ABC MADRID 15-04-1971 página 112

¿y poesía, cada día También el tema del ruiseñor es uno de los preferidos en los voetas del 27 siguiendo la estela abierta por Juan Ramón. Pero- -en contraste con los clásicos que presentábamos ayer- -aquí el canto y él vlumaje del ruiseñor son cantados en si mismos no como símbolos del amor y sus problemas Es significativo que la forma preferida sea, en esté tema y en este grupo de poetas, la décima o sí poema brevísimo. EL ARCA DE NOE Los Pájaros (2) CANTA UN RUISEÑOR Ruiseñor de la noche, ¿qué lucero hecho trino, qué rosa hecha armonía en tu garganta canta? Pájaro de la luna, ¿de qué prado divino es la fuente de oro que surte en tu garganta? ¿Es el raso del cielo lo que envuelve la urna Se tus joyas azules, temblorosas y bellas? ¿Llora ein tm pecho un dios, o a qué antigua y nocturna primavera has robado tus aguas con estrellas? RUISEÑOR Juan Ramón JIMÉNEZ El ruiseñor, pavo real facilísimo del pió, envía su memorial sobre la curva del río, lejos, muy lejos, a un día parado en su mediodía, donde un ave carmesí, cénit de una primavera redonda, perfecta espera, no responde nunca: si. Jorge GUHJLEÍÍ unidas por un temblor. Riela trinos, ruiseñor, sobre agua de astros en calma, tú, que humedeces la palma de la mano de Dios, y osas probar a las lindas rosas la inmortalidad del alma. Adriano DEL VALLB TRINOS La luna, de fría gala, como llovida del cielo, abre y cierra su desvelo cuando en las nubes se instala. El ruiseñor se acicala, señoreando verdores; maestro de los cantores, modula un trino ligero y piensa, oyendo al jilguero: ¡No son todo ruiseñores! Clemencia LABORDA RUISEÑOR Y MIRLO (cantores a un tiempo) k Atribulados a dúo: los dos en primeros planoaSegún mi atención sitúo así cantan de lejanos. Todo depende de mí: oírlos allá o aquí y hacer que enmudezca uno. Y si mi audición dedico, a un compás, a pico y pico, me enamoran de consuno. Miguel HSRNANDEZ RUISEÑOR Yo conocí un ruiseñor que tenía el nido hecho con cuatro yerbitas secas y una rama en flor de brezo que era rosa en primavera y era rosa en el invierno. Rogelio BUENDli RUISEÑOR La pálida luna en flor y la fuente, en mil promesas, son dos hermanas siamesas