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ABC MADRID 12-11-1987 página 22
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ABC MADRID 12-11-1987 página 22

  • EdiciónABC, MADRID
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Dalí, Cécile, Demart: ana herencia surrealista E L pasado 16 de octubre, el Juzgado de Primera Instancia número 19 de Madrid instruyó (as diligencias preliminares de un proceso por el que se requiere al pintor Salvador Dalí, marqués de Dalí y PúboL para que, en el día, hora y lugar que se señale, exhiba una serie de bienes prolijamente detallados: dos sillones de tela, una biblioteca rústica y los libros que la componen, una Venus de Mito con cajoncitos realizada en bronce, un espejo de tocador, tres iconos, un tapiz, un armario, dos bancos antiguos, dos candelabros de bronce, una sopera de estaño, un escritorio de marquetería, dos mesas de diferentes tamaños, un retrato de Gala al carboncillo, un biombo de tres hojas con dibujos del propio Dalí, una cabeza de Cristo de arte español, la estatua de un santo, una fotografía de los esposos Dalí, un objeto precolombino, un escarabajo, dos bronces representando a Cristo en la cruz, una pieza Fabergé de estilo ruso, dos colmillos de elefante, ciertos libros procedentes de la biblioteca de Cadaqués, un cofre de madera de sándalo y una atara. La demanda ha sido promovida por Cécile Grindel- hija de Helena Dmitrievna Diakonova y PaulEugéne Grindel, conocidos en el siglo como Gala y Paul Buard- y se refiere a los objetos, muebles y joyas personales que su madre, casada en segundas nupcias con el artista ampurdanés, poseía en las casas de Port- Lligat y Púbol. Según un acuerdo establecido en 1982 entre los representantes legales del pintor y los de la hija de Gala, dichos bienes pertenecen a Salvador Dalí en usufructo vitalicio. Los abogados de madame Grindel consideran ahora que algunas de las condiciones establecidas hace un lustro han dejado de cumplirse y que el pacto inicial queda invalidado. Tras la muerte de Gala- q u e nombró heredero universal a su marido, Salvador Dalí- el equipo jurídico del pintor llegó a un entendimiento con Cécile Grindel para que renunciase a pleitear sobre su herencia a cambio de unas contraprestaciones, que incluían varios de los cuadros propiedad de su madre (dos óleos de De Chirico, dos de Dalí y un dibujo de Picasso) una cantidad en metálico (alrededor de cuatrocientos millones de pesetas) y los objetos y prendas que ésta poseía en sus diferentes casas. Se especificó, sin embargo, que algunos de esos bienes- los más cotidianos- -permanecerían en poder de Dalí, en usufructo, por razones humanitarias: el fallecimiento de su esposa había causado en el rroella- las negociaciones con el señor Domenech acerca de los objetos que ahora se reclaman duraban ya varios meses. No obstante, la cita prevista entre los representantes de Cécile y los de Dalí para llegar a un acuerdo fue postergada en diferentes ocasiones por la incomparecencia de Robert Descharnes. Fue entonces, siempre según Flecheux, cuando se notificó a Domenech que, vista la imposibilidad de llegar a una solución amistosa, tendrían que proceder judicialmente. Domenech contestó con una dura carta en la que señalaba que había aparecido en Italia un supuesto hijo de Dalí y Gala y que, por tanto, habría que esperar acontecimientos. Cécile encajó muy mal esta amenaza ya que la propia Fundación Gala- Dalí había refutado en la Prensa las pretensiones- por lo demás, ridiculas- del presunto heredera Lo extraño en todo esto- concluye el profesor Santos Torroella- es que, no habiendo encuentro ntre las partes, hubiese una exhibición de los objetos. Tan extraño, en efecto, como que Antoni Pitxot, uno de los tres miembros del equipo que constituye todo el entourage de Dalí en Fi ueras, anteayer mismo no supiera nada de exhibiciones, ni de demandas, ni de herencias. Al tiempo que Pitxot se enteraba a través de una llamada telefónica de las diligencias instruidas en el Juzgado madrileño, Robert Descharnes anunciaba en Tokio que la sociedad que administra, Demart Pro Arte, se dispone a emprender de forma inmediata una serie de acciones destinadas a acabar con las falsificaciones de la obra de Dalí qué inundan el mercado japonés. Salvador Dalí cedió todos sus derechos intelectuales a dicha sociedad n un contrato firmado en Fkjueras, el 13 de junio de 1986, por el abogado francés Jacques Henri Sinard y Miguel Domenech. En un telefax enviado el 6 de octubre de 1987, desde su oficina de Ginebra (la sede de la sociedad se encuentra, sin embargo, en Holanda) Demart Pro Arte comunica que: En un momento en el que en todo el mundo, y especialmente en los Estados Unidos, Japón y algunos países de la Comunidad Europa, se lleva a cabo una vasta operación represiva- promovida tanto por los poderes públicos (acciones judiciales, fiscales, aduaneras... como por intereses particulares, legítimamente afectados por los abusos escandalosos en el mercado del- arte- la sociedad Demart, titular de los derechos intelectuales de Salvador Dalí (una de las principates víctimas de esos abusos) comunica que: JUEVES 12- 11- 87 Salvador Dalí con su esposa, Gala Diakonova, cuya hija reclama a los abogados del pintor la herencia de su madre Cécüe Grindel, kjja de Gala y Paul Eluard, puede llevar a Dalí a los Tribunales pintor una hondísima llaga y quizá no podría superar el que desapareciesen también los elementos que constituían su ámbito. allá de lo rutinario: En otras ocasiones- asegura- nos ha pedido que realicemos una exhibición de los bienes que se detallan. Se hizo y no hubo más, porque está claro Tal condición- arguyen ahora que esos objetos pertenecen a Dalí tos abogados de Cécile Grtndei- en usufructo, tal y como se acordó ha dejado de tener sentido, puesto tras la muerte de Gala. Las afirque Salvador Dalí parece haber maciones del señor Domenech abandonado definitivamente sus re- contrastan con la versión de masidencias de Púbol y Port- Lligat dame Grindel, según la cual tales para instalarse en la Torre Galatea exhibiciones de la herencia jafiguerense. La senda que recorre el más se llevaron a cabo. pintor catalán no está marcada ya Rafael Santos Torroella, uno de por las huellas de Gala y no hay los máximos expertos en la obra razón, por tanto, para que, ausente el protagonista de la obra, perma- de Dalí, coincidió no hace mucho con monsieur Flecheux, uno de nezca intacto el decorado. los abogados de Cécile, en la casa Según Miguel Domenech, aboga- que ésta posee en la localidad do del pintor, la demanda presenta- francesa de Cannes- sur- Mer: Seda por Cécile Grindel no va más gún Flecheux- -dice Santos To- 22 ABC

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