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ABC MADRID 23-09-1986 página 73
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  • EdiciónABC, MADRID
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MARTES 23- 9- 86- ESPECTACULOS- Música- -ABC, pág. 73 Las dos últimas jornadas del Festival de Alicante Alicante. Leopoldo Hontañón, enviado especial Los dos últimos días del II Festival Internacional de Música Contemporánea de Alicante han estado bien aprovechados. Sendos conciertos de mañana y tarde, el sábado, y tres del domingo, dos de ellos mañaneros, han cubierto intensivamente la clausura. Características comunes, la de programarse en todos música de compositores vivos, salvo Janacek, y la de ser todas las obras estreno, al menos en España, Diferencias, la que supone la diversidad de vehículos que se habían elegido para cada convocatoria, así como, paralelamente, la de las filosofías y planteamientos creadores que se manejaban en cada una. Por empezar por el único que escuché de los dos conciertos vespertinos finales, ambos confiados a la Orquesta de la Radio de Belgrado, y los dos celebrados en el teatro Principal, debo afirmar de entrada que la calidad sonora colectiva de la agrupación yugoslava mejoró de manera notable, sobre todo en la primera parte, en relación con su actuación de la víspera, comentada anteayer aquí. Aunque también deba puntualizar en seguida que ello ha de achacarse a la lógica compenetración con obras propias de su repertorio- re- cuerdese que en la tarde de su presentación se enfrentó con dos páginas españolas nada fáciles y absolutamente nuevas para ella- y de ninguna forma, ni en ninguna medida, a que el director argentino Armando Krieger hiciera olvidar, ni muchísimo menos, el excelente quehacer rector precedente dé José Luis Temes, verdadera revelación del Festival. En cualquier caso, respuesta más que digna del conjunto sinfónico de Belgrado en su segunda aparición alicantina, en lo que a lo material- ejecutor se refiere. Y aun en lo conceptual, me atrevería a añadir. Sólo que, la verdad sea dicha, no había demasiado que desentrañar ni, consiguientemente, que explicar en ninguno de los tres títulos seleccionados para la velada que comento, los tres estrenos en España, por cierto. Ni el Concierto para clarinete y orquesta del yugoslavo Obradovic, ni el Poema para piano y orquesta de su compatriota Mokranjac, aportan novedad, atractivo o interés destacable a la música de su tiempo. Si en el primero se incide en un neoclasicismo sumamente simple, como lo es la escritura para el instrumento solista, del que se hizo cargo con corrección Milenko Stefanovic, en el segundo, tras un arranque del piano- asumido con claridad de dicción por Dusan Trbojevic- sustituido enseguida por los chelos de divisi que hacía presagiar más novedosa invención, todo se reduce luego a una vacua peroración postromanticoide de intermitente grandilocuencia. Ni de grandilocuente siquiera puede calificarse la cantata del propio director Armando Krieger, Radiante América que llenaba la segunda parte y en la que fueron solistas esforzados la soprano Carmen Sensaud y el tenor Giuseppe Pastorello. Cierto es que debe resultar harto difícil componer sobre un texto tan ayuno de ingenio y aun de sentido como el que se utiliza, pero aun así, quizá se debiera haber trabajado un poco más la lógica secuencial de los episodios canto- recitado y la de la imbricación de éstos en la escritura instrumental. Los tres conciertos que me quedan por comentar- los tres celebrados en el castillo de Santa Bárbara- son los que han cubierto la faceta, el costado de mayor actualidad, el hoy más rabioso del panorama abarcado por el Festival. Aspecto que hace muy bien en atender, que tiene la obligación de atender, mejor, el Centro para la Difusión de la Música Contemporánea. Que es bien consciente de ello lo demuestra la cuidada selección que en este campo ha hecho, con los consiguientes espléndidos resultados obtenidos en las sesiones correspondientes. Que mi receptividad e interés sean cada día menores a la hora de ponerme a escuchar envíos puramente electroacústicos, de ningún modo me impide reconocer, por una parte, la decisiva aportación que él Gabinete conquense de la especialidad está suponiendo para los creadores interesados en ella, ni, por otra, el buen quehacer, el perfecto conocimiento del medio que demuestran todos los músicos programados: Horacio Vaggione Strata Eduardo Pérez Maseda Ñagaman Santiago Lanchares Quorum José Manuel López Watt Francisco Estévez Miró y Eduardo Polonio Comecomecome Rramm Rramm Me llenaron sin considerando ni relatividad alguna los otros dos encuentros mañaneros. En el que protagonizaron los tres elementos de la denominada Orquesta de las Nubes no se pudo gustar, quizá, la perfección ejecutora de lo solamente grabado, pero sí, y a raudales, el calor, la vida de lo directamente servido. Por otro lado, María Villa, Pedro Esteban y Suso Saiz consiguen en muy buena medida, en la obra que ofrecían como estreno absoluto, Voces, procesos y percusiones su propósito: Unir los elementos generadores- naturales (voz, parches, maderas, metales, cerámicas, etcétera) con los manipuladores- artificiales (delaies, harmonizers, samplers, etcétera) En cuanto al espectáculo Ritual presentado bajo el epígrafe Nueva Música Vocal -mal epigrafiado, porque es mucho más y mucho antes la acción incorporada lo que lo define esencialmente- sólo cabe descubrirse ante tos tres nombr. es que lo han hecho posible. Elde la cantante- actriz Esperanza Abad, auténtica diva de la modernidad, porque ha vuelto a ser artista inimitable en lo vocal y maestra suprema en lo escénico. No hay otro calificativo que el de genial para adjetivar el sentido paródico que derrochó en los episodios de la folclórica y en el de la ceremonia haendeliana. El de José Iges, responsable de la parte electrónica, y el de Antoni Tordera, director escénico, por la enorme inteligencia demostrada por ambos al saber colocarse en el discreto segundo plano- con trabajos en todo caso de fuste- que exige cualquier colaboración con la Abad. Feliz iniciativa privada de apoyo a los jóvenes músicos españoles Madrid. L. H. El asturiano Juan Carlos Cárdenas González, el cordobés Antonio Sánchez Lucena, la santanderina María Patrocinio García- Barbero Pérez, la pontevedresa María Luisa Calvo Rodríguez, el barcelonés Roberto Enrique Mendoza y Gómez, el madrileño Gonzalo Moreno de Andrés y el coreano, nacionalizado español, Ghang- Rok Moon Cha son los siete jóvenes músicos ganadores de las becas otorgadas por el Chase Manhattan Bank de España, con el que ha colaborado muy estrecha y eficazmente Juventudes Musicales de Madrid. La entrega de estas becas- cuya cuantía asciende a 1.300.000 pesetas, destinadas a posibilitar los estudios, durante el curso que comienza ahora, en la Royal Academy of Music de Londres- tuvo lugar el lunes. La efectuó el presidente de Chase Manhattan Bank en España, José Manuel Pemán, durante una muy grata reunión en casa de María Isabel Falabella, presidenta de Juventudes Musicales de Madrid, a Ja que el señor Pemán agradeció vivamente la decisiva colaboración de este organismo. En el acto, en el que estuvo asimismo presente el vicepresidente ejecutivo de la entidad financiera norteamericana, Donald Boudrean, ofrecieron un recital de violín y piano dos de los beneficiarios de la feliz iniciativa: Roberto Enrique Mendoza y Gonzalo Moreno de Andrés. El Ballet Nacional triunfa h enMelbourne Madrid. S. E. La compañía de español del Ballet Nacional de España, que se encuentra en la ciudad australiana de Melbourne como invitada especial para participar en el Festival de los Tres Mundos, ha obtenido un éxito considerado como apoteósico, según se recoge en la Prensa especializada de aquella ciudad. Según noticias procedentes de Melbourne, el público interrumpió en diversas ocasiones las actuaciones de los artistas españoles, especialmente en el baile flamenco, que interpretó Merche Esmeralda, y en Medea a cargo de José Antonio, que es a la vez coreógrafo y director de la compañía, junto a Ana González. También supo el público australiano apreciar el acompañamiento, en esta pieza, de la guitarra en directo de Manolo Sanlúcar, que se desplazó con la compañía española para tal fin. Además de los aplausos que se dieron a lo largo de la actuación del grupo español, al final, el público, puesto en pie, estuvo ovacionando al ballet español durante treinta minutos, teniéndose que subir el telón doce veces. El éxito del baile español, como se ve, también es apreciado en aquel lejano continente. ENTELO PAREDES Rapidez. Muestras a domicilio. 2546454 J

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