ABC MADRID 21-02-1969 página 69

ABC. V I E R N E S 21 DE F E B R E R O DE 1969. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 69. f WWRMACIONES TEATRALES Y CINEMATOGRÁFICAS LAS 500 DE ¿QUIEN SOY YO? SUBASTA DE UNA PARTITURA DE GRANADOS Granados, será subastada públicamente el próximo día 22, en el curso de una ctna de gala a celebrar en el hostal Condes de Vrgel, y cuyos beneficios se dedicarán íntegramente a los subnormales leridanos. Esta partitura, de puño y letra del genial compositor del romántico español, está dedicada a su compañero y amigo Ricardo Vives. También será subastada una carta de amor que Granadoj dedicó a su novia, y después esposa, doña Amparo Gal. Asimismo se subastarán unas 30 obras de arte cedidas por artistas leridanos. Ya se han recibido ofertas desde distintas capitales españolas, tanto por la importancia del objeto puesto a subasta como por la magnífica obra social a la que se dedican los fondos. El mismo día, Lérida será escenario de la Asamblea de la Federación Nacional de Asociaciones de Subnormales, a la que asistirán representantes de 30 provincias, y en la que se tratarán importantes asuntos relativos a los subnormales, censo estimado en España en unas 300.000 personas. -Pyresa. tores se reúnen para festejar, con una finalidad benéfica bien lograda, el éxito de un compañero que ve su obra, ave- fénix, colear alegre y victoriosa después de quinientas representaciones. Algo mejor irían las cosas- -y no me refiero a nadie, a nadie, señoras; a nadie, señores, a nadie, palabra- -si este jugar y trastocarse los papeles fuera más habitual y pudiera verse a un actor notable como Antonio Cintado hacer, por su capricho, de partiquino, y a unas actrices encantadoras como Milagros Pérez de León y las señoritas Segarra, BaHester y Calatayud dar pie- -en el sentido más decente de la frase- -a ocasionales actores hasta sacarles de todos los atolladeros de su bien disimulada impericia. La prueba es lo mucho que se divirtieron las gentes que llenaban el teatro, lo mucho que rieron, apreciando matices Inéditos que de la ocasional representación surgían, y lo largamente que aplaudieron a todos, y muy en especial a Juan Ignacio Luca de Tena, para quien un escenario es un lugar mucho más n a t u r a l que su despacho de Prensa Española. Sólo una sensación de injusticia enturbia mi placer y me hace lamentar no haber podido ponerme en contacto con el entusiasta cuerpo de reventadores de que disfruta el Teatro de Cámara y Ensayo: no haberlo instalado en las alturas para que desde allí fulminara a mi empecinado parodiador. Salvo eso, todo lo demás constituyó Una fiesta de teatro de las que se conocen pocas en Saldaría. -El general BARCLANO. RECITAL DE CANCIONES EL DOMINGO, EN LARA Alforjas para la Poesía y Conrado Blanco presentarán a Bola de Nieve, en su segundo recital de canciones hispanoamericanas y afrocubanas, el próximo domingo, día 23, después de misa de doce, en el teatro de Lara. Las localidades para asistir á este recital pueden retirarse gratuitamente, como de costumbre, en las taquillas del teatro de Lara. LAS GUITARRAS DE MANITAS DE PLATA DAÑADAS EN UN INCENDIO París 20. Las guitarras del célebre guitarrista Manitas de Plata han sufrido daños importantes, debido al calor y al agua, Quedando prácticamente inutilizables, Lérida 20. Una partitura, original del compositor leridano Enrique Alfredo Marqueríe, Arturo Fernández, Joaquín Calvo Sotelq, Milagros Pérez de León, Juan Ignacio Luca de Tena, Lorenzo López Sancho, Basilio Gassent y Alfonso Paso Únicamente la consideración a los deberes de mi riguroso incógnito y a la espinosa situación actual de Saldaría (cualquier parecido que se le busque s e r á ficticio, Como muy bien asegura Juan Ignacio Luca de Tena, buen conocedor de mi país) me impidió anoche levantarme de mi oscura butaca en el Infanta Isabel para clamar contra la impostura. El fementido actórcete ocasional que trataba de representarme no tenia ni la más remota idea de lo que es un general verdadero, ni mucho menos de lo que yo, el propio general Barclano, haría y aguantaría aunque se tratara de aguantar a un actor eminente como lo es Arturo Fernández. Debo, sin embargo, admitir que, salvo esa vituperable imitación o parodia del trabajo de actor a que me refiero, todo lo demás estuvo muy bien y logró el más riguroso parecido con los nunca reales acontecimientos de mi patria de los que fue, en no pequeña parte, protagonista. Basilio Gassent se parecía al auténtico Micano, gordito y apacible, más todavía, mucho más, que el irreprochable Sergio Mendizábal que lo representa a diario, y más pinta de galopín, de correveidile, de oportunista lograba haciendo el Foncar Alfonso Paso, casi tan buen cómico como autor, de lo que es habitual en nuestros escenarios. Haré punto y aparte para confesar que estuve largo rato cavilando por qué extraños encantamientos a q u e l naturalísimo ujier se me parecía extraordinariamente a Alfredo Marqueríe y cómo era posible, con qué filtros mágicos podía lograrse que un procer, un periodista, un embajador, y sobre todo un dramaturgo como Luca de Tena pudiera desdoblarse en un primer actor capaz de darle la réplica de igual a igual, con prestancia y señorío, a Arturo Fernández, que, por lo que pude apreciar al correr del medio millar de representaciones de ¿Quién soy yo? se ha convertido en coautor de la pieza, transformando la morcilla en magro puro, ya que ha logrado hacer colaborar en la picadura al propio escritor que narra nuestra saldariense peripecia. Tengo para mí que, a despecho de las apariencias, en este país, que visitó por primera vez, los autores y los críticos se llevan a matar. ¿Cómo explicar si no las insidias que en su ingeniosísimo prólogo vertió don Joaquín Calvo Sotelo enunciando sus vehementes sospechas de que jamás lograrían los críticos- actores pingües contratos por las empresas teatrales de la capital? Si no se me molestaran, diría que, con la excepción de mi contrafigura, todos los críticos me dieron motivos para pensar que han equivocado la carrera 7 que lo harían mejor sobre las tablas que en sus pupitres, y que los autores- actores ganarían mucho más si, a la manera de Moliere o de Shakespeare, llevaran al palco escénico sus propias imaginaciones. En Saldaría la convivencia no es fácil y son infrecuentes por eso las travesuras literarias como ésta en que escritores y ac-