ABC MADRID 02-06-1987 página 22

227 A B C MARTES 2- 6- 87 Ciillell: Maragall ha politizado losJuegos Olímpicos La gente se pregunta si la Olimpiada serán los Juegos de Barcelona o de los socialistas Barcelona. J. A. Gundín Cuando Josep María Cufiell sube al estrado y empuña el micrófono, tal como él lo hace, poderosamente, haciéndolo girar sobre su eje, transmite sobre el auditorio un aire de político rompedor y rockero clásico. Rara mezcla ésta que se da muy de tiempo en tiempo, cuando, tras ensayos poco afortunados, se logra reunir juventud, proyecto político sólido y capacidad de sintonía con el personal. Lo cierto es que cuando se alza sobre Tras un comienzo vibrante, la batalla de Barcelona ha entrado esta semana en una fase de trincheras, preludio del asalto final. En estos últimos días, Cullell y Maragall han medido sus armas y desvelado estrategias. Ambos se han enfrentado públicamente en tres ocasiones, la última ante las cámaras- de TV. Maragall ha puesto en práctica la clásica estrategia del campeón frente al aspirante: reafirma que es el número uno y rehuye el debate ideológico- s u punto más débilpara vender optimismos ignorando a la competencia. Cullell, por el contrario, hace hincapié en lo ideológico y golpea a Maragall en los problemas que padece Barcelona, sobre todo el fiscal y el de la seguridad ciudadana, primeros enemigos del tradicional y pujante comerciante barcelonés. El PSOE ha puesto de rodillas al ciudadano de Barcelona con los impuestos ¡a tarima, el alcaldable barcelonés de Cill se sitúa a medio camino entre Kennedy y Jhony Hoüitíay. Fuera de las tribunas, lejos de tas multitudes, Culleí! recobra esa imagen que siempre ha transmitido: sosegado, cordial y esclavo de la azul pasión mediterránea. La pasión precisa con la que arremete en el terreno político a sus oponentes. Maragai! -d i c e- tiene una idea provinciana y hortera de Barcelona. O también: Los socialistas han puesto de rodillas a los ciudadanos con los impuestos. proyecto global de Cataluña y dárselo a los socialistas para que realicen otra política en el Ayuntamiento de Barcelona, la capital de Cataluña. Y, además, dárselo a una opción política que no suma ni colabora con la de la Generalitat, sino que resta y dedica a meter palos en la rueda. ¿Por cierto, ¿a qué que se deben los ataques del PSC a Jordi Pujol nada más comenzar la campaña? -Porque le temen y saben que goza de carisma entre los catalanes. Por eso han cometido la osadía de amenazarle para que no intervenga en esta campaña. Claro que son tan torpes que el mismo día que amenazaban a Pujol salió en TVE Felipe González apoyando la candidatura de Moran... ¿Piensa Jordi Pujol participar más en lo que resta de campaña? -Sí, va a intervenir en más actos de tipo sectorial y en los mítines de final de campaña. Imagen idílica e irreal ¿Por qué cree que Maragail rehuye el debate ideológico? -Creo que por dos razones. Primero, porque su obsesión es presentar una imagen idílica e irreal de Barcelona a base de argucias publicitarias que esconden los graves problemas de la ciudad. Y, en segundo lugar, porque quiere presentarse como el alcalde como el nieto del poeta, como una persona incolora, inodora e insípida, que no pertenece a ninguna corriente ideológica o de pensamiento. Los socialistas creen que de esta manera les será más fácil vender el producto Maragall ¿Quiere decir que a Maragall le perjudica decir a qué partido pertenece? -Eso piensa él. Y con razón, porque los socialistas están convencidos de que la gente ya no cree en sus promesas y Maragall es consciente de ello. Además, vender futuro como pretende, cuando no hay ninguna capital europea- salvo dos- en la que gobiernen los socialistas, es algo muy duro y difícil de aceptar. Maragall prefiere, por consiguiente, esconder la realidad de su pertenencia a un partido que tiene nombres concretos: González, Guerra, Maravall, Vargas, Ledesma, etcétera. -N o negará, sin embargo, que Maragall es un excelente vendedor de lo que ha hecho... -Sí, en efecto; es un gran vendedor, pero ¿qué vende: realidades o ficciones? ¿Cosas útiles o montajes publicitarios? El pretende vender una imagen de grandeza de Barcelona, pero, ¿cuál es la realidad? Muy sencilla: pretende hacer una Barcelona gigantesca, desbordada de su marco municipal. Tiene ideas caóticas y anticuadas, como en tiempos del franquismo, cuando se medía la grandeza José María Cullell de la ciudad por el número de coches que matriculaba. Creo que estas ideas son provincianas y horteras... -Pero usted también querrá una Barcelona Grand -Sí, claro, pero no cuantitativamente. Para mí, la Barcelona Grand tiene sentido desde el crecimiento cualitativo: que sea una ciudad más segura, con mayor nivel en su calidad de vida, más viva y humana, etcétera. Se han doblegado a Madrid Del mensaje ideológico, Josep María Cullell suele pasar con facilidad al terreno de los hechos concretos y de las preocupaciones cotidianas de los barceloneses. El mismo programa electoral del candidato convergente es una puntillosa relación de soluciones que se prometen. La mayoría de estas soluciones tienden a mejorar las condiciones de los comerciantes y de los sectores más amplios de la Ciudad Condal. Sus oponentes han calificado este programa de populista -Lo que pretendo- dice Cullell- es dar una respuesta a la gente que ha perdido la confianza. Frente a una manera de hacer política, que consiste en desconfiar del ciudadano, existe otra basada en estimular la libertad y la iniciativa de la gente. Unos gobiernan la ciudad a golpe de gaceta municipal; nosotros preferimos fomentar la gestión desde abajo. Estos son los dos estilos que se enfrentan en estas elecciones. -Una de sus promesas más importantes es la de congelar los impuestos. ¿No es arriesgada? -Creo que al ciudadano no se le puede poner de rodillas con los impuestos. Hay que resolver los problemas de la Hacienda local discutiendo con el Gobierno central, buscando el pacto con franqueza y energía. Nosotros lo hemos hecho con la financiación autonómica. Hemos empleado en ello tres años de negociaciones, pero al final hemos logrado algunas soluciones beneficiosas para Cataluña. Eso es lo que hay que hacer también en el Ayuntamiento. Los socialistas, sin embar- Más participación de Pujol Tal como plantea Josep María Cullell su campaña electoral, haciéndote girar en el mensaje ideológico para descender después a los datos concretos, se diría que las elecciones del diez de junio vienen a ser unas primarias de las autonómicas que se celebrarán el próximo año. Los socialistas rechazan de plano esta interpretación, aunque CulleH asegura que Maragalí va de institución por los mítines, no se sabe si porque su profundo deseo es presentarse a otra cosa que ser alcalde de Barcelona ¿Cree que estas elecciones municipales son un anticipo de las autonómicas? -N o exactamente, aunque tienen una relación lógica ambas elecciones. ¿Qué se juega el ciudadano el diez de junio? que salga elegido uno u otro alcalde capaz de gestionar el Ayuntamiento. Pero también que salga reforzado un proyecto político e ideológico de hacer Cataluña A mi juicio, no tiene sentido dar el voto a Pujol en las elecciones autonómicas para que ponga en práctica su