ABC MADRID 11-05-1987 página 15

LUNES 11- 5- 87- OPINION -ABC, pág. 15 HACIA UN MAYOR SACRIFICIO TRIBUTARIO A durado muy poco la satisfacción popular con la que fue acogida la declaración de inconstitucionalidad de los recargos en la contribución territorial urbana por los que se cobraron a los contribuyentes unos 50.000 millones de pesetas. El Gobierno va a aprobar en próximo Consejo de Ministros una ley para aumentar la contribución territorial en tales porcentajes que las devoluciones, que iban a iniciarse en junio, quedarán prácticamente anuladas cuando no superadas con la subida. Con esta maniobra, de apariencia legal, quedarán burladas a un tiempo la decisión del Tribunal Constitucional, que declaró la inconstitucionalidad de los recargos aplicados por los Ayuntamientos, y las esperanzas ciudadanas pagados por unos impuestos indebidos, excesivos, ilegítimos. El Gobierno elude la sentencia del Tribunal Constitucional y demuestra una vez más su prepotencia sobre los contribuyentes y su totalitaria forma de proceder para la que no son obstáculos ni las sentencias de los más altos Tribunales ni los derechos de los contribuyentes. Pero que atiende sin descuido ni fallo a los intereses especiales de la gestión socialista. El primer tramo de la maniobra está decidido: un crédito puente a los Municipios, concedido por el Minist e r i o de E c o n o m í a y Hacienda, para que puedan hacer frente a las devoluciones debidas. El segundo tramo es la nueva ley que se va a aprobar y que permitirá a los Ayuntamientos establecer, en la contribución territorial urbana, recargos que van desde un 32 por 100 para los de poblaciones de 5.000 a 20.000 habitantes hasta un 40 por 100 en poblaciones que rebasen los 100.000 habitantes. Los porcentajes de recargo son evidentemente muy cuantiosos. Y en todo caso superiores a los admitidos como legales en la sentencia del Tribunal Constitucional, que recibe así nuevo rechazo. Va a incrementarse, por lo tanto, en términos el sacrificio fiscal de los contribuyentes. Y no se abordará, por el Gobierno, ni la reforma fiscal necesaria para acometer LA NUEVA GENÉTICA Y LOS ANIMALES PATENTADOS L Gobierno norteamericano ha decidido autorizar patentes de nuevas formas de vida animal conseguidas mediante manipulación genética. La noticia ha suscitado una inmediata polémica. Los defensores del mundo animal consideran que tal autorización equivale a una degradación de éste, convertido en un producto industrial más. Desde perspectivas científicas se denuncia el riesgo de que las alteraciones de los códigos genéticos den lugar a anomalías irreversibles. Los cambios inducidos de las especies animales son muy antiguos. La ganadería los lleva haciendo desde tiempos inmemorables y en determinadas especies- -la equina o la c a n i n a- han sido decisivos. Cierto es que ahora ha cambiado el método: lo que se modifica no es el tipo de individuo, sino la combinación genética. La novedad tampoco es absoluta, con todo: en el campo de las bacterias llevaba realizándose hace años para la producción de cerveza. Lo novedoso es el hecho de la patente, que en la práctica venía existiendo también, pues las bacterias creadas artificialmente pertenecían de facto a las grandes compañías. La ingeniería genética ha abierto a la vez sorprendentes e inquietantes perspectivas. Los beneficios que pueden obtenerse con ella son enormes en ciertas actitivades, como en la ganadería, que- -así la clonación o las H con éxito la reducción del déficit presupuestario ni la solución verdadera del problema enorme que plantea la situación, económicamente insostenible, de los Ayuntamientos. Porque resolver con tributos acrecidos los gustos crecientes no es una solución. Por sistema semejante, a imitación del Gobierno, los Municipios realizan una política, claramente electoralista, sin preocupación alguna por una necesaria, prudente, limitación de los gastos. Incurren en dispendios carentes de justificación y se lanzan de modo irreflexivo, cuando no irresponsable, a notorios despilfarros con la tranquilidad de disponer de las palancas que les aportarán, coactivamente, fondos. Y esto no puede decirse que sea para ellos, como tampoco lo es para el Gobierno, la única política posible, sino la alternativa política menos deseable y defendible. La hegemonía parlamentaria socialista, el temible rodillo, conseguirá sin duda la aprobación de la nueva ley y sus recargos. Los ciudadanos, abrumados bajo peso de las agravadas contribuciones únicamente podrán opinar, hacer oír su voz, al depositar sú voto en las próximas elecciones. Ante las urnas es el momento de oponerse democráticamente a una política para cuya viabilidad parece ser imprescindible un sacrifico proseguido e ilimitado de los contribuyentes. E ABC Presidente- Editor GUILLERMO LUCA DE TENA Director LUIS MARÍA ANSON Director de ABC de Sevilla Francisco Giménez- Alemán Subdirector: Antonio Burgos Subdirectores D. Valcárcel, J. Vila. J. Javaloyes, M. Adrio, R. de Góngora, J. Amado hormonas del crecimientotienen la posibilidad efectiva de resolver deficiencias seculares de alimentación en los países subdesarrollados con la consecución de animales específicamente productivos. Pero evidentemente los riesgos son grandes: las llamadas quimeras pueden suponer una grave alteración del universo zoológico. El hombre debe dominar la Tierra conforme al precepto bíblico, mas su acción ha de tener unos límites. Ni estamos solos ni somos los dueños de la vida, que es un fenómeno que siempre, en cualquier caso, nos trasciende. El gran peligro, con todo, es el de que las manipulaciones puedan extenderse a la especie humana. La legislación nortemericana es tajantemente prohibitiva al respecto, y lo mismo sucede en la europea, reforzada por las últimas decisiones del Consejo de Europa en la materia. Sobre esto no ha de haber dudas. Los fantasmas destruidos con la derrota del nazismo, en absoluto pueden regresar de la mano de un progreso técnico ciego. Y la realidad es que hoy la ingeniería genética recorre ya caminos muy peligrosos: la programación de seres humanos se encuentra más cerca de lo que a veces se piensa. Tales expectativas han llevado al biólogo francés Jacques Testard a reivindicar la ética del no descubrimiento y otras serias voces de advertencia se han escuchado en la comunidad científica. El reciente documento del Vaticano, muy restrictivo en determinados aspectos, pero contundente sobre la cuestión, debe valorarse sobre todo a la luz de las amenazas que hoy se ciernen sobre la vida. La autorización para las patentes de animales ha de ser juzgada con prudencia. Su descalificación absoluta sería de un rancio reaccionarismo. Los aspectos positivos que presenta son innegables, pero sin duda las legislaciones deben acomodarse a las nuevas realidades. El mundo animal tiene derecho a ser protegido. Y Europa lo sabe desde San F r a n c i s c o de Asís, que se anticipó en siglos a los ecologismos contemporáneos. S i ü ü í S S T V- a G f f l z ó n (Q j H u r A A- González (Continuidad) R. Guténel (Continuidad) L U. S S S? G l t S J? o n l i n U r i? c f J L M a r t í n Descalzo (Sociedad) J. Orno (Edición) L I. Parada (Suplementos Ecónomos) L Prados de la Plaza (Continuidad) C. Prat (Domricari Santiago Casleto (Colaboraciones) Secciones: J. Rubio (Arte) á nJ. ME Fdez. -Rua (Ciencia) A. Garrido y J. Espejo (Confección) ÍS Í W f t? Y e z o n Aérea) J. Badia (Educación) E. R. Marchante (Espectáculos) J. Pato (Gráfica) M. A. Flores (Huecograbado) F. Rubio (Ilustración) M. 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