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ABC MADRID 09-03-1958 página 79
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  • EdiciónABC, MADRID
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ABC. DOMINGO 9 DE M A l Z O ÍPE I95 S. EDICIÓN PE LA MAÑANA. PAG. 79 A ÍJ C en París FINAL DE LA GUERRA, ESPAÑA SUGIRIÓ LA FORMACIÓN DE UN PACTO El prefecto de ülastl slgnifíea la prolongación hacia el sur de la alianza allániica LA LIQUIDACIÓN DEL CONFLICTO ARGELINO ES CONDICIÓN PREVIA PARA LA REALIZACIÓN DE ESTE PL AN ¡Ni Marruecos ni Túnez se asociarán a n a sistema que perpetúe una Argelia francesa París 8. (Crónica de- nuestro correspon- Francia. Así, las reservas con que Túnez sal, recibida, por Telex París estudia y Marruecos han recibido la propuesta de a estas horas las reacciones del mundo Gailiard deban referirse únicamente al iras la declaración de Gaillarfi sobre irn desarrollo de la guerra argelina. Porque posible Fació Mediterráneo occidental. lia resultaría inconcebible, hablando en serio, aprobación de Roma, el interés de Londres que una comunidad mediterránea, sostey ías reservas de Rabat se examinan con nida militarmente por los Estados Uninatural curiosidad en las columnas de ía dos como elemento complementario del Prensa y en esos círculos que el slogan Pacto Atlántico, pueda rechazarse de plallama bien informaáos. Hesalta perfecta- no en las dos capitales mógrebinas. Quizá mente; natural que las reacciones provo- entonces muchas posturas qué hoy pacadas en las capitales interesadas por la recen sinceras surgiesen iluminadas por iniciativa de Gailiard tengan un gran in- una nueva, luz. terés en París. Si se piensa en hacer Desde luego, la liquidación fie la guepolítica común, parece natural empezar a preocuparse de los sentimientos comunes. En homenaje al fair- play hace falta aclarar que Le Monde recuerda en su primera plana, cómo la. primera iniciativa de un Pacto Mediterráneo partió de España hace, ya muchos años, al final de la ultima guerra mundial. Personalmente, nos parece excelente que si se piensa en unificar países destinados a vivir juntos se empiece ¿or ejercer una gentil puntualisiaá Ms $6 rica reconociendo la antigua y, por fortuna, atendida vocación española a la unificación de los intereses medite fráneos. rra argelina constituye la condición previa de; ia comunidad mediterránea, porque jamás Marruecos ni Túnez se asociarán a un sistema de alianzas que perpetúe esa Argelia francesa en la que insistía Gáilf lárd desde la t r i b u n a parlamentaria. Gailiard tendrá que suavizar en sus declaraciones posteriores esta afirmación de principio, y se habla de que la alta dipló macia prepata un calendario de reformas en Argelia consentidas por Francia para preparar su progresiva autonomía interna, mucho más fácil de conseguir si realmente el Pacto del Mediterráneo occidental engloba, en una comunidad estrecha a árabes y europeos. La- propuesta de Gailiard debe considerarse como otra manifestación dé la actividad diplomática febril que reina ahora mismo en el Mediterráneo tras el bombardeo de Sakiet, que sirvió algo así como de Hasta que CJalii rá ao amplíe, Como 5i a prometido, sus proyectos y se conozcan los detalles de 3 a vaga declaración en la Asamblea, debeáuts. conformarnos con síasgies conjettóras. Pero, la necesidad política fiel Pacto Mediterráneo parece tan evidente en Franela, que. los críticos calculan sisi- gran. esfuerzo y con tocio honor tipográfico en tos ediciones 1 de la- tarde las líneas ideales de fese Pacto Mediterráneo Itie figuraría en. el arsenal diplomático, occidental c mo naa inevitable prolongación hacia el Sur del Pacto Atlántico. Teó -ricamente, piensan en París q e parece difícil- oponer argumentos considerables a 5 a formación: del- proyectado Pacto. Poir desgracia, cnando se desciende de los reinos abstractos a la. dura realidad práctica ie la tierra, las cosas sé complican bas- La tófertá ie Gailiard áefte- enténaerse como isa életneAto incluido en el Plan. Atlántico- por resolver l a situación del norte dé África, o, en. iódo caso, como un gesto j e auxilia, la gestión de 1 buenos oficios realizada por Mr. Marphy, Incluso, se sabía que ciertas ideas muy semejantes a las proclamadas por Gaillacd habían sido sugeridas por Foster DuMés hace quince días en un mensaje conocido, hoy y dir frtdo. a. vSelwyn. Uoyd, -en el. vae- Foster THilles preconizaba la creación de una nmmanwéa. lt k fiel Mediterráneo occiden, compuesta. -por los incluidos en este rai. pT? t tendría el, concurso de ingla -fra y Fstaflos. Unidos. Esta ConunonT fütli carece fielmente reflejada en la oposición de Gaillard salvo en un pimío capital que- representa, sin duda, el inconveniente material más grave para la realización l del proyecto. Y nos referimos a Argelia. i Argelia constituye, sin duda, el centro de todas las crisis norteafricatias. Gailiard ha hablado de una Argelia francesa, que MO s I mismo eue u n a Argelia muda a r; n rsñiftnal de- los pueblos, y que, militeste. I mundo podrá beneficiarse I de las ventajas econórnicas d la Feria d l Cristal en io que ofrecerrifts TODO LO DE CRISTAÍ úa totalidad de los artículos elaborados en nuestras fá bricas de vidrie serán sacrificados para modernizar la instalación, de nuestras facitoríás.

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