ABC MADRID 17-08-1972 página 37

ABC. J U E V E S 17 DE A G O S T O DE 1972. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. S 7, lí jj íl i! MEMORIAS DE UN NIÑO DE DERECHAS De Francisco UMBRAL Adiciones Destino. Barcelona, 1972. EDITORIAL TECNOS: Iniciación a la teoría intuitiva de conjuntos, de Javier de Lorenzo; La vía del desarrollo (varios) publicada con la cooperación de las Naciones Unidas; La justicia social en el Derecho de las naciones, de Wilfred C. Jenks, director general de la O. I. T. EDICIONES GUADARRAMA: Memorias de Clarito de César Jalón; De la infancia a la adolescencia, de C. Kohler y P. Aimard; La pareja, de Odette Thibault; Historia contemporánea de Iberoamérica (tres tomos) de José Belmonte. Por José María RÜIZ GALLARDON Este libro de Francisca Umbral está dedicado a los desvencijados niños de la guerra que comieron conmigo el pan negro de salvados y la tajada del miedo Evidentemente no es una novela. Tampoco es un libro de historia. Quiere ser- -y lo consigue- -un libro- documento. Es un relato, subjetivo, desde luego, de unos años, duros y difíciles, vistos desde hoy, pero trasladada la perspectiva hasta el asombro de un niño de los años cuarenta. Y es un libro amarga, amargo hasta el fin. Fero es un libro importante, veraz y lleno de una triste ternura. Está admirablemente escrito. Su lectura hace sufrir, pero también deleita. En este sentido es una obra muy atractiva. ¡Los años de la posguerra! Ahí es nada. Francisco Umbral, como él mismo dice, al igual que los filósofos y que los músicos comerciales, vive esos años orquestando lo que han hecho otros Pero esos otros fueron los combatientes de la guerra civil, los españoles todos que vivieron la gran tragedia. Para los niños de la zona nacional, que éramos los verdaderos niños los otros, los de zona roja, debían ser unos endriagos inconfesos) la guerra que, antes que nada, la presencia de los nuevos y los regulares. Umbral toma partido. Partido que desmiente luego porque sus simpatías están del otro lado Lo diga o no, pero es asi. Y no seré yo quien me aventure a afirmar si ello es bueno o es malo. Lo que sí digo es que es parcial, inexacto. Para ios niños de la guerra, ésta era un espectáculo asombroso. Y heroico. Para los de aquí y para los de allá. Las pinceladas de Umbral deslumhran, pero apenas aclaran. A veces aciertan: Los. alemanes también estuvieron en nuestra guerra, según los historiadores que hemos consultado luego Hugh Thomas y otros, pero a los alemanes nosotros no los vimos nunca, esa es la verdad, digan lo que digan los historiadores. Los legionarios. También pasaron por nuestra ciudad los legionarios, con sus uniformes verdes, sus pechos de cobre, sus tatuajes, sus medallas, sus gorros ladeados, sus puñales. T también las mujeres. Porque las mujeres hicieron la guerra. Activamente. Como las enfermeras y las madrinas de guerra. La enfermera era una Julia Sforza, una Médicis, una amazona, y la, madrina de guerra se quedaba en Penélope, que fue la madrina de guerra de Ulises, la primera madrina de la Historia, porque ocurría que esto de la madrina de guerra ya lo habrían inventando los griegos, como casi todo. De nuevo la tristeza, el dolor, el quejido. Ha llegado, para ese niño que era entonces Francisco Umbral, ha sobrevenido la paz. La paz, que no fue mejor que la guerra, sino que en la posguerra empezamos realmente a pasar frío, hambre y teníamos que ir a la cola del pan, a la cola de la leche, a la cola del aceite, a la cola de- los huevos, a todas las colas a donde nos mandaban nuestras madres. El recuerdo de la posguerra es el de un largo invierno de varios años y sin duda debió de nevar mucho. Nevó. Durante muchos, años. Durante los años en que los niños de en- CRÓNICA SEMANAL de las LETRAS EDITORIAL DONCEL: El arca, de Noé, de Alfonso Martínez- Mena; Historia de la literatura infantil española, de Carmen Bravo Villasante; El secreto de Maston, de Julio Verne. EDITORA NACIONAL: La guerra de España y el cine (dos tomos) de C a r l o s Fernández Cuenca; Lírica española, de Luis Rosales; Lecciones de tinieblas, de Eduardo Garrigues; Humanística, de José Larraz; Viaje de los ríos de España, de Pedro de Lorenzo. EDITORIAL NOGUER: El verano del lobo rojo, de Morris West; Ladrón contra asesino, de Giorglo Scerbanenco; Canaria (La guerra española y Xa segunda guerra mundial) de André Brissaud; Obras completas (tomo IV) de Zunzunegui. ALIANZA EDITO- RIAL: Ocho siglos de poesía gallega (Antología bilingüe) de Carmen Martín Galte y André? Ruiz Tarazona; Sistemas de parentesco y matrimonio, de Robín Fox; Técnica y civilización, de Lewls Mumíord. lillM ¡IUlU! ll! m llimiMI! il: n ¡l ¡m tOnces nos fuimos haciendo hombres, y nuestras madres, las que sacaban de donde no había algo con que comer o con que vestirnos, se fueron haciendo ancianas. Durante los años en qué nuestros padres y nuestros hermanos mayores los que habían quedado, pues a los otros se los llevó Dios en el frente o con tiro en la nuca disparado por cualquier miliciano de los de U. H. P. hicieron posible el volver a vivir, el poder estudiar, el situarse en un, mundo que nos era hostil y que nos hizo pagar, al precio de nuestra hambre, el no querer renunciar a ser españoles. Da pena que todo un gran escritor como Francisco Umbral se olvide de tanto sacrificio, de tanta voluntad de entrega, de tanto- -será retórico, pero es verdad- -heroísmo. Hay, es inevitable, lo sé, errores en la narración. Cuando Umbral habla de las canciones de la época- -y de una época sobre todo queda el perfume de sus canciones- -se refiere a la de V i l l a g a r c í a La transcribe hasta a q u e l estribillo de te daré,