ABC MADRID 05-10-1965 página 73

ABC. MARTES 5 DE O C T U B R E DE 1985. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 73 LA V JORNAÜA DE LIGA EN PRI. MERA DIVISIÓN VALENCIA, PONTEVEDRA Y. ATLÉHCO DE MADRID GAiAH EN CAMPO AJEHO VICTORIA CORTA DEL REAL FRENTE AL CÓRDOBA, CON REAPARICIÓN DE AMANCIO Y FÉLIX RUIZ El juego duro de los visitantes y la lesión de Serena en el primer tiempo influyeron en el escaso rendimiento de los equipos Alineaciones. -CÓRDOBA: Reina; Simonet, Martí, López; Ravelo, Costa; Jara, luanín, Riera, Martínez y Cabrera. REAL MADRID: Betancort; Miera, Santamaría, Sanchís; Félix Ruiz, Zoco; Serena, Pirri, Amaneio, Puskas y Gento. Entrada. -Casi llenos totalmente los tres pisos de la lateral y los dos de la preferencia así como el bajo, las tribunas y el primer anfiteatro de los fondos. Mucho público, pues. Puede calcularse en setenta y cinco mil el número de espectadores. Terreno de juego. -Tapiz de hierba en perfectas condiciones. Temperatura y otros factores. -24 grados, sol fuerte, cielo azul, sin viento. Una tarde ideal de otoño. Arbitraje. A cargo del Sr. Rigo, temperamental, gesticulante, que castigó mucho de lo que se produjo y, sin embargo, no tuvo bastante con su código para restablecer el orden, pues el partido estuvo siempre delante de él independiente y ajeno a la sanción arbitral, señal de que los jugadores no sintieron su autoridad. El partido fue duro y de difícil enjuiciamiento arbitral, aunque limitada esta dificultad a las faltas, pues ni en offsides ni en goles dudosos hubo problema alguno. Goles- -A los ocho minutos, Amaneio marca el primero del Madrid, tras recibir un pase de Puskas. A los veintitrés minutos del segundo tiempo, Jara lanza un tiro cruzado por alto, que es el empate para el Córdoba. Y tres minutos después, golpe franco contra el Córdoba, que tira Puskas, cruzado y raso, y es el gol de la victoria del Madrid. Zaragoza, Español y Las Palmas sacaron un panto de sus visitas RESULTADOS Elche, 1; La; Palmas, 1. Málaga, 0; Español, 0. Barcelona, 1; Valencia, 2. Madrid, 2; Córdoba, 1. At. de Bilbao, 0; At. de Materid, 2. Mallorca, 0; Pontevedra, 3. Sabadell, 4; Betis, 1. Sevilla, 1; Zaragoza, 1. CLASIFICACIÓN J. G. E. P. F. C. P. At. de Madrid... 5320938 R. Madrid 5401658 Pontevedra... 5311817 Valencia 5311737 Barcelona 5 3 0 2 11 7 6 Las Palmas 5221676 Zaragoza 5 1 3 1 11 7 5 Córdoba 5212555 Elche 5 2 1 2 7 10 5 Español 5 13 1 3 5 5 At. de Bilbao 5203714 Sabadell 5203664 Mallorca 5203794 Sevilla 504 1 344 Málaga 5023152 Betis 5 0 0 5 5 18 0 Be ocho partidos, tres empates, tres vic- torios de visitantes y solamente dos éxitos locales, a cargo éstos del Madrid y del Sabadell. Los éxitos verdaderos corresponden, en verdad, a los que han ganado en campo ajeno: al Pontevedra, que es la revelación de la temporada 65- 68, y al Valencia, que ha confirmado su buen juego frente al Madrid el pasado domingo en Mestalla y al vencer ahora al Barcelona en su propio estadio, ese estadio sin nombre, porque llamarlo del Barcelona siendo del Barcelona parecía innecesario y es algo así como la esposa pie toma el apellido de su marido pero pierde el propio. Bien; pues este Barcelona, del que se esperaba la reforma para situarse en las alturas de la Liga actual, ha tropezado ante un Valencia al que es forzoso tomar en serio. También ha ganado en campo ajeno el Atlético de Madrid, pero esto ya era más fácilmente previsible por la diferencia de calidad que existe a su favor comparándole con el Bilbao, sobre todo con un Bilbao en trance comprometido por la abundancia de jugadores lesionados. No obstante, responder a esa confianza es siempre meritorio y así hay que elogiar la actuación del Atlético, por su triunfo en un escenario histórico como San Mames y conservar así el primer puesto de la clasificación. Los tres empates corresponden a tres líneas de igualdad teórica entre los equipos contendientes, pues Elche y Las Palmas tienen fuerzas similares, y si el Zaragoza es trujar que el Sevilla, y el Español es superior al Málaga, la conquista de ese punto es pura consecuencia y en vez da considerarlo como éxito de los visitantes hay que enfocarlo como conquista e los visitados. La impresión que queda es tan favorable a la situación real que hoy tienen Atlético de Madrid, Valencia y Pontevedra, como dudosa en cuanto al posible sostenimiento del Madrid y del Barcelona en las alturas. La proximidad de un Atlético de Madrid- Real Madrid ayudará a esclarecer conceptos sobre la clase y forma de los equipas. Por la parte baja, la derrota amplia del Betis le hunde un poco más en la cola, y en ese desconsuelo le acompaña el Málaga con otro empate sin goles en La Rosaleda. Está claro que para ese Málaga hacer un gol es un problema. nía extremo, por lesión. Había, sí, un me- dio dé ataw y otro para el revoltijo, para esa misión inconcreta de trabajar en medio campo y ayudar, que yo con- RESULTADO DEL PRIMER TIEMPO: REAL MADRID, 1 CÓRDOBA, 0 RESULTADO FINAL: REAL MADRID, 2; CÓRDOBA, 1 El Madrid como Club podía haber sacado a la reaparición de Amaneio y Félix Ruiz algún fruto económico mayor si se hubiera anunciado ya él viernes o, al menos, el sábado la alineación de estos dos jugadores que durante tanto tiempo han estado ausentes del terreno de juego en partidos oficiales a causa de sus lesiones graves, pero como es una moda incomprensible que los entrenadores manifiesten sus dudas en las vísperas y digan siempre que tienen que esperar hasta última hora para decidir, el partido se queda a veces sin, la propaganda o publicidad que necesita. Los clubs, que son los que se llevan el dinero recaudado en las taquilluas, deberían ser los interesados en comunicar al público a través de la Prensa todo lo que el partido tuviera de noticia llamativa, pero está comprobado que les da igual el relleno del cartel. Juega el Madrid y basta. Al margen de la curiosidad especial que podía ofrecer este partido con la rentrée de Amaneio Amaro después de tantos meses de ausencia y, sobre todo, después de tantas habladurías sobre el estado de su pierna operada, era lógico suponer que el as gallego careciera todavía de aquella velocidad y facilidad de filtración que caracterizaban su acción eficaz en el juego de ataque. Al jugador que lia sufrido una lesión y una operación, le llega, al fin, el día en que el médico le da de alta. Está clínicamente curado. Después, empieza a entrenarse y le llega también el día feliz en que el entrenador le da esa segunda alta, es decir, le incorpora al cuadro de jugadores útiles y disponibles. Y le queda a ese jugador el tercer ciclo: el de coger la forma y coger él sitio porgue al jugador de fútbol le pasa un poco lo que al torero, que necesita plat cearse necesita corridas para volver a, co; ger el í sitio a saber estar. La reaparición sirve, además- -y casi en principio, puesto 1 que principio es de rana nueva etapa- para recordar y lo mejor para que un juga- dor recuerde lo que fue y lo que hizo es ponerle en el sitio que tuvo antes, porque de lo contrario extrañará no solamente el campo y el partido en lo psicológico y físico, sino también la función en lo técnico de la misma. Por eso me pareció un error la reaparición de Amaneio de centro delantero. Ya sé que en el fútbol de hoy importa poco el número que lleve el jugador de vanguardia si se le ordena una misión en ella, pero en el caso de Amaneio hay que matizar más, puesto que su obra ha oscilado entre los dos puestos del ala derecha- -extremo o interior- pero no en el centro del ataque, ni aún en los casos, tan n o r m a l e s hoy, de dos delanteros Centros como son el ariete y el interior adelantado, o los dos interiores, según las características de los jugadores alineados. Reaparecía también Félix Ruiz. Pero Félix Ruiz tuvo lesiones altas es decir, de clavícula, que para un futbolista son menos graves. Era natural que se moviera con más confianza y fuerza. Trabajó como en él es normal y cumplió con más aciertos, quizá, que la mayoría de sus compañeros. Félix Ruiz hizo en sus buenos tiempos la labor de interior retrasado, que hoy se encarga a este muchacho de tan buena voluntad como es Martínez, llamado Pirri Como fuerzas iguales se destruyen, aunque estén en el mismo equipo, no me parecen compatibles. Lo mismo da un interior en función de medio que un medio en función de interior. Lo difícil y lo necesario- -es delimitar funcio- nes. Y como no se diferenciaron, resultó que Félix Ruiz anuló a Pirri como nadie ha anulado al trabajador interior blanco. Ocurrió esto desde el primer minuto y sucedió ya a la mitad del primer tiempo- que el extremo Serena se lesionó, al sufrir un desbarre muscular. El Madrid, entonces, se quedó sin extremo y sin interior derecha, pues a pesar de tener allí dos interiores en potencia y uno en esencia, no tenía ninguno para el ala derecha; ni te-