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ABC MADRID 05-02-1969 página 104
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ABC MADRID 05-02-1969 página 104

  • EdiciónABC, MADRID
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APARISI MOCHOLI: EL AYUNTAMIENTO TIENE A GALA POSEER Y SER TITULAR DEL TEATRO ESPAJOL Labor educativa del Teatro Municipal Infantil 30.000 niños disfrutan cada año de sus representaciones EL PRÓXIMO AÑO LAS REPRESENTACIONES PODRAN CELEBRARSE EN EL PARQUE DE ATRACCIONES CIFRA TOTAL PARA ATENCIONES TEATRALES: SEIS MILLONES DE PESETAS El Lope de este año (concurrieron 53 obras) será fallado la víspera de San Isidro OR naturaleza reclama el teatro el agora, la plaza pública. El carro de Tespis hace allí su parada, que no final de ruta, para instalar el milagro de la representación: no ficción improvisada, sino lección aprendida, y sabia que proviene del pueblo y al pueblo revierte. Una vez transmitido el mensaje vuelven a abrirse leguas de camino ante el anhelo de esos comediantes que un día encontró el hidalgo manehego, provistos de disfraces y carátulas, en una de las encrucijadas As su frustrada aventura. Nada quita al t e a t r o su honda raíz popular. Persiste incluso en la más empingorotada gala y se expande a todo su alrededor. Porque nada cerno la palabra, ya sea la del charlatán, la. del cómico de bu lu lu o la del ingenio clásico en el desgranar del asonantado romance, tiene la virtud de congregar más de improviso a un corro entretenido y expectante. A más de eso, le cabe al teatro la ventaja de ser más directa ve 1 hículo de cultura. Ideas y conceptos elevados, noticias de países y tiempos recientes o P antiguos, especulaciones filosóficas y los misterios de la teología se corporizan en la acción y la voz para, penetrar en los más variados auditorios, dejando en cada espíritu una distinta, pero siempre fecunda huella. No extraña, pues, que un Municipio, y más si es de la importancia del de Madrid, dedique al teatro, entre tanto problema de gran ciudad como le acicata y punga, atención cuidadosa y preferente. No todo ha de ser preocuparse por la circulación en la Villa de las Siete Estrellas, l a capital donde vio la luz el Fénix de los Ingenios españoles y de la que nativos fueron Tirso y Calderón, completadores de la clásica trilogía, para mundializar en lo contemporáneo su prestigio dramático con Jacinto Bena vente- -otro hijo de Madrid- no puede vivir ajenada al teatro. Siempre lo tomaren como cosa suya sus alcaldss mayores y jamás una iniciativa encaminada a su brillo y fuero encontró obstáculo e n t r e los munícipes. Abundantes ejemplos podrían ser traídos a colación. No es el menor que Madrid tenga, de propiedad municipal, el primer coliseo dramático del país. Ese teatro Español cuya lámpara central inspiró una de las p á g i n a s galdoiiianas más bellas en lo descriptivo, con su mecanismo de elevación y bajada. En su dorado saloncillo los óvalos al óleo han perpetuado, entre los rostros de tanto autor y comediante famoso, los ojos profundos y el peinado en bandos de la Avellaneda junto al trapío humano de doña Teodora L- amadrid. La preocupación del Ayuntamiento para que el madrileño no carezca de asta írracia y regalo del teatro a nivel da gran escenario y de pública plaza es evidente. Hitos inolvidables la señalan. T a l e s aquella representación de la Carmen de Bizet, en la plaza Mayor recién salida de una de sus restauraciones, o los títeres y funciones de guiñol, alzados pora embobamiento y distracción infantil en nuestros jardines, junto con las compañías d r a m á t i c a s que trasladan desde el centro a la periferia lo mismo el auto sacramental que la evocación valleinclanesca, el saínete de Arruches o la comicidad directa de don Pedro Muñoz Seca. Hoy por hoy, el Ayuntamiento de Madrid, silenciosa y eficazmente, desarrolla su labor teatral y popular. Don Carlos Arias Navarro, su alcalde, inspira estos conatos con fervor de hombre amante del teatro y conocedor da la eficacia educadora que éste tiene. Realizador de la tarea, en una medida de esfuerzo personalísimo, propiciador de ideas y campañas de éxito palpable, es don Antonio Aparisi Mocholi, valenciano entrañado con Madrid, quien después de una larga tarea social como vicesecretario de Obras Sindicales y jefe da la Obra Sindical de Formación Profesional, desempeña desde hace tres añes la Delegación de Servicios da E n s e ñ a n z a y Cultura de nuestro Ayuntamiento. Aparísi canaliza esta hermosa vertiente del teatro por y para el pueblo de Madrid. De esa actividad, de esa política teatral en el más alto sentido de la- expresión, quiero que me hable. Obvio es decir que no encontré la menor dificultad para la entrevista.

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