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ABC MADRID 05-04-1972 página 51
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ABC MADRID 05-04-1972 página 51

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC. M I É R C O L E S 5 DE ABRIL DE 1972. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 51. LA VIRUELA DE YUGOSLAVIA SU TASA DE MORTALIDAD PUEDE CONSIDERARSE ENTRE El DIEZ Y VEINTE POR CIENTO Hasta ahora se han registrado veintitrés fallecimientos en todo el territorio yugoslavo Belgrado 4. En una entrevista concedida por el experto de la Organización Mundial de la Salud, doctor Lindner, a la agencia Tanjud queda patente que la situación se considera estacionaria. El experto de la O. M. S. afirma que buena parte de los enfermos no pueden considerarse como graves y no corren peligro de muerte. La epidemia actual tiene un grado medio de gravedad, con una tasa de mortalidad entre el 10 y el 20 por 100. En Belgrado, en los últimos seis días no se lia presentado ningún nuevo caso, por lo cual se supone que se ha alcanzado una fase estacionaria. El número total de enfermos en Kosovo alcanza los ciento dos, de los que quince ha- a fallecido. El número total en todo el territorio llega a ciento cuarenta y nueve, con veintitrés fallecimientos. -Efe. SEVERAS MEDIDAS DEL GOBIERNO TUNECINO Túnez 4. El Ministerio tunecino de Sanidad lia publicado un decreto por el que declara obligatoria la vacuna antevariólica para todas, las personas que se trasladen a Yugoslavia, según informa la agencia Map. En el decreto se declara, asimismo, obligatoria la presentación del certificado internacional de haberse vacunado por parte de cuantos lleguen a Túnez procedentes de Yugoslavia. Ambas medidas estarán en vigor hasta que la Oiganización Mundial de la Salud anuncie que ha desaparecido la viruela en dicho país. -Efe. SE INTENSIFICA LA CAMPAÑA DE VACUNACIONES EN RUMANIA Bucarest 4. Según informa la agencia rumana Agerpress, Rumania se ha decidido a tomar medidas más severas de control en las fronteras. Se piden certificados de vacunación a todos los viajeros que pretenden entrar en territorio rumano. Al mismo tiempo se ha intensificado la campaña de vacunaciones. -Efe. CONFERENCIAS DEL DOCTOR SCHÜLLER EN ROMA El profesor don Amador Schüller Pérez, catedrático de Patología Médica de la Facultad de Cádiz, agregado a la Complutense y jefe del Servicio de Medicina Interna de la Ciudad Sanitaria Provincial Francisco Franco, ha sido invitado por el Instituto Hospitalicio de Santa María Galicano, de Roma, para dar unas conferencias que se celebrarán los días 6 y 7 de este mes sob x profirias. NO SE CONFIRMAN MAS CASOS EN ALEMANIA Hannover 4. Exceptuado un obrero yugoalavo, emigrante de la comarca epidémica de Kosovo, que se encuentra en tratamiento en el pabellón de infecciosos, ninguna de las personas en cuarentena de primer grado de contagio presumible, en número de veinte, ha registrado síntomas de viruela; para este grupo, terminado el periodo crítico de incubación y, por tanto, el de observación, ha concluido el internamiento. Una turista alemana, procedente ñe Yugoslavia, que ingresó anoche, sospechosa de FARMACOFAG 1 A embriogénesis. El profano no tiene obligación de saberlo, mas sí de abstenerse de una conducta automedicante. ¿Que es difícil sustraerse a esta tendencia de la automedicación? Ello es evidente. También resulta imposible frenar la locura de la carretera y todos conocemos los resultados. Son fenómenos consustanciales con nuestro modo de vivir, difícilmente corregibles, pero no por ello exentos de una sensata llamada de alerta. La farmacopea actual ha cambiado sustaneialmente- junto con las nuevas técnicas quirúrgicas, las radiaciones tonteantes, etc. -el pronóstico de casi toda la patología; negarlo es absurdo, pero tampoco se puede silenciar lo que, como arma de dos filos, representa. Baroja, en sus escarceos de ejercicio- profesional médico, con un elevado sentido responsable y pragmático, declaraba sin pudor su temor a medicar, hasta el punto de que cuando lo hacía era en pequeñas dosis, posiblemente insuficientes, ya que si bien carecían de acción curativa eficaz, tampoco podrían implicar mayores daños al enfermo. Vivimos en una sociedad hedonistq, proclive a- evitar toda molestia psicofísica, y para ello nada mejor que la gula medicamentosa. Se devoran por doquier psicofármacos a través del consejo de familiares o aviigos. Jamás se ha caído tan hondamente en el temeroso abuso de prodigar los analgésicos y barbitúrieos. Unos son partidarios de los tranquilizantes e hipnóticos, otros de los euforizantes y antidepresivos. Se ha perdido el miedo al uso de las hormonas y, nada digamos, de los antibióticos, cuya administración indiscriminada va conduciendo a que, en un futuro no muy lejano, las resistencias bacterianas se carcajeen hasta de los antibióticos de mayor y amplio espectro, con lo cual retrocedamos a la era pre- Fleming. Y todo ello, en la mayoría de los casos, a espaldas del consejo médico, dada la facilidad de adquisición que en casi todos los preparados comerciales existe, desde el momento que la prescripción por receta es un formulismo utópico, carente desgraciadamente de rigor oficial. En cierta ocasión Voltaire respondió a un joven que solicitaba su consejo para estudiar Medicina: ¿Qué se le ocurre a usted, insensato? ¿Quiere introducir venenos que no conoce, en cuerpos que todavía conoce menos? Si apartamos de tal respuesta el fondo agrio y mordaz que dedicaba sistemáticamente a los galenos de su época, observaremos que persiste en el consejo un padecer viruela, en la clínica de Amberg, fondo de verdad, que bien pudiera aplino presenta ningún síntoma, y los análisis carse a la Medicina de nuestros días, en serológicos e histológicos con el microscola- que el temor a las reacciones contrapio electrónico han dado un resultado nelaterales de muchos fármacos ha dado gativo. lugar a que se estime en su justo palor una nueva patología: la Iatrogenia, es Todavía continúa en Hannover, en diez decir, el nacimiento de enfermedades pabellones de aislamiento, la observación derivadas de los medios curativos. clínica de seiscientas cuarenta y cinco perLos laboratorios farmacéuticos somesonas, por no haber transcurrido para ellas ten previamente a la expedición de sus el período de incubación del presunto conproductos en el mercado a una serie de tagio con el virus. Por otra parte, han sido pruebas de control y seguridad, que son vacunadas en esta capital setenta mil perposteriormente contrastadas por las autoridades sanitarias del país. Los mésonas. -Efe. dicos, por otra parte, son perfectamente informados de cada medicamento que se pone en circulación, en cuanto a sus pros y contras. Su base y conocimientos clínicos les facilitan la debida prescripción en cada caso. Si, pese a todos estos pasos obligados de seriedad científica, surgen en ocasiones desagradables contingencias, ¿qué no ha de ocurrir cuando el profano, de motu prqprio a toda esta semana en instancia de una voz amiga, ejerce imprudentemente la automedicina? Pensemos seriamente que una cosa 9 huevos de pascua. es la correcta medicación por quien está cochinillo gélee salsa rábano. facultado y otra la farmacofagia. Las baranina kasha (cordero) consultas médicas harto saben de este postre paskha y kulich. temeroso proceder. -Dr. J. CRUZ Y De vez en cuando, arropada por el sensacionalismo, surge impactante la noticia: determinada droga es capaz de provocar... ¿Es bueno, quizá necesario, Que en ocasiones aparezca él aldabonazo de un daño medicamentoso repicando en las vientes de una sociedad de superconsumo de fármacos? Posiblemente, sí. Sobre todo si la noticia se expende al mundo profano en condiciones de perfecta digestibilidad. No hay que olvidar que tan contraproducente es el temor como la inconsciencia; el primero puede ser funesto en el sentido de llegar a incapacitar psicológicamente a la persona para medicarse correctamente; el segundo, no lo es menos en cuanto que indiscriminada y hasta irracionalmente un amplio sector ciudadano abusa incontroladamente de la farmacopea comercial. Pero este fenómeno de farmacofagia no sólo tiene lugar paramédicamente; justo es decir que también tiene una evidente vigencia dentro del seno profesional. Del nihilismo terapéutico que hemos vivido hasta hace cuatro decenios- -escribe certeramente Fernández Cruz en una reciente publicación suya- en los que leíamos en los tratados de Medicina interna numerosas páginas dedicadas al diagnóstico y exploración de los pacientes, tan sólo unas breves líneas dedicadas a la terapéutica, hemos llegado a esta nueva fase de los errores de la clínica, en la que puede hablarse de un nihilismo diagnóstico que se oculta dramáticamente tras el telón de fondo de la actual y brillante farmacología. El que el australiano Mac Bride haya recientemente dado un toque de atención sobre la potencial acción teratológica de cierto producto médico, tras el impacto que produjo hace unos años la Talidomida, no significa que esos prematuramente anatematizados fármacos deban de ser proscritos, ya que tienen y siguen conservando su importante acción terapéutica, sino que en determinadas personas y situaciones orgánicas no es aconsejable su consumo. El medicamento no es, pues, el culpable, sino posiblemente el indiscriminado uso del mismo, quizá fuera de la prescripción facultativa. Todo médico sabe la acción nociva que cualquier agente exógeno puede acarrear sobre el producto de la concepción en sus primeras fases de blasto- pascua rusa eS cosaco Alfonso Sexto, 4 255 35 48 HERMIDA.

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