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ABC MADRID 15-05-1987 página 16
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ABC MADRID 15-05-1987 página 16

  • EdiciónABC, MADRID
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16 ABC OPINIÓN Queridísimos yuppies ZIGZAG Campaña contra Chirac El viaje del primer ministro francés Jacques Chirac a Moscú ha sido preparado por la inteligencia soviética con una campaña denigratoria hacia la derecha francesa. Los chivos expiatorios han sido en esta ocasión los periodistas de la agencia France Presse y otros corresponsales de Prensa a los que se acusa, en los medios oficiales rusos, de hablar demasiado de los derechos humanos en la URSS y de estar al servicio de intereses políticos de la derecha impidiendo así cualquier entendi. miento entre los dos países. No es nuevo ef método soviético de crear un ambiente hostil a un visitante molesto. Pero las circunstancias que rodean la visita de Chirac a la URSS descubren en esta campaña intencionalidades de mayor calado que las simples diatribas del Kremlin contra un Gobierno conservador. Como se sabe, el interés soviético está centrado ahora en la cuestión del desarme y no repara en gastos para convencer a los europeos de la necesidad de un acuerdo. Francia, además de ser potencia nuclear, ha recibido con poco entusiasmo la oferta soviética de desmantelamiento de los misiles tácticos operacionales en Europa. Por excelentes que fueran las r e l a c i o n e s f r a n c o soviéticas, esto es algo que Gorbachov no está dispuesto a perdonar. VIERNES 15- 5- 87 VERGÜENZA TORERA OS hombres ya no se visten para gustar a las mujeres sino para gustarse entre ellos. Si me apuras, simplemente para gustarse a sí mismos. Entiéndeme: no es que se hayan vuelto misóginos. Ni siquiera narcisistas. No es que jueguen a la ambigüedad y al equívoco. Es que la última revolución que se está cociendo empezó contra el machismo, pero sólo va a acabar con la c o r b a t a Ahora la gente viste por fuera de dibujos y colorines como antes se tapizaba por dentro de Sartre y de Marcuse. Pero nadie se libera de sus prejuicios, en la calle Almirante, con una cazadora de ímil- cueró. Ni ha empapado su vida dé trascendencia con la derivada tercera del existencialismo. Un diseñador como tú debería saberlo: la ropa es el último reducto contra la masificación y el igualitarismo. Hoy cualquier triunfador quiere un traje distinto cada tarde, como un torero en la cumbre, casi como una provocación que anuncia a los demás el aura inaccesible de su poder y su gloria. Hasta en eso ha cambiado todo. La gente va a las plazas a ver toreros. Y casi nadie va a ver tos toros. Cuando te llevaba tu abuelo a las Ventas, hasta en la barrera del nueve las hembras de tronío, con mantilla y peineta de prestado, sabían la diferencia que había entre un cinqueño albahío, bocinero, encampanao y con sentido, y un jabonero, capirote, veleto y que parece que re. corta el viaje, pero lo que tiene es querencia de chiqueros. Ahora sólo en la andanada del siete sentencia alguna vez el sucesor de El Ronquillo: Ese zaino tiene faena por el izquierdo; a la media distancia y por los terrenos de adentro. Verás cómo en caballos romanea. Hubo un tiempo en que tu sitio estaba en el callejón, justo detrás del burladero de la segunda suerte. Donde suenan a apocalipsis los clarines del miedo. Tu padrino era el chulo de toriles y le hubiera hecho ilusión verte cambiar un día la seda por el percal. Dicen que un toro lo mató una tarde, vestido de asombro y L plata. Pero tú sabes que murió, como Cuchares, del vómito negro, y acaso de una indigestión de bellotas y algarrobas. Nadie sabe qué ocurrió tras aquella cerca marismeña, a una legua de unos mansos salineros de desecho de tienta, abrochados y sin hechuras de embestir ni a un tábano borriquero. Ya te aburría tanto aficionado de reventa incapaz de distinguir unas gaoneras de unos lances por navarras; insensibles a la chulería del galleo y a la verdad por delante y exponiendo mucho del quite de la mariposa. Ni siquiera apreciaban la diferencia entre un par al quiebro y otro a topacarnero. Te habías pasado media vida defendiendo la fiesta, aun a riesgo de perder tu imagen de progre. Y ahora tenías que aguantar a tus clientes pontificando, en pleno San Isidro, sobre el misterio de la embestida del toro y el derecho de un pueblo a disfrutar el embrujo del miedo. Todo en la arrancada de una fiera que un loco se ciñe a la cintura en el eterno milagro de la media verónica. Sonó un grito en la arena cuando el matador salió prendido por los alamares. Ya le había avisado el burel en aquella tanda de giraldillas. Pero nadie entendió en la plaza si fue un bramido de celo, un berreo de miedo o un mugido de acometividad y ansias de muerte. A un toro berrendo en colorado, botinero, rabicano y ojo de perdiz nadie le entiende el lenguaje, ni le tiene respeto. La estocada estaba arriba como un ordago suicida de desesperación y vergüenza torera. Camino del hule iba un hombre que tuvo que arrancarle a la vida sus sonrisas vestido de grana y oro. Justo los colores que ahora pide la gente guapa en las boutiques cuando decide ir por el mundo proclamando su liberación y su éxito. Se creen que han coronado hasta la bola una estocada en las péndolas y apenas han toreado de salón y se han quitado de en medio engañando al personal con media lagartijera. Luis Ignacio PARADA española Y añade el articulista: La cita es índice de una actitud definida y acrítica que se puede aplicar a muchos de los que claman contra los arcaísmos de Euskadi No entendemos qué se quiere decir. Es de suponer que arcaísmos alude al nacionalismo radical de Herri Batasuna. Pero los datos incontestables son que HB es el brazo político de ETA y que su discurso político es una mezcla de irredentismo social y vasquismo desaforado, cuyo único objetivo lo constit u y e la d e s e s t a b i l i z a c i ó n permanente del País Vasco. Frente a esto, la unidad de la patria española, defendida por ABC, dista de ser una fórmula irracional o mística: es la base sobre la que racionalmente puede construirse en Vasconia un orden social civilizado y justo. Correr en el Metro El nuevo reglamento del Metro, aprobado recientemente por el Consejo de Gobierno de te Comunidad, no puede dejar de ser analizado por lo sorprendente de algunas de sus medidas. Por ejemplo, la multa de 2.550 a 5.000 pesetas que se impondrá a los usuarios con prisa que sean descubiertos en plena carrera por las escaleras mecánicas. El que dictó esta norma seguramente no sabe lo que son las horas- punta de muchas capitales del mundo, y el llegar, con el tiempo justo, al trabajo o a las citas. Y dentro de lo absurdo entra también el tener que apagar el cigarrillo al subir o bajar las escaleras, cuando está permitido fumar en otros espacios del metropolitano, a excepción de los vagones. Esperemos, por otro lado, que las recaudaciones en infracciones se vean traducidas en una limpieza diaria de las instalaciones, mayor comodidad, iluminación, orden y, sobre todo, seguridad, como establece también el nuevo reglamento. Unidad de España En un artículo publicado en un diario madrileño, Javier Sádaba se refiere al editorial de ABC con motivo de las elecciones en el País Vasco, en el que se decía: En él caso especialísimo del País Vasco no es rechazable que electores de centro y derecha voten en conciencia, al PSOE, como fórmula para salvar lo esencial: la unidad de la patria Brosüpora dospersonas con Ocho maravillosos días en Río de Janeiro y en Iguazú, para el acertante setecientos en vuelo con Varig. 1927- 1987

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