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ABC MADRID 09-04-1987 página 3
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ABC MADRID 09-04-1987 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
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EDITADO POR PRENSA ESPAÑOLA SOCIEDAD ANÓNIMA 9 DE ABRIL DE 1987 ABC LA TERCERA REALIDAD REDACCIÓN ADMINISTRACIÓN TALLERES- SERRANO, 61 28006- MADRID FUNDADO EN 1905 POR DON TORCUATO LUCA DE TENA Zaragoza, antes por haberme dicho que ese Don Quijote fantástico, se hallaba en aposento de Don Quijote, la huéspeda le las justas de esa ciudad, no quiso yo entrar dio una sala baja, enjaezada con otras pinen ella, por sacar a las barbas del mundo tadas sargas, como las que tenía la estansu mentira y así me pasé de claro a Barcecia de Don Quijote. Púsose el recién venilona... Finalmente, señor Don Alvaro Tarfe, do caballero a lo de verano. Y saliéndose yo soy Don Quijote de La Mancha, el misal portal del mesón, que era espacioso y mo que dice la fama, y no ese desventurafresco, por el cual paseaba Don Quijote, le do que ha querido usurpar mi nombre y preguntó: honrarse con mis pensamientos. A vuesa merced suplico por lo que debe a ser caba- ¿Adonde bueno camina vuestra merllero, sea servido de hacer una declaración ced, señor gentilhombre? Y Don Quijote le ante el alcalde de este lugar, de que vuesrespondió: tra merced no me ha visto en todos los- A una aldea que está cerca de aquí, de días de su vida hasta agora, y de que no donde soy natural. Y vuestra merced ¿dónsoy yo el Don Quijote impreso en la segunde camina? da parte. -Yo, señor, voy a Granada, que es mi- Eso haré yo de muy buena gana. patria. La función de este episodio no es mera- ¡Y buena patria! -replicó Don Quijote. mente argumental, sale del marco de la noPero dígame vuesa merced por cortesía su vela y consiste propiamente en desacredinombre... tar al Quijote de Avellaneda que ha usurpa- -Mi nombre es Don Alvaro Taríe- -resdo los pensamientos y la fama del Quijote pondió el huésped. A lo que replicó Don legítimo. Para lograr tal fin habrían bastado Quijote: unas palabritas en el prólogo sin meterse- Sin duda alguna, pienso que vuestra en más complicaciones. Sin embargo, Cermerced debe de ser aquel Don Alvaro Jarvantes no se conforma con esta solución fe que anda impreso en la segunda parte despellejada y mediocre, y monta nada mede la Historia de Don Quijote de la Man- nos que esta complicadísima y original cocha, recién impresa... media. Ahí es nada: meter en su novela a un personaje de Avellaneda, demostrarle- El mismo soy- respondió el caballeque el Don Quijote figurón que Don Alvaro ro- y el tal Don Quijote, sujeto principal de había conocido no era el legítimo Quijote y, la historia, fue grandísimo amigo mío, y yo finalmente, hacerle declarar ante el alcalde, fui el que le sacó de su tierra o a lo menos por interpuesto testimonio, que el Don Quile moví a que viniese a unas justas que se jote impreso en Barcelona es un falsario y hacían en Zaragoza, y, en verdad, en verque Don Alvaro no había visto al verdadero dad que le hice muchas amistades, y que Don Quijote en todos los días de su vida. le quité de que no le palmease las espalPiensen ustedes ahora en la extremada das el verdugo por ser demasiado atrevido. complejidad del ámbito novelesco creado- -Y dígame vuestra merced, señor Don en esta escena donde los personajes son Alvaro ¿parezco yo en algo a ese Don Quirealidades potenciales que están siendo Cervantes mueve a sus personajes en jote que vuestra merced dice? juzgados por Don Quijote desde un plano una nueva realidad que está compuesta- No por cierto- respondió el huésped- de realidad distinto, superior y dominante. por dos planos, obedece a unas leyes que en ninguna manera... Actúan como si los primeros pertenecieran no son puramente literarias ni puramente- Pues quiero que sepa vuesa mera un mundo imaginario y los segundos a históricas, y tiene una estructura participanced, mi señor Don Alvaro Tarfe, que en toun mundo real. Lo importante, lo innovador, te de ambos modos de realidad. No es un es el contraste de ambos modos de realijuego de ingenio, es la creación de un dos los días de mi vida no he estado en dad dentradet mismo personaje. No olvidemundo nuevo. Constituye lo que nosotros, mos que a Don Alvaro Tarfe le ha bastado desde hace algunos años, llamamos ta tersalir del portal para ingresar en la tercera cera realidad. realidad y disponer de una autonomía que En fin de cuentas, si se quiere, esta terningún personaje literario había tenido hascera realidad no es más que un nuevo prota entonces. Es como si nosotros, al pasar cedimiento técnico. No ensancha el mundo esa puerta, ingresáramos sin advertirlo físico, pero descubre un nuevo territorio dentro del mundo novelesco. Y en él nos donde los personajes de ficción van a goencontráramos con Don Quijote, y departiéEDICIÓN INTERNACIONAL zar de plena autonomía, puesto que, en ramos con él y, al fin, sí ¡al fin! pudiéramos cierto modo, se liberan de su creador. El aclarar la verdad de su historia. hecho entonces era nuevo y hoy sigue Un medio publicitario único siendo insólito. Recordemos la escena más para transmisión de mensajes representativa de este nuevo procedimiencomerciales a ciento sesenta to. Luis ROSALES naciones A creación de una nueva realidad es el último invento cervantino que, aquí y ahora, vamos a señalar. Como vamos de prisa, hilvanamos razones y palabras. Todo queda entredicho. Sin embargo, también lo poco es algo, valga por lo que valga. En la primera parte, los personajes cervantinos viven dentro de un mundo de ficción semejante o igual al de cualquier novela. Tienen la misma realidad de los objetos ideales o imaginarios. Ya en la segunda parte, cuando los personajes intervienen corrigiendo su historia, se comportan exactamente como seres reales. Esto no es simplemente una opinión, es un hecho. Don Quijote se refiere a su vida como nosotros nos referimos a la nuestra cuando modificamos la opinión de algún biógrafo. Esto también va a misa. Pero aquí empieza el aire a deshojarse. La realidad de un personaje se la da el libro, pero la realidad de un hombre consiste en ser de carne y hueso. Estas dos realidades son inequívocas y conocidas. Ahora bien, la travesura de Cervantes ha consistido en dotar a sus personajes de conciencia, y la conciencia es atributo de la vida real, no de la vida literaria. Aquí comienza la cuestión. Sólo tiene conciencia quien tiene vida propia y el personaje dé ficción tiene una vida devengada que se escribe con tinta y no con sangre. Sin embargo, los personajes cervantinos la tienen y la exhiben. En cierto modo funcionan como personajes y en cierto modo funcionan como hombres. Esto no es discutible, es evidente. Basta leer El Quijote para tener esa evidencia que nosotros, en modo alguno, interpretamos- para eso están los alegres comentaristas- nosotros la comprobamos ateniéndonos a los hechos. L El caballero se apeó, y, frontero del cíe la Real Academia Española

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