ABC MADRID 09-07-1972 página 121

dactrína. ur o3 dlhoanlví? Las gakflIíitDft no l o i l l a n o n ya. No hay pomplduismo: no De EffliD ni d i una conllnuflclán n siqL; JarQ de una avoluclún do I gauMIsmo, Sólo fiubsblen unos homtirfls cciya única condición dfl suparvlvancla es permanecflr jnidOSs Estos hombres prcjclíi man: Somos un hacho, t i hacho miyorltario Qué inversión de lot valores gauMIalasI De Oaullflp al hombre por encima de los partidos, el que daspreclabí los pcr ld 04 repllr ndo slr ces r quo lodfls les desgracias de Francia venfan de ellos. V íioy unos herederos que sólo tienen una tdaA: ser un panLúo, uri partido en el que se mezclen reformadores- -mlnorllarloa -y conservadores -predom I nanita- como ha explicado A) bin Chalarv don. GEOFlQES POMPIOOU TOMA SUS DISTANCIAS CON RESPECTO A LA U. D. R. Cuarta comprobación: Ea t a crisis ¡niBrna no se maniíestará al empíior mientras loa gaullletas no se separen, y puede apostarse razónebiemenia a que Id cohesión da fachada durard hesia las prüxjmas elecciones ii grslBiivas. Pero no hay un jefe prestigioso. Le coyuntura económica V EoclaF puede hacerse difícil 1 afio prúKima por causa de la crjsjs monelaria. El des- onlenTo va a amplificarse. Millones de Franceses que votaban a la U, D, R porque votñban a De Gaufle cuando más transparente era ef candidato más consistencia tenia a sus ojos) van a encontrarse desamparados. Todo esto hace prever un retrocsso gaullisia. ¿Será margina i, sustancial o profundo? No puado decirlo aún Oulnie comprebadán; El presiOenle de la Repúbihca ae prepara u esta eventualidad. No guiare Identificarse con el retro; eso; lema sus distancias. Una jequBfla frase deslizada en una Honferoncia de Prensa es Impor anta, porque deja en llberlad la opinión pública. Anleg se dea: S I no voláis por mi serfi cao? Hoy el presidente de i RepijbFlca dice: Voleú como uerais; son posibles v riea moorlas Grao que Qeorges PomplOou scá dispuesto a conatllulr un obierno con hombres y grupos alIriLu? LJB IÜH quU íljtmitn IH ayorJa actúaL con la condlcfón r supuesiOn de no tener con líos antagonismo absoiuToFranie a esras comprobadoes, el centro, o me or el moviiento profundamenle aemOcray social que Jep res en la mes, ene tina mlslOn, Reunir, bofo fía íorma que ae determinara ás adelante- -no abordamoa jr er momenlOn el problema de estructuras exactaa: ledeuün. coníoderaciün, movlmlen, unión, tc- a lodos los FcBnofa ee e n c u e n t r a e n f r e n t a d a con u n v i e j í s i m o p r o b l e m a u e t e r n o problerna- oon- o l l a r e s l a b l l l d a d y l i b e r t a d d e m o s t r a r q u e QB o a p a i de daree u n a v e p d a d e r domoof- aola eeorlbe Lecanueln En l a i m a g e n u n a a s a m b l e a e a t u d l a n l l l en l a o a p l t a l franceea demócratas, desda ios social Islas humanistas a ios liberales progresistas. Nuestra misión a ar el e e el rededor del cual inlenla Incansibiemanle abrlne el enlCD lento hecLa la derec h i como hflcla la Izquierda. CON L 0 COMUNISTAS. NO Pero hay que saber que no coexJaiiró con cualquiera en esa egrupaclón. Con los comunlstoa rio veo acción común posible. Lo he repetido on oonsjrooe de Nanles, Es ciarlo que das pliegan un enorme síTuorio para presentarse como un simple partido de izquierda con un pro grama moderado. Mas pars confiar en ellos habría que olvidar el pasado. Creo que pasará muf ho tiempo antes da que se borre el recyflrdo de a adhesión del partido comunista a IB poliilce practicada en lo pelses del EsiQ y antas da que se le pueda considerar como un panldo democrAUco, Creo qua oslo mismo as lo que preocupa hoy a Fran 1 jóle Mltlarrand, De todas tormas, el partido comunista propugna un tipo de sociedad lotal I la ría distinta de la sociedad da libertades a la que estamos adscritos. Los unos o los otros pueden Imaginar muchas combinación nes electorales; pero gobernar con los comunlstasn no. Hay una Incompatibilidad absoluta. Sólo es posible arlarse con aquellos con quienes se puado gobernar. Esta actitud vale por demús para todo el mundo. A la izquierda nos encontramos, pues, an presencia de dos partidos muy antiguos que acaban da cambiar de jefe. EmpoiarA por los sockaljscas y Franjóle Mlttarrand. La cuestión es cFara: ¿Es mAs lAcll o mis dlIfcil encontrar un terreno de acuerdo con los soclallslac desde que Fran ois Mjtterrand es au secretario general Responderü do forma matliada. El entendimiento es más d ffclj en el sentido de que al partido socialista, y no süFo la persone de Fran gls Mllterrand, eslA plenamente comprometido f- en una poirtlca da unión de Izquierdas, comprendido el partido comunista. AdemAs. r itiarrand se ha pronunciado clare m e n t e en varias ocasiones, cbnira toda estrategia Temo que de tris de esta actitud haya un peso sociológico. stecloraL Hablando clarajnente: cuando, en una circunscripción, el candidato soclaljsia t i e n e unos votos mAe que el comuniete es elegido Invocando la unión de la izqulsfds. Esto es rentable para ellos, ¿pero conduce a una capacidad da gobernar al pafa? fara. póf otra pana, el BUÍUH dimlertto me parece mis ffttil en la medida en qua no es seguro que los sodallsiaa. en su fuero interno, desean verdaderamente llevar a los comunistas al gobierno, por no decir que lo que quieren principalmente es no llevarlos- Este es el problema de Fran ois Mlttartand: discute con el P, C- pero todos p a r c I b e n aus vacHaclonaa a aliarse hasta al hn. con lo que la dinámica de la Izquierda quq- r da alterada. i 9