ABC MADRID 19-11-1972 página 151

ÁNGEL PALOMINO- -A mí me parece que le estamos buscando cinco pies ü gato a la obra de Salom. En ella se plantea con toda crudeza, por ejemplo, jue el jefe que quiere triunfar por la vía leí amor no lo consigue, sino que, como aiden los discípulos, es necesario emplear ía violencia. Lo que resulta verdaderamente triste y dramático es comprobar ómo, en definitiva, no sólo Judas, sino 1 resto de los discípulos, antes de Pentecostés, es decir, antes de su iluminación y su santidad, traicionan todos, de una manera o de otra a su Maestro. JOSEP MELIA. -Es muy interesante lo que acaba de decir Ángel Palomino. JUAN DE AVALOS. -Ni Cafrune ni yo hemos tenido todavía ocasión de opinar. A mí me gustaría decir brevemente que la obra de Jaime Salom es extraordinariamente importante, que se comprende el éxito que está teniendo, que no es extraño el interés y la atención con que los espectadores siguen todos los días la comedia y que en ella, efectivamente, se expresan ideas muy avanzadas que pueden LOPERENA: Desde el mismo momento en que nos planteamos ia manera de resolver Tiempo de espadas llegamos a la conclusión de que había que hacerlo resaltando toda su carga política, y en ese sentido orienté mi trabajo de dirección- NATALIA FIGUEROA: No comprendo por qué Martín Ferrand me ha comparado con Margarita Gautier. Que yo sepa, nada tengo que ver con ese personaje. han interesado entre las que he visto en los últimos tiempos. Les he escuchado a todos ustedes su conversación sobre el tema y me parece que, al margen de alusiones particulares y de denuncias concretas, estamos ante una obra intemporal, de gran alcance, que triunfará en el mundo entero. La única cosa que he echado de menos en Tiempo de espadas es ver al final de ¡a obra qué salida les daba el jefe, es decir, el Cristo, a cada uno de los Apóstoles. GARCÍA PAVÓN. -Sería injusto terminar este coloquio sin elogiar la gran interpretación de T i e m p o de espadas Cosa rara en la escena española, ninguno de los numerosos actores desentona, todos están bien, aunque justo sea reconocer el gran trabajo que realiza Sancho Gracia y la magnífica interpretación de Silvia Tortosa. Todo ello hace de Tiempo de espadas como he dicho antes, una obra realmente importante, la más sana que se ha puesto en la escena española en los últimos tiempos; una obra, en fin, con la que disfrutarán todos los aficionados al teatro. sute- escandalizar a la sociedad actual, la cual, sin duda, se siente aludida por las denuncias vertidas en el texto de Salom. Pero esas denuncias son las del mensaje evangélico, son las de Cristo. A alguna persona que me hablaba, escandalizada, de la obra de Salom, le contesté que somos muchos los que tenemos un líder de ideas avanzadas, que ese líder murió hace dos mil añas y que la revolución que predicaba no ha sido llevada por completo a la práctica. En definitiva, creo que el Estado, en lugar de ayudar a algunas obras de teatro o de cine llenas de violencia y de crímenes, debería subvencionar a obras como la de Jaime Salom. MARTIN FERRAND. -Es una aspiración llena de buena voluntad, pero no me parece muy probable que se cumpla. JORGE CAFRUNE. Tiempo de espadas es una obra realmente importante y trascendente. Es, sobre todo, una obra llena de sugerencias. De sugerencias para todos los espectadores, sean de la ideología que sean. Jaime Salom ha escrito una de las comedias que más me MARTIN FERRAND: Frente a la argumentación de algunos de que son más comerciales los vodeviles, basta recordar que ios grandes éxitos teatrales de taquilla de los últimos tiempos no han sido precisamente vodeviles: Tartufo El círculo de tiza caucasiano El enemigo del pueblo La casa de las chivas etcétera.