ABC MADRID 10-12-1987 página 14

Galería Mfama Serrano, 7 Tosar Granados Diciembre De 135.000 a 1.7000.000 pesetas Julio de Pablo Sala de la agencia Efe Espronceda, 32 Diciembre De 290.000 a 700.000 pesetas J 1 T: Pueblo mediterráneo H ACE veinte años que conozco y sigo a este paradigmático pintor andaluz que es Manuel Tosar Granados (Cádiz, 1945) En 1967 obtuvo el II Premio de Dibujo del Círculo de Bellas Artes de Madrid, un galardón muy significativo entonces; después vi su obra en certámenes tan importantes como la XXIV Exposición de Pintores de África y el III Concurso Blanco y Negro, en 1974. Y a propósito de la Exposición de Pintores de África: ¿qué se hizo de la mag- nífica colección de pintura y escultura que guardaba la antigua Dirección General de Marruecos y Colonias? Parece imprescindible que, por quien corresponda, se aclare qué fue de aquella colección. Por cierto que la etapa africanista de Tosar Granados fue tal vez la más espectacular de su carrera, y puede que la más original; una etapa que se desarrollaba bajo el clarificante emblema de la luz, proyectada ésta en los cuadros con una pulcritud y una novedad sorprendentes. Una pintura luminosa la de Tosar Granados, luminosa y nada luminista, en el sentido sorollista que tiene el género; luminista, en todo caso, tan genéricamente como lo entiende Manuel Conde: No solamente son luministas Sorolla y Mir, Beruete y Regoyos, sino también Velázquez y el Picasso de Antibes, y el pintor gaditano Manuel Tosar Granados, con esos deslumbrantes pueblos de Andalucía, que él estiliza desde sus vivencias personales y les da dimensión simbólica. Pintor simbólico y paradigmático de Andalucía, de esa escuela andaluza rigurosa y amable, selecta y populista a un tiempo. Gusta Tosar Granados traer a sus claros paisajes andaluces reminiscencias goyescas en tales figuras y grupos de personajes. Pero tal vez sea lo más personal de su pintura esta factura sutil, la limpidez de su paleta, la facilidad con que todo se desarrolla. Julio Trenas acaba de escribir un libro que nos introduce perfectamente a la obra de Toser Granados, pintor ya lanzado al gran mercado de Nueva York, reciente su exposetón en la Galena Schilter- Wapner. La exposición de Alfama resume muy bien esta pintura tan personal y tan excelente. ULIO de Pablo (Revilla de Camargo, Santander, 1917) es, como exactamente dice Martínez Cerezo La pintura montañesa 1975) un innovador del paisajismo español, a la manera que sus paisanos Pancho Cossío y Antonio Quirós lo fueron del bodegón y la Naturaleza muerta. Como nada cuesta predicar en desierto- dice Martínez Cerezo- por enésima vez, al cronista no se le caen los anillos a la hora de reafirmar que tenemos en el Julio de Pablo actual una de las más singulares personalidades del paisaje contemporáneo. Certeza que compartimos muchos, con lo que el desierto deja de serio y se puebla de afirmaciones que corroboran al pintor santanderino como uno de nuestros más sutiles y renovadores maestros del paisaje. Renovación nada extraña si viene de Santander, de la que antes vinieron los paisajes de Agustín Riancho y de Gerardo de Alvear, y aquel cubismo humanizado de la montañesa María Blanchard. Julio de Pablo pertenece también a esa estirpe de innovadores, y así lo advirtió aquel extraordinario catador de sensibilidades que era Gerardo Diego, que en Obra de Julio de Pablo uno de sus sonetos a Julio de Pablo concreta: Déjame a mí decírtelo. Tú aunas los misterios del bosque y de las, dunas y la mar verde y su rompiente alzada. ¿Estados de almas tus paisajes? Niego. Seres sin plazo, esencias del sosiego, perspectivas de música acostada... La obra de Julio de Pablo exige su gran antotógica en uno de nuestros centros oficiales de exposiciones. Miguel Acquaroni Galería Fauna s Montalbán, 11 N una suerte de nocturno zabaletiano reposan estas composiciones venecianas de Miguel Acquaroni (Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, 1925) pero así como en Zabaleta el cubismo se enreda sensualmente a Picasso, el poscubismo de Acquaroni se relaciona con Vázquez Díaz, que fue su maestro. Aunque más que de poscubismo podría hablarse de un rotundo geometrismo en los trazos, cuya estructura lineal sirve al pintor para encuadrar el color, como en un vitral imaginario. De tanto mirar al mar, Acquaroni descubrió que en cada centímetro de agua hay todo un mundo que descubrir dice Luis López Anglada. En el mar, en el paisaje y en cada uno de esos espléndidos bodegones en libertad que pinta Acquaroni, pues en su valoración prismática de la naturaleza y los objetos hay siempre una riquísima posibilidad de descubir cosas. Entre ellas la más importante: la entidad de cada una de ellas. El gran motivo de esta exposición es Venecia, a la que Miguel AcquaDiciembre De 175.000. a 350.000 pesetas E Venecia roni llega no sabemos si directamente o si a través de un hermoso por él dedicado a la reina del Adriático: Como lección que un día sentenciara Eugenio Delacriox en la pintura también del fango nace la hermosura que Venecia en su entraña evidenciara... Delacroíx había dicho que con lodo él pintaría la más deslumbrante carne de mujer y, antes, mucho antes, de barro se había formado la criatura, y todos los pintores de Venecia, como ahora Acquaroni, han idealizado la eternidad de Venecia sobre la cruel laguna que se la traga... Raro, infrecuente pintor este Acquaroni. M c JUEVES 10- 12- 87 O W M del desierto 14 ABC