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ABC MADRID 18-12-1971 página 41
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ABC MADRID 18-12-1971 página 41

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC. S Á B A D O 18 BE DICIEMBRE DE 1971. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 39. A B C EN NUEVA DELHI El ALTO EL FUEGO Yahya Jhan ha decidido poner fin a la guerra después de los reveses paquistaníes en el frente occidental TERMINADA LA GUERRA, RESTA LOGRAR EL ACUERDO POLÍTICO Nueva Delhi 17. (De nuestro enviado especial, por télex. La guerra ha terminado. The war is over dicen los taxistas y los comerciantes de Connaught Circus, en Delhi. Vamos de sorpresa en sorpresa. Y ésta jes la más inesperada, súbita y sensacional. Pero verdaderamente la guerra ha terminado. ¿Quién podría esperarlo después del violento discurso que lanzó ayer a su pueblo e) presidente Yahya Jhan proclamando una vez más, en tonos inflamados y grandilocuentes, con Tirteo del islamismo, la guerra santa- Jehad -contra la India? Pero así es. Fueron esta tarde, ai anochecer, los locutores de las radios paquistaníes los que lanzaron ál mundo la noticia: Pakistán aceptaba el alto el fuego propuesto ayer tarde por Indira Gandhi y rechazado ayer noche violentamente por el presidente del Pakistán. Las radios indias no han hablado todavía del asunto. Lo harán esta noche. El black- out continuará hoy, pero, desde mañana, volverá al país la normalidad. Normalidad de las Navidades cristianas que también el hinduismo celebra con regocijos y cruce de obsequios innumerables. La razón decisiva del repentino pacifismo paquistaní es clara. Dijimos en nuestro despacho precedente que se reñía desde ayer una gran batalla de tanques en territorio de Cachemira, sector Pathankot- Samba, y que los escuadrones del Ejército indio avanzaban y destruían los carros enemigos con inusitado empuje. Hoy siguió la batalla. Se cernía sobre Pakistán la amenaza de una invasión incontenible de su propio territorio. Informes militares indios daban por cierto que en quince días Pakistán occidentai seria ocupado por los jawans (que en hindú quiere decir hombre joven y que generalmente se aplica a los soldados) Esta noche seguirá el black- out Pero mañana las noches de Delhi y Nueva Delhi conocerán el alborozo de estas fiestas y el estallido de entusiasmo de la población. La noticia del cese el fuego no será oficial hasta dentro de unas horas. -Luis CALVO. UEVA Delhi 17. (Crónica de nuestro enviado especial, por télex. Jehad es, en el lenguaje urdu que se habla en el Pakistán Oeste- -el único Pakistán (53 millones) ue queda, después de la crea- ción del Bangla Desh (que significa país de Bangla) Jedah significa para ios musulmanes del Pakistán occidental Guerra Santa y a la prosecución de esa guerra sin cuartel apeló anoche, en su discurso desde Radio Pakistán, el presidente Yahya Jhan. Todo lo contrario de lo que esperaban los círculos diplomáticos de Nueva Delhi. Paciencia, hermanos- -dijo- la guerra continuará hasta la reconquista de todos los territorios ocupados por el enemigo. Esto es: Bangla Desh (75 millones) y las zonas avanzadas que en Cachemira y Jammu, apuntando hacia Pakistán, tienen en su poder los soldados de la India. Si una gran potencia (Rusia) no cesa en su ayuda a la India, expansionista e imperialista, toda el Asia y el mundo entero se verán enredados en una nueva guerra mundial. Tengo la cereteza de que las potencias extranjeras harán lo necesario para evitarlo. Pero nuestros Ejércitos no descansarán hasta que el enemigo no se vaya de los territorios que ha conquistado. Y Yahya Jhan recitó devotamente unos versos del Corán. A nosotros, desde el corazón sereno de la India, nos parece que el presidente del Pakistán, estimulado acaso por el afán de confortar y enfervorizar a su pueblo, rebasa demasiadamente con el deseo la realidad. Ayer mismo, mientras la India celenrava parvamente, discretamente, la rendición incondicional de los defensores de Dacca, en el frente occidental- -el oriental ya no existe- -se reñía la más dura batalla de carros de esta guerra, y los escuadrones indios, que sufrieron pérdidas notables, expandieron 825 kilómetros cuadrados su zona de ocupación dentro del territorio paquistaní, en la bolsa de Shakaragarh, frente a Pathankot. No pa- N EL JUEGO DE LAS GRANDES POTENCIAS rece que Pakistán haya entablado hasta ahora su arsenal. Posee una aviación fuerte y numerosa, y abundante material de guerra. El arsenal está casi intacto. (Lo dicen los indios. La guerra puede prolongarse y complicarse. Pero Bangla Desh, el Pakistán del Este, no volverá a ser gobernado desde Lslamabad, a dos mil kilómetros de distancia, ni será el Pakistán potencia que en lo futuro tenga parte en el incierto destino de este nuevo país asiático. Indira Gandhi había, previamente, ofrecido al enemigo un cese el fuego y el término de la guerra. Sus aspiraciones estaban logradas. Diez millones de bengalíes del Este (Pakistán del Este, hoy Bangla Desh) habían entrado en su territorio huyendo de las crueles represalias que, contra sus anhelos de independencia, sancionados por enorme mayoría en las urnas, infligían las autoridades militares de Pakistán. Hubiese sido más costoso alimentar, curar y refugiar a esa masa que emprender una guerra en favor de Bangla Desh y creaV la nueva nación. Alcanzada la meta, India no está interesada en seguir una guerra en el frente occidental. ¿Es la China, es Estados Unidos los ue avivan el espíritu bélico de Pakistán? Así lo dicen los comentaristas de Nueva Delhi. La China difícilmente se avendrá a una influencia de la India sobre Bangla Desh. Observa, aguarda y se prepara. Aguarda su momento. Se prepara- -quizá con la aquiescencia americana (hipótesis india) -a un futuro enfrenlamiento con Rusia, o a una política insinuante y sigilosa de agitación revolucionaria. Pekín ahora denuncia furiosamente una intrusión de soldados indios en su frontera de Sikkim, y Nueva Delhi replica que es una acusación semejante a la que China esgrimió para apoyar al Pakistán en 1965. Entonces reprocharon los chinos a los indios el robo de algunas ovejas y búfalos en el mismo territorio fronterizo de Sikkim. Es innegable que China sostiene a Jahya Jhan como Rusia sostiene a Indira Gandhi. Una extensión del conflicto en el Pakistán occidental puede significar el comienzo de una guerra internacional. La advertencia llega de Francia, Gran Bretaña y los propios Estados Unidos. Pero si los Estados Unidos aceptan ya el hecho ¿no sería éste el momento de cesar el fuego, como propone Indira Gandhi desde Nueva Delhi? Anoche, oyéndola en la televisión, nos ilusionaba la idea de que el black- out siniestro desaparecería hoy mismo, de pronto, y las ciudades recobrarían su pintoresca traza habitual. (Pintoresco viene de pintor, y no hay en el mundo un derroche de tonos, y colores como el de las calles y caminos de la India en tiempos de normalidad, bajo el sol o bajo la luna. No será así. La guerra seguirá. La oferta de Delhi es menospreciada en Islamabad. En la carta impresionante que Indira Gandhi ha dirigido al presidente Nixon recuerda que su padre, Nehru, y ella misma han estado veinte años pidiendo a Pakistán un pacto de no agresión, rechazado sistemáticamente por el Pakistán. No queremos nada para nosotros. No Heremos tierra alguna de lo que fue Pakis- -SAN IORENZO- -DE E l ESCORIAL EDIFICIO GODOY CALLE JUAN DE TOLEDO, 24- 26 APARTAMENTOS DE LUJO Llave en mano, con plaza garaje. F A C I L I D A D E S 5 AÑOS VISITE PISO PILOTO TFT PPÍMWO. 2 2 1 8 9 X 221 89 13 TELEFONO. 296 0110- 296 02 91

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