ABC MADRID 16-11-1969 página 182

SALUD Y BELLEZA TUBERCULOSIS PULMONAR Por el doctor M. de AGUILAR MERLO Ih la Sorirtlitil KnttnñnUi d Médicos Kacriturr T ODAVÍA no hace muchos años la tuberculosis pulmonar era sufrida por la inmensa mayoría de habitantes en una gran ciuiad. Como su nombre indica, es la locaUzacíórí en los pulmones de la infección producida por el bacilo tuberculoso descubierto por Robert Koch, o bacilo de Koch Modernamente, en todo el mundo, va reduciéndose su extensión y asimismo en España debido a varias causas: la higienizadón en el consumo de la leche, la mayor limpieza, viviendas más sanas, descubrimientos de medicinas eficaces y a las campañas ie la Dirección General de Santidad en pro de la vacunación de tos niños por el bacilo de Calmette y Ouerin; la preocupación de los organismos oficiales por las exploraciones radiológicas seriadas en grupos escolares, universitarios, de empresa y en el medio rural por los médicos de sanidad de equipos móviles. La tuberculosis se localiza en los pulmones en dlfermúte gralio de. extensión: desde un simple ganglio inflamado, hasta una pulmonía tuberculosa que ocupa totalmente el espacio pulmonar. El tan famoso ganglio tuberculoso es simplemente un ganglio inflamado y lleno úe elementos sanguíneos en lucha con el bacilo de Koch. En otras infecciones se llama seca cuando ¡el ganglio patológico es visible y la herida que ha producido la infección también lo es. Cuantos sufrieron una infección primaria en su niñez o juventud y acuden luego al médico siempre se comportan con recato y prevención, y, al interrogarles sobre sus padecimientos anteriores, dicen con miedo y pudor que ellos padecieron una lesión jamás se entreven a decir tuberculosis) o un ganglio pero que están completamente curados. Sin embargo, los médicos tenían un concepto completamente distinto. Para ellos- -siguiendo los fundamentales principios d e Behring y Raemer- -la tuberculosis primariamente adquirida en niños era benigna, producía una alergia y una defensa conveniente. Este concepto ie ganglio patológico o adenopatía era la principal consecuencia de la primera infección tuberculosa; necesaria se creía, porque era como una vacunación que evitaba la tuberculosis en la edad adulta, supuesta más grave que de niño. DIFERENTES LOCALIZACIONES, PERO ÚNICA ENFERMEDAD Q EGUIR sistemáticamente las prescripciones de su méiico cuando el proceso febril no cedía o se conviva UERER explicar la tucon un tuberculoso, y realizar berculosis pulmonar es la serie de análisis y radiograintentar hacerlo de wn fías que vaya mandando para proceso generalizado a todo el poder encontrar la causa. cuerpo, debido o la alergia y T amblen cuando un niño, a la luOha del germen y el orcompletamente sano y alegre ganismo. Pero se configura en antes, de pronto deje de entan diversas looalizaciones y gordar o pierda peso, se ponga formas clínicas que es uno de triste o celoso, o tenga dololos procesos más multiformes. res de crecimiento Por regla general se achaca a tener otro hermanito y estar celoso, no queriendo comer, suponiéndole mimos y tantas cosas con que se encubre, a veces, una tuberculosis benigna sin síntomas. También ns sospechoso de infección tuberculosa una tos rebelde, que se supone tos ferina o una infección que se supone intestinal etc. Hay que pensar que las vías más usuales de penetración eran la respiratoria y la digestiva. Esta última, desde que se esteriliza o pasteurim la leche, ha perdido su importancia. La Infección respiratoria se ocasiona por las gotitas de saliva expulsadas al hablar o toser, quedando suspendidas en el aire. O al caer en el suelo y secarse, retornan a la atmósfera como polvo levantado por el viento y después inhalado por la respiración. Otras vías de penetración, par la conjuntiva de los ojos, piel, mucosas, besos, etc. se pueden despreciar como insignificantes. La campaña nacional de. vacunación con bacilo tuberculoso de animales, como el bacilo descubierto por los franceses Calmette y Guerln (B. C. O. se ha demostrado de gran eficacia. Entre las numerosas medicinas descubiertas, siguen siendo las mejores las hidrad I- A- das y estreptomicinas, particularidad que hay que defender. Y por eso no se deben utilizar más que contra esta enfermedad. La manía de autotratarse sin control médico está disPuede no dar ningún síntoma, evolución del proceso hasta minuyendo el poder de estas que se prá uzcwn los síntomas dos drogas maravillosas y prosólo descubierta por las camtípicos de la tuberculosis. Mopañas sanitarias de radioscoduciendo posteriores resistendernamente se ha superado e? pias seriadas o de reacciones cias en los tratamientos. El antiguo concepto de lo necesapúblico usa, por su cuenta y de la tuberculina. Puede provorio de la infección primaria en riesgo, las hldracldas para encar la tos típica de una tos los niños y de la peligrosidad gordar, y la estreptomicina ferina o de un sarampión. Dar de la misma en los adultos. sola o mezclada con otros anradiografías semejantes a una Hoy se tiende a considerar betibióticos, sin receta médica, bronqulstls banal, un quiste hinigna igualmente en niños que para cualquier otro proceso datidico de pulmón, un cáncer en adultos. No asi las reinfecbenigno. Luego, si desgraciadabronquial, etc. Hemorragias mente necesitaran estos trataciones qse evolucionan a bropor boca como varices de esómientos, se encontrarían que tes, que se debe vigilar su curfago, enfermedades de corazón no actuarían en ellos con toda so, aun después de curados, o hígado, o bien úlcera de essu real potencia. por un cierto tiempo. tómago. Fiebres sin eauísos aparentes como en la fiebre reumática, o tifoideas, malta, hipertiroidismo, etc. Tan diversos síntomas son debidos a las múltiples formas de la tuberculosis y a su rebeldía cuando se ha pasado de la etapa de infección primaria y se tienen reinfecciones a brotes. Por eso no dejaremos de decir, como en todo proceso febril de larga duración, en la confianza que se debe tener en su médico, que vaya viendo la MEDIDAS CONVENIENTES S