ABC MADRID 14-10-1962 página 8

0 att íiW d U Frontíps, un pU 4 M d i n t r o Ot un oHiDto. (r o t o MoMlkn. jRinbre pegaílo a In roca viva rSuzanne Chanta! Ucltó, AJarcún a horcaJadfl! sobre doa montes j el Jucar de por medio. y loa pueljlüs escalonados, en graderlo. verticales (M. V. Lüqut) de TerueL Alharracin, telón a bocajano; ValderrobreB. atro os- Iclnado. De EUstaros, a d e m atos pueblofi en pLe. g u l d l u por fa TOT, Ifl pista hasta CaatUíabíb. en VaIfncia, Retornemos, ahora, a nuestro camino y ornead la Alcarria del brazo de Canilla ¿osé de CeU, Torlja, Brtbue a. envuelta n- un color gris aculado, como de íiumo de ciaaiTO puro Viana de Mondéjar, de oro viejo: Zorita de k a Canes echada a la Kimüra del castillo, y el rollaKTo de h. blasonado, S üenza. las calleí c n i u d a s pof arcos, Y Pajtraiia, Y AlmonacidPueblOB colmeneroí de oLmas centenarias. Maqucda. Ontiíola. en Toledo- -las cueVaa. otra vn- y a e n La M acha, La Guardia 7 Tomolloso, viviendas eubterrineiB con cuadras y 1 ode a 3, El mismo a a n t u a d o de La Guardia es UJUL cueva enorme. Pueblos anohos, espaciados, polvoriínios de casas blancas, azules. Mrralea la espalda Tpjadllloa eequlna 9 calles torreclUas, aolanaí -aintentlzn Arorln mientras los caminos se esfuman a lo lejos en culebreos larcas L a vía do D o n Qulíotc, I is moUnM dt -el vi jO OJo Azul de Herencia. J u n t o a Vil l a n a ya anda zambulDtto e n la tierra el Guadiana, VUlanueva de los IníanteSn Viso del Marqués, la Torre de J u a n Abad, Andalucía tfnpieza a o l e r e n e l aire -escribía Tovar, ENTILADA POR LAS CHIMENEAS H da, iqué siluetas de pueblo con castillos en el campo andaluzf íCaro Baroja) Alcaudcte, Segura de la Sierra, y todos los hlsn y alcalá Izoalloi. Iznajar, Diezma, uara Davillier. era un nido de águilas quemado por 1 aol iMontelrjo- -ya veis, andamos por Granada- -la antigua iglesia, al borde del corte, scalolrla fll más pintado. Pero el paraíso para quienes amen los puebloi sorprendentes está en las Alpujarraa: allí se columpian en las montafifls niis altas de la Península sobre hamacas de deliciosos caatáñarej íOsrcla Gúmezi. Pueblos superpuestos- -Meclna Alhajar es el plío bajo de Nechlte- pueblos altísimos, como Murta a los que se llegaba Por encima de las chimeneas, y pueblO i tajoa, Albiftol, fl los que se entra subíando, comenta Alarcón; pueblos en los que ae entra en una casa por el tejado de la otra, y terrados tapizados de launa bajo la mtve, azoteas sin antepechos en las que bailan entra las chimeneas los vecinos de l s casas de arriba (Torres Zfito pasa en Tievélei, el pueblo m á s alto de E niaña- -a media legua del Mulhaoén- donde se oye a los querubines cnntar For tlClmo, encaramados, salvajemente en los riscos: Almegljar. Castalias. EITL Granuda rastreamos también los curioslíimoA poblados de cuevas. Las tenéis en Ouadijc- topera gitana iPemán) -en ta uilea de arcilla blandísima, endurecida luEíc, al aire, a tal punto de no poderla hincar una navaja. A ihese troglodytes lOcrald Brenan sMo se lea descubre por las chimeneas, rematadas, oluera, a lo mejor por media tinaja. Cuevas hasta de doa pisos y- -según Torres Balbts- -algunas Inscritas en el Registro de la Propiedad, y unA de lujo, La Magistral tasada en 35 000 peseta a comienzos de siglo. de Jo m á s singular que pueda Imafilnarae DavUller BuruUena. tm hormiguero gigante: Ben Iúa, alsuiw de tres pisos y tan sólo luera de ia tierra- -hace cuarenta a ñ o s l a l a l a la p o q y la casa del conde: Hl Raposo, Galera, etc. T r a s de estas colmenas humanas- domicilia cavernosa ia llamaba Braun y Hagenbere. 15 9- -nos matemos por Almerífl, ifl provincia más bajo tierra. Cuevas de Verft la fachada encalada en conglomerados rojos- Alpera, Por doquier un runruneo denso y sordo de multitud enterrada (jean Eermet) A la veí. otros pu (bl 05 ftlmerlenscs Impiesionanlís: Sorbas, un picacho cuajado de casas que asusta verlo desde la carretera íSlneaio Delgado) Cóbdar con sus puentes de marmol blanco: Cíiatelferró, y Mojáoar, un blanquísimo cafírlo vertical de cúbicas construcciones perfectas, en la actualidad, levantando sus 3.000 viviendas desaparecidas. TURISMO ESPECTACULAR Por Alora (Míilasal. posada c Hno un áffUllJ a Honda partida por un terrible navajazo de 200 metrcs. LOS viAJísros se espantan al asomarse al tajo. Ní ay tftn robusta cabeza que sin desvanecerse pued mliar abaxo- (Pedro de Medina, 15 S 9 no 5 s Pide mlmr sin estremecimiento (Laborde. iTlfli. De Eonda a Setenll. un puíblo metido en uns buena part eo las entrañas de la Es más. hay una calle con un lecho de roca, Estando encima de sus calles s? ignora su existencia (Orti 2 EchaffUe) En Cádií abundan también los pueblos sorprendentes: Olvela, la zaliareña Zahara, Arcos empemacado sobre una peüa cortada a pico en sus doa caras- the nwjst apcctacular of En efecto, CazotJa verde. Bacía Inmóvil en el XVI, ason rosa y miniada Übe- Ppro las cuevas prosiguen en CuUar de