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ABC MADRID 30-11-1980 página 43
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ABC MADRID 30-11-1980 página 43

  • EdiciónABC, MADRID
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DOMINGO 30- 11- 80 NUESTRO TIEMPO ABC 27 el Ayuntamiento incrementará el uso de los transportes, públicos, fundamentalmente el transporte eléctrico y, por último, se limitará el tiempo, horario, o la producción en aquellas industrias que puedan incrementar la contaminación. Éste grupo de medidas entraría en vigor cuando con carácter orientativo tres estaciones de seguimiento alcancen los índices de emergencia en primer grado. El tercero de los niveles, al que no se llegará en la práctica si se cumplen las medidas anteriores, prohibirá las calefacciones y aguas calientes centrales, restringirá al máximo el uso de vehículos privados y provocará el cierre temporal de las industrias con problemas de contaminación. Por otra parte, el Ayuntamiento de Madrid es partidario de que se ponga en práctica un Plan de Saneamiento Atmosférico para acabar con la contaminación. Este plan debe ser elaborado por una comisión mixta Ayuntamiento- Gobierno que habrá de tomar medidas inmediatas, ya que hasta ahora sólo se han puesto en práctica soluciones coyunturales que sólo sirven de parche. DISCREPANCIAS EN LAS COMPETENCIAS. -El Ayuntamiento ha solicitado al Gobierno, a través del Ministerio de Administración Territorial, que la facultad de declaración de situación de emergencia conferida por la ley a los gobernadores civiles pase a los alcaldes de aquellas ciudades que dispongan de servicio contra la contaminación atmosférica. Asimismo, entre otras cosas apunta en la solicitud que se apruebe con carácter de urgencia la propuesta de la CIMA sobre modificación de los niveles de contaminación para SO 2 y partículas en suspensión, a 250 micrqgramos por metro cúbico para SO 2 y 150 microgramos por metro cúbico para partículas. Londres: Éxito total en la guerra contra el smog LONDRES (Ignacio Carrión, corresponsal) Era tan grave la contaminación de Londres en los años cincuenta que los ingleses no tuvieron más remedio que declarar la guerra. No podían perder el tiempo midiendo la intensidad del terrible mal- -aquel smog mezcla de niebla y humo- sino que había que actuar inmediatamente. Esto parece una bobada y no lo es. Aquella filosofía de olvidarse de medir la contaminación para centrar todo el esfuerzo en exterminarla- -un modelo de pragmatismo- -ha dado resultados sorprendentes. Londres disfruta hoy de un aire limpio, un 40 por 100 más de horas de sol al año que antes de la lucha contra los humos. La gente respira bien, va más limpia y los edificios han sido, o están siendo, rescatados de la suciedad. Parecen nuevos. Este triunfo se debe a unas leyes de los años 1956, 1968 y 1974 aplicadas de una forma racional, progresiva e inflexible. Pensadas con calma, en primavera para evitar la improvisación y con ella más gastos y rectificaciones estúpidas. Y sobre todo son leyes que implican a la comunidad, que fue invitada a participar de mil modos en su elaboración y aplicación. EL PAPEL DE LOS MUNICIPIOS La multas son elevadas cuando el daño de quien contamina es grave. Las inspecciones dependen de las autoridades locales, asistidas- -si lo pierden- -por el Ministerio del Medio Ambiente y Sanidad. Pero el peso recae en los Municipios. De éstos dependen que los ciudadanos respiren aire limpio o lo otro. Londres se considera un modelo de saneamiento. Cada familia utilizaba calefacción de chimenea con carbón. La ley no prohibió es combustible, pero en plazos razonables hizo que el mercado ofreciera un carbón que no produce humo. Y ayudó a la conversión- -con cuantiosos fondos y créditos- -de calefacciones de carbón a calefacciones de gas. í. a electricidad es limpia, pero muy cara. Usted pasea por Londres y ve millones dé chimeneas que son nidos de pájaros. La contaminación que emana de allí es orgánica y va acompañada de trinos. Mil veces más sana. Sólo en el campo puede la gente quemar leña en la chimenea, con lo que el campo recupera una tradición exclusiva y romántica. Si alguien desea el fuego de verdad, con chisporroteo, debe abandonar la ciudad y volver al pueblo. LA POBLACIÓN, SATISFECHA El futuro no será peor. Acatada la ley, educada la población y satisfecha de sus beneficios, ¿quién desea retroceder a las bronquitis de los años cincuenta? Ahora la lucha ha descendido de esas chimeneas a los escapes de automóviles. Y la ley, que aprieta, pero no ahoga, exige que a partir del primero de año la proporción de plomo en cada litro de gasolina sea de sólo 0,40 gramos. Pronto pasará aquí como en California: prohibido el plomo en la gasolina y nuevos modelos de coches equipados al efecto. Además, Londres alienta al ciudadano a usar transporte público, con fuerte control anticontaminante, bicicleta y vehículosde reparto eléctricos. Dicen que la gente camina más que antes- -la crisis recae en la suela de los zapatos- -y ya sabemos que el paraguas no es instrumento que contamina. Si se produjera una emergencia, serían las autoridades locales las encargadas de arbitrar medidas excepcionales. Si la gravedad es máxima, y es preciso ayuda de la Administración Central, las leyes y el sentido común que las inspira así lo prevén. Hay una Comisión real para tratar esos problemas, y una decena de Asociaciones nacionales que participan en la lucha, y se dividen los triunfos. Aire limpio y poco ruido- -por no hablar de otras contaminaciones de agua o paisajeson bienes que los ingleses quieren conservar y enriquecer. Su dinero les cuesta, pero han sabido cómo invertirlo. 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