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ABC MADRID 11-07-1987 página 24
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ABC MADRID 11-07-1987 página 24

  • EdiciónABC, MADRID
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24 A B C INTERNACIONAL SÁBADO 11- 7- 87 Reivindicaciones de grupos tártaros ante el Kremlin Moscú. Alberto Sotillo Una delegación de unos doscientos tártaros se encuentra en Moscú con la voluntad de entrevistarse con el líder soviético, Mijail Gorbachov, con el fin de exponerle la eterna reivindicación de este pueblo, que desea regresar a su patria perdida, la península de Yalta, de donde fueron deportados por Stalin. Su presencia en la capital soviética es el último acto de una lucha tenaz iniciada incluso antes de que aparecieran los distintos grupos disidentes soviéticos. Así, lo que en 1967 fue una amenaza- celebrar una manifestación en la Plaza Roja de Moscú- ei pasado lunes se convirtió en una realidad, cuando un centenar de tártaros se congregaron junto al mausoleo de Lenin para manifestar sus históricas reivindicaciones. En 1967 consiguieron que las autoridades soviéticas rehabilitaran a su pueblo y condenaran la acusación de colaboracionismo lanzada por Stalin para justificar su deportación. Su deseo ahora es conseguir lo que entonces se les siguió negando: la devolución de su República con estatuto de nación autónoma en la península de Crimea, hoy territorio de Ucrania. El tártaro no fue el único pueblo acusado de colaboracionismo y después deportado. También lo fueron los descendientes de los alemanes que la emperatriz Catalina hizo traer para colonizar las tierras del Volga, obligados por Stalin a trasladarse a Asia central y Siberia, donde está previsto que el presidente de Alemania Occidental, Richard von Weiszacker, se entreviste con un grupo de los mismos para atender el deseo de los que ahora desearían volver a Alemania, tierra de sus antepasados. Asimismo, fueron deportados chechenes, calmucos, ihguches, chequeses y baljares. Estos cinco pueblos fueron rehabilitados por Jruschov en el XX Congreso del partido, celebrado en 1956, pero debieron pasar once años más para que, sin llegar a devolverles su patria, el Kremlin reconociera al menos que la expulsión de los tártaros había sido una decisión arbitraria del culto a la personalidad de Stalin La tenacidad de los tártaros ha conseguido que en algunas ocasiones sus representantes hayan sido recibidos por altas personalidades oficiales- l a última de ellas fue el miembro suplente del Politburó, Piotor Demichev, que se entrevistó con ellos a finales del mes de junio- Sin embargo, de todos estos encuentros no han recibido más que vagas palabras y ninguna promesa de que les será devuelta su patria, hoy convertida en balneario chic de la Unión Soviética, de donde continúan siendo reexpedidos los tártaros que desde Asia Central se empeñan en regresar clandestinamente a su antigua patria. Las razones de la tenaz negativa del Kremlin a las no menos tenaces reivindicaciones de los tártaros son buscadas por expertos occidentales en el acentuado disgusto con que las autoridades soviéticas ha contemplado tradicionalmente cualquier tipo de reivindicación nacionalista, agravado todo ello por la religión islámica de este pueblo, factor de reticencia para un Kremlin que contempla con creciente temor la posibilidad del integrismo islámico al interior del territorio de la URSS. Horizonte- ESTÁN FABRICANDO UN LÍDER El pueblo norteamericano no sería lo que es si en el reparto de sus simpatías Oliver North no le ganase la partida a los miembros del Congreso que componen la Comisión investigadora del Irangate Estos señores pueden haber olvidado la deuda que la nación tiene con el Cuerpo de Infantería de Marina, siempre los primeros, en primera línea de combate. Pero el pueblo norteamericano no los ha olvidado, y por eso cuando le preguntan de qué lado están, la respuesta, en su inmensa mayoría, es: ¡Oliver North! La gente cree que es un hombre honrado que dice la verdad. Por el contrario, los congresistas, sobVe todo los senadores, nunca ganarían un concurso de popularidad. El Senado, inicialmente concebido en el principio del país como cámara de la propiedad es un hierático e intocable club de patricios, rodeado de admiración, aunque lo que él pide es pleitesía, así que imagí: nense ustedes su estupor cuando el teniente coronel North, pasando de acusado a acusador, tes cantó las verdades del barquero: Ustedes han hecho sus reglas para esta audiencia. Es como un partido de pelota base en el que ustedes baten a placer, haciendo de jugadores y de arbitro al mismo tiempo. A mí sólo me queda recibir los golpes. Ustedes juzgan a todos y a todo, salvo a ustedes mismos. Ustedes son, simplemente, tos culpables de la incierta, vacilante, impredecible, ahora sí, ahora no, política hacia la resistencia democrática nicaragüense. Era imposible que al cabo de tantas y tan fatigosas horas de implacable e incesante interrogatorio de North, la gente no se diese cuenta de la clase de conejo que estaba dentro de la chistera. De nuevo la Comisión se olvidó de aquella famosa frase de Lincoln: Se puede engañar a una persona siempre; se puede engañar a muchos durante mucho tiempo; pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo. Porque la gente, en efecto, se dio cuenta en seguida de lo que busca; ban los congresistas: en primer lugar, comprometer a Reagan hasta su muerte política; en segundo lugar, arrebatarle al Poder Ejecutivo la dirección de la política exterior de los Estados Unidos, una vieja aspiración, y en tercer lugar, hundir at Partido Republicano y a sus candidatos, con vistas a las elecciones de 1988. Para ello se creyeron, de entrada, sus propias mentiras: que Oliver North era un pobre soldado faldero, frivolo y aventurero, que le pondría letra a toda la música que le tocasen. Y con lo que se encontraron fue con el Oliver North de verdad: un hombre sencillo, directo, valiente, un Juan sin Miedo, que sirvió a su país y a su comandante supremo, encarnación de lo que el. pueblo norteamericano ha creído siempre que han sido sus marines fieles y abnegados. Por eso cuando preguntaron a la gente qué pensaba de Oliver North, se volcó a su favor. Aparecieron incluso las primeras pancartas con el consabido Oliver North for president Sabiendo cómo los Estados Unidos fabrica a sus líderes yo he tenido la impresión de que ayer comenzaron a fabricar uno, a partir del momento en que cometió ta increíble audacia de mirar a los ojos al taimado senador por Hawai, Inouye, y soltar lo que soltó contra los padres de la patria Fue un desafío inesperado, y una provocación. Fue el único momento en qué se iluminó el rostro de los congresistas que no pueden evitar sus simpatías hacia un soldado acosado como una res para dejar su vida y su honor triturado, o peor aún, para servir de chivo expiatorio. El mundo puede ser injusto y cruel, pero de cuando en cuando permite que un hombre como North gane su batalla. Manuel BLANCO TOBIO La contra nicaragüense expresa en Madrid sus reservas hacia el plan Arias Madrid Pedro Joaquín Chamorro, hijo del asesinado director del diario La Prensa de Nicaragua, y el comandante Fernando, ambos miembros de la resistencia antisandinista nicaragüense, denunciaron ayer en Madrid la falta de libertades en su país y afirmaron que es muy difícil por el momento una solución pacífica al conflicto armado. Por el contrario, creen necesaria una fuerte presión militar y política para provocar el colapso de la actual dictadura sandinista en Nicaragua del comandante Ortega Ambos miembros de la resistencia nicaragüense participan en Madrid durante estos días en un seminario de la Unión de Juventudes Democráticas Hispanoamericanas (UJDH) organizado por las Nuevas Generaciones de AP. Chamorro manifestó que la contra en Nicaragua se encontraba más unida y cohesionada que nunca para la democratización del país, sea por vía política o militar En su S 6 SÍSS opinión la idea de negociación de Osear Arias es buena, pero hay diferencias en cómo llegar a ello y en que la resistencia tiene que tener un papel activo. No vamos a entregar las armas sólo porque Ortega firme un papel El comandante Fernando, nombre de guerra según dijo Luis Guillermo Perinat al presentarle, dijo que habían superado la falta de ayuda internacional gracias al apoyo de la población civil en la guerra a un Gobierno marxista- leninista Los sandinistas- -dijo- -llegaron al poder por medio de balas, y por ellas van a salir.

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