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ABC MADRID 15-02-1986 página 26
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ABC MADRID 15-02-1986 página 26

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC, póg. 26- TRIBUNA ABIERTA -SÁBADO 15- 2- 86 U N país en su conjunto puede estar en muy diversas situaciones, en muy distintos temples, dejando aparte las posibilidades, siempre múltiples, de los individuos. El país como tal puede estar entusiasmado, ensoberbecido, deprimido, aterrado, envilecido, equilibrado, aburrido, en discordia, invertebrado -como Ortega dijo de España hace sesenta y cinco años- enloquecido... Importa mucho saber en qué fase o estado de ánimo colectivo está cada país en cada momento. He mostrado en un libro reciente que España pasó casi todo el siglo XIX entre el espasmo y el marasmo, aceptando la apatía, el aplazamiento de las cuestiones graves, la vita minina por temor al espasmo, a la explosión de una violencia cuya conducción se escapa de las manos. la fuerza, sino a una decisión libre de los electores; pero la imPor Julián MARÍAS presión de que había cesado la posibilidad real de intervenir en mente inteligible. Se ha dicho muchas veces la marcha de las cosas ha sido inequívoca. Ahí empieza el núcleo de la desorientación que UCD era un conglomerado de grupos de diversas ideologías, sin unidad; en todos los que España padece. Hay que decir que ha países civilizados, las diferencias dentro de sido progresivamente fomentada, cultivada, intensificada. Por una parte, los los partidos suelen ser mucho cambios bruscos de actitud resmayores; imagínese lo que abarpecto a cuestiones importantes can, por ejemplo, el Partido Rehace que los ciudadanos no sepublicano y el Partido Demócrata pan a qué atenerse. El caso de en los Estados Unidos. No se la OTAN es el de mayor volutrataba de diferencias de docmen, y va a tener graves consetrina, ni siquiera de la pugna de cuencias, incluso más allá de la ambiciones; fue sobre todo una cuestión concreta. La impresión anormal erupción de vanidades de que las decisiones tomadas- l o menos creador de este por el Poder se llevan adelante mundo. sin tener en cuenta otras opinioSi me pregunto cuál es hoy, en 1986, la siTengo inveterada afición a la nes, sin escucharlas siquiera, tuación de España, encuentro que ninguna fisiognómica; nada me parece acentúa la conciencia de enajede las que acabo de enumerar le corres- tan revelador como las caras de nación de la voluntad política. Y ponde propiamente; quedan restos de algu- las personas, y sus cambios; reesto contrasta con lo que había nas- d e l entusiasmo que empezó a sentir cuerdo muy bien cómo, antes de sido la política española desde Julián Marías hace un decenio, y que no llegó a consoli- que las discordias internas se de la Real Academia 1976, cuya norma constante hadarse- más que restos, por fortuna, del manifestaran, las previ al advertir Española bía sido contar con los demás, equilibrio en que pareció que iba a instalarse; la nueva expresión que mostratal vez excesivamente. Una hay algunos indicios de depresión, aún no ban algunos rostros bien conociojeada a los Diarios de Sesiones de las Cormuy grave; está, por supuesto, bien lejos de dos. Entre enero de 1981 y octubre de 1982, tes basta para probarlo de manera abrumala locura que la dominó hace medio siglo, in- es decir, entre la dimisión de Adolfo Suárez y cluso de la discordia que fue su origen y fer- el triunfo socialista en las elecciones, se pro- dora. mento. Pero la desorientación ha sido reforzada dujo un principio de desorientación, porque Lo que está España es desorientada. La los españoles empezaron a no entender lo mediante cambios estructurales cuyo alcance trayectoria que había emprendido hace diez que pasaba, porque sintieron que se les es- tardará en medirse. La sociedad española años, y que se podría resumir en la expresión capaba lo que acontecía ante sus ojos perestá muy poco articulada; el espíritu indiviincremento de la libertad, sin romperse, sin plejos. Creo que se fue gestando una transidualista- que es bueno- y la insolidaridad resultar imposible, se ha desdibujado, se ha ción de la actitud de actores a la de especta- -que no lo e s- han hecho que falte la cohedebilitado, se ha vuelto problemática. España dores de algo cuyo argumento no está muy rencia, que escaseen las organizaciones priestaba llena de problemas, algunos muy difí- claro. vadas que dan consistencia a una sociedad y ciles de resolver, pero se planteaban desde hacen difícil su manipulación- n o digamos su Pero lo más grave ha venido después. El la libertad, que se presentaba como el mé- resultado de las elecciones fue sin duda queatropello- añádase a esto la ausencia de todo para intentar resolverlos. De ahí la in- rido por los votantes, pero no sé si deseado vida pública desde el comienzo de la guerra confundible impresión de dilatación de la vida por gran número de elios. Me pregunto si mu- civil. en que los españoles hemos vivido un quin- chos de ellos previeron ¡a mayoría absoluta y Pues bien, en los útimos años se han debiquenio; esto no quiere decir que todos estu- sus consecuencias. Tengo la impresión de litado las pocas organizaciones que establevieran contentos, pero sí que respiraban me- que se encontraron enajenados comprocían vínculos reales entte los españoles. Los jor. Sentían que España estaba en sus ma- metidos en algo que funcionaba mecánicacuerpos profesionales, los colegios que los nos, se veían como dueños de su destino, mente y sin contar con nadie. La situación en agrupan y organizan, han sido metódicaresponsables de la dirección de los asuntos mente perturbados, limitados, a veces enfrenque se había vivido durante cuarenta años nacionales, invitados a participar en ella. Hatados. Hay una tendencia a la pulverización parecía en algún sentido rebrotar, con la difebía confusión- a l comienzo, una multitud de de una sociedad no muy conexa, hasta el partidos que los electores, con claridad y fir- rencia fundamental, claro es, de no deberse a grado extremo que los farmacéuticos llaman meza, redujeron a unos cuantos en cuanto porfirización Con el polvo no se puede hapudieron votar- pero se podía reaccionar a cer gran cosa; si sopla un poco de viento, ella, marcar un propósito, y así se hizo, una polvareda, es decir, confusión; si se hucomeréis! derna, s. a. desde el referéndum para aprobar la Reforma medece, barro manejable, con el cual se Política- que abrió el paso a la transformapuede hacer lo que se quiere. ción del país, al establecimiento del liberaULTIMA PROMOCIÓN EN El referéndum sobre la OTAN es el mejor lismo y la democracia- hasta la Constitución. ejemplo de desorientación planeada. Los España estaba- como pocas veces desde PUERTA DE HIERRO cambios de postura son ininteligibles; pero hace dos siglos- -orientada. Por eso era posiademás no son completos, son internamente ble la esperanza; y con un poco de imaginaincoherentes: se quiere estar en la OTAN, ción y de suerte, la ilusión. 9 CHALETS DE LUJO pero menos (es decir, mal) La pregunta es intrínsecamente desorientadora, porque la A finales de 1980 empezaron a cambiar las de 280 m 2 mayoría tendría que contestar sí y no a sus cosas de una manera que no se acababa de Con piscina. jardín. garaje, bodega, buhardilla. etc diversas partes; es decir la respuesta tiene entender. La oposición mecánica, automática, Información que ser equívoca. La abstención también lo a todo lo que el equipo gobernante hacía C MONTES A, 12- 5 T- TeU 011151 es, porque puede parecer desinterés, pereza- especialmente a lo que hacía bien- y que EnObra c RQSALIAdeCASTRO, s n. o negativa al referéndum, que no se puede culminó en el voto de censura, que merecería (De Jueves a Domingos) expresar directamente. haberse examinado a fondo; la negación de apoyo a ese equipo de los que deberían ha ¿Qué se puede hacer? Ya no tengo lugar VENDEMOS, MUY BARATO para intentar siquiera una respuesta. Como ber temido su derrota; la aparición de extra- BONITO AUTOCAR DOS PISOS ñas tendencias suicidas dentro de los que reprincipio de orientación diré que hay que busPropio oficina rodante, publicidad, etcétera gían el país, nada de eso era verdaderacar ésta con el único método: la libertad. Teléfonos: 474 84 83- 474 74 30

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