas, del amor de entonces, de los espacios ocultos; es decir, con fonso XIII y en los otros, más revueltos, de la el alma del pasado que, tal vez, goce de una segunda República, la institución era realespecial ternura, que no puede ser otra que menté parlamentaria. Cada diputado podía pedir la palabra cuando le parecía oportuno. la del viejo calendario hallado en el desván. Cada diputado se permitía usarla durante el Salpicón de marisco José Luis MARTIN ABRIL tiempo que consideraba necesarios. Por eso Bacalao a la riojana hubo un momento histórico en que las mayoMerluza de pincho rías tenían que utilizar la llamada guillotina Lechazo de Aranda contra el efecto deletéreo por retardante dé los. interminables discursos de oposición. Allí había un problema que fue liquidado en José Ortega y Gasset, 83. S 402 15 83 1936. Lo de ahora es otro problema no meCervantes, 28. 3 429 22 55 CREADORES DETVIOD nor. La afonía reglamentaria deí diputado pro- M Planetario L EL PARLAMENTO ANTIPARLAMENTAIIO