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ABC MADRID 07-02-1969 página 93
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ABC MADRID 07-02-1969 página 93

  • EdiciónABC, MADRID
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ft. vertir al hombre en ana especie de máquina. ¿En qué hemos ganado? -Pues en algunas cosas aunque en otras no. Es como si el alejamiento de la Naturaleza en vez de darnos la libertad nos oprimiera. Parece que los cálculos del hombre han fallado. ¿Cuál es la mayor amenaza que pesa sobre el nombre, hoy? -La injusticia. No el hambre ni la destrucción aunque sigan existiendo a pesar del progreso. Corrigiendo la injusticia, la economía vuelve por sus fueros y entonces se acabarían las hambres y las guerras. -Pero ¿somos más solidarios? -La solidaridad no se da todavía. Es un problema de conciencia o, mejor, de toma de conciencia. ¿Qué puede más en ti, la sensibilidad o la razón? -Pretendo ftue la razón domine sobre la sensibilidad, aunque sin matarla. Tiene los ojos azules e inocentes. Practica una gran economía expresiva en gestos y palabras. Da impresión de quieto y recogido. En el estudio se reúne una obra ingente. Desde los símbolos mágicos que despertaron las cerámicas primitivas y alentó Miró a las arpilleras y símbolos y a las arpilleras puras, con. su color natural, sus costuras, su pureza y sus texturas. Luego vino el engordamiento de las figuras, sus protuberancias, su ofensiva. ¿Pintura, escultura? Estamos en una nueva frontera y hemos pasado el rio de las clasificaciones. Juegan mucho papel sus recuerdos de infancia en este hombre por cuyos antepasados corre sangre irlandesa, aunque sea un mediterráneo introvertido. ¿Lees mucho? -Sí. Tengo siempre entre manos varios libros. Cojo el que hay sobre la mesa. La indagación de Peter Weis, oratorio en once cantos. Abro por la señal que el propio artista ha puesto en el libro. El testigo número 3 describe el muro, a preguntas del juez. Era el muro de los fusilamientos. Y dice: La madera estaba re- vestida de arpilleras alquitranadas Con materiales deleznables y hasta abyectos, comidos de podredumbre y lástima, Millares ha levantado su obra. Son los mismos que la literatura y la poesía nos ha descubierto como el pecho quejumbroso del hombre de nuestro tiempo, su habitación y su condena. Cuando Millares dice que las sales de plomo son venenosas no miente. Está expresando sus propiedades. El artista debelescribir también mucho, aunque se lo tiarde en secreto. I- ¿Te interesa la arqueología? -Muchísimo; lo que más. Y tal vez por la parte investigadora que tiene. De haber elegido otro camino habría sido arqueólogo. No por la belleza de los objetos sino porque esos objetos sirvieron a otros hombres hace miles de años y me emociona recoger los vestigios de los hombres de etras épocas. También le gusta el mar. Y ¿por qué no? Becquer y Chapín, y ver un partido de fútbol. Tiene su corazón atento a lo que pasa. Es posible que, desde sus negros aspire a ver los blancos inundarlo todo, hasta llenar el cuadro. Queda camino. Mientras, Manolo Millares sigue su ofensiva. Y desde un rincón, invisible, como un abuelo complacido, yo diría que Qoya le hace un guiño. Es como si le dijera, ¡adelante, muchacho; no hagas caso, adelante! Salvador JIMÉNEZ

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