ABC MADRID 28-10-1972 página 124

y poesía, Réquiem cada día La visión de una existencia en la que al otro lado de las cosas- más allá de la rosa -están la muerte y la podredumbre agasamdas, llena algunos de los mejores- poemas de la última etapa creadora de Carlos Bousoño. uno de los poetas más ricos y hondos de los últimos decenios. MAS ALLÁ DE ESTA ROSA una rosa se yergue. Tú meditas. Se hincha la realidad, y se abre, se recoge, se cierra. Cuando miras, entierras. Oh pompa fúnebre. Azucena: Relincho espantoso, queja oscura, milagro. Tú que la melodía de una rosa escuchaste, sangrienta en el amanecer cual llamada de una realidad diminuta, miras tras ella el hondo trajinar de otra vida, la esbelta rapidez con que algo se mueve en la noche con prisa, como si quisiera llegar a una meta insaciable. Hay detrás de esta rosa, que yergue suavemente su tallo, una pululación hecha náusea, un horrible jadeo, una ansiedad frenética, un hediondo existir anuncia. Una trompeta dispara su luz, su entusiasmo sonoro en el estiércol. ¿Qué dices, qué susurras, qué silbas entre la oscuridad, más allá de esta rosa, realidad que te escondes? ¿Qué melodía articulas y entiendes y desdices y ahogas, gpié rumor de unos pasos deshaces, qué sonido contradices y niegas? La cadencia está dicha, realizado el suspiro. El rumor es silencio, la esperanza, la ruina. Todo silba y espera, silencioso, engreído, más allá de esta rosa. H Más allá de esta rosa, más allá de está man que escribe y de esta frente que medita, hay un mundo. Hay un mundo espantoso, luminoso y contrarié a la luz, a la vida. Más allá de esta rosa e impulsando su sueño, paralelo, invertido hay un mundo, y un hombre que medita, como yo, a la ventana. Y cual yo en está noche, con estrella al fondo, mientras muevo mi mano, alguien mueve sa mano, con estrellas al fondo, f escribe mis palabras Ú. tetes, r la borra. DONDE Dónde el latido, el virgen miedo, Ja tempestuosa semilla que se abrirá mañana como espanto, cual trueno dentro de ti, que se abrirá a la ñocha súbita, a la vaciedad da tus cuenco ojos vacíos del no ver, resplandor del no mirar, horrísono sonido del no oír y no palpar, sí, dónde. Dónde en tu corazón entregad dónde en tu pecho, dónde en tu risa, en tu hablar cotidiana, en tu diriglrt 9 i amigo, dónde al coger, agarrar, retener, alcanzar, dónde en medio de tu felicidad, én la mitad de un calcinante amor, en el jadear mismo del amor, del placer del amor dónde Se esconde. Dónde, dónde estará, dónde está ya, dónde está ah dónde está muerto ya, hace ya mucho ya, dónde tú, vivo, muerto, hecho, dicho, nicho Carlos BOUSOÑO