Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 14-10-1956 página 70
ABC MADRID 14-10-1956 página 70
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 14-10-1956 página 70

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página70
Más información

Descripción

ABC. D O M I N G O 11 DE OCTUBRE DE 1956. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 72 Basta una ojeada a los enunciados del decreto del Ministerio de Trabajo publicado en el Boletín Oficial de ayer, que consagra dentro dé límites razonables la obligatoriedad del médico de emEL DOCTOR CLOVIS SALGADO, presa para comprender algo que es a la AROMA par profundo y evidente: Toda obra social propiamente dicha, aunque escueEl ministro de Educación y Cultura del tamente se defina a sí misma como, pura Brasil, doctor Clovis Salgado, y su espotarea de reglamentación del trabajo, es sa, acompañados de su séquito, salieron necesaria y ambiciosamente una, obra huayer tarde del aeropuerto de Barajas con manística y, en resumidas cuentas, u n a dirección a Roma. creación política anticipadora. SE ORGANIZAN LOS SERVICIOS Esto explica el que en tantos aspectos del quehacer social la acción del goberMÉDICOS DE EMPRESA najnte se adelante a lo que en lenguaje El Boletín Oficial del Estado publicó clásico de la controversia se h a n llamaayer, entre otras. las siguientes disposido reivindicaciones de la clase trabajaciones dora. Q u e j u n t o a problemas inmediaEducación Nacional. -Decreto por el tos de salarios, de jornada y de previsión que se extiende el campo de aplicación del laboral, se afronten las grandes cuestiones que tocan al productor como ser Seguró Escolar a los estudiantes de Escueh u m a n o q u e vive en el trabajo y en él las de Aparejadores, Ayudantes de Ingenieadolece, peligra, yerra y se consumé. ros Aeronáuticos, Ayudantes de Montes, Cuestiones q u e afectan, en suma, al máAyudantes de Obras Públicas, Ayudantes de ximo apetecible de sus posibilidades h u Telecomunicación, Colegio Politécnico de manas. La Laguna, Grado profesional de las EsEl médico de ¡empica- -7 no. sólo el titu- cuelas de Comercio, Topografía; Peritos lar, sino él facultativo p r e s e n t e en toAgrícolas, Industpiales y Textiles. da la escala del trabajo de la empresa- -Se introducen modificaciones en el plan ha sido, como el propio decreto reconode estudios de las Facultades de Derecho de ce en su preámbulo, u n a creación esponlas Universidades españolas. Suprimiendo tánea de la iniciativa privada, que el deslas asignaturas de Práctica de Lectura de arrollo industrial, los nuevos riesgos, las textos jurídicos, clásicos y Contabilidad, nuevas técnicas y el empleo de nuevas así como el curso de Sociología, que serán materias aconsejan implantar genéricatenidos en cuenta en las disposiciones que mente en la empresa en q u e a u n tiemregularán la nueva ordenación del Doctopo concurren la necesidad y la posibilirado en dichas Facultades, para su intedad de hacerlo: en la q u é rebasa el núgración en el mismo. m e r o d e quinientos trabajadores e m Trabajo. -Decreto por el que se organi- pleados, según se h a estimado en la disposición que comentamos, zan los servicios médicos de Empresa. En el Pero si, la iniciativa ha marcado el caplazo de sesenta días naturales, a partir de mino exacto a la necesaria, intervención la publicación de este decreto, todas las Emdel médico en el proceso de Ja tarea inpresas que ocupen más de 500 trabajadores dustrial, no podía, esto es indudable, queo empleados vienen obligadas a disponer de dar confiada indefinidamente al parecer un médico de trabajo. Si el número de ocasional d e la gran empresa u n a medida trabajadores supera los 1.000, pero no lleque, en definitiva, desborda el puro ingara a los 1.500, dispondrán de dos méterés económico- sirviéndolo de modo dicos, aumentándose este número en uno primordial y nobilísimo- -para entrar de más por cada 500 obreros o empleados que lleno en la zona común de la eficacia, de rebasaran la cifra de 1.500. El Ministerio la dignidad, de la sanidad y la garantía de Trabajo podrá acordar la extensión de que él trabajo ha de tener como categoesta obligación a las Empresas que cuenría para el bien de todos. ten con menor número de trabajadores. Basta, repetimos, repasar las funcioLas Empresas afectadas por este decreto, nes que el artículo sexto del decreto defique no dispongan actualmente de médico, ne cómo propias del médico de empresa designarán interinamente los facultativos para entender esto sin duda posible. L a que precisen. Estas designaciones se comuplanta industrial, el lugar de trabajo, tienicarán al Instituto Nacional de Medicina ne sus peculiares exigencias de higiene, y Seguridad del Trabajo. La interinidad no cuya determinación y vigilancia son, por constituirá mérito alguno para la provisión esencia, de la competencia del facultatidefinitiva de los cargos, que se producirá cuando los facultativos posean el certificado oficial de aptitud, emitido al finalizar los CASA PAS SAPERA FUERTES cursos que organizará el citado Instituto. A dichos cursos sólo podrán asistir los médicos con estudios de Licenciatura, terminados en los cinco años anteriores. El cargo de médico de Empresa será incompatible con cualquier otro remunerado del Estado, Provincia, Municipio o entidades, paraestaExhibirá eif? bápe e sus modelos de Otoñotales o privadas. Estos facultativos tendrán, í g í i e f i i o í r c o c k t a i l entre otras, las funciones: higiene de la inGENOVA, l í TELEF. 34 13 70 dustria, higiene de los trabajadores, accidentes de trabajo y enfermedades profesionales y aumento del rendimiento individual. Formarán parte de los Jurados de Empresa. Bonificados. Vestíbulo, siete habitaciones y dos baños. Cocinas de gas y eléctrica; Administración Central. -Circular de la antecocina con despensa y frigorífico; Dirección General de Agricultura por la cuarto de plancha y aseo de servicio. Agua que se dictan normas que han de regir el caliente central y dos ascensores. Veinte comercio de la patata de siembra en la cam- metros de fachada con grandes balcones. Paseo de La Habana, 46. paña 1956- 57. de Correos y del Banco de Crédito Local de España, alcalde de este Real Sitio y señora de Almela y el administrador del Patrimonio y señora de Ortega. A las cinco y media de la tarde el señor Loreto Arisme ndi salió con dirección a Cuelgamuros, donde visitó el Valle de los Caídos. LOS MÉDICOS DE EMPRESA Alia Costura vo. Y ello no sólo como impesativo de primer establecimiento, sino de forma t a n constante y sucesiva como el flu; o mismo de la producción. A u n en la serie más m o n ó t o n a en apariencia h a y p r o blemas de adecuación humana y acontecimientos técnicos que afectan a la salud del trabajador. Pero, además de la imperiosa necesidad profiláctica en lugares cerrados, donde u n a población activa permanece durante la jornada en inmediato contacto, son muchas las tareas que, de forma inevitable, tienen peligrosidad tóxica, factores de desgaste, riesgos para la. integridad y el equilibrio del trabajador, q u é es rigurosamente necesario vigilar de cerca. E l médico que está presente que explora y reconoce según u n plan m e tódico, es h o y u n a necesidad inexcusable de la gran empresa. Y a ú n h a y otro aspecto con que el decreto cierra el cuadro de misiones p r o pias del médico del trabajo: el del estudio individualizado de cada productor para su tarea exacta. Este es u n tema actualísimo y vital de España, porque nuestra preocupación por la marca media de la. productividad tiene su origen en la certidumbre del mal que el empirismo, la improvisación, la ocasionalidad del empleo, di desajuste entre la personalidad auténtica del trabajador y el carácter del trabajo que desempeña, están ocasionando al bienestar del trabajador mismo y a la renta del país. Queda ya ese sagrado inttrés del t r a bajo a cubierto de la cicatería o d e lá imprevisión del gran empresario. P e r o además, se da a la salud del productor- -no sólo a su salud laboral sino a su equilibrio h u m a n o total- -una categoría en cierto modo exenta de la desidia, de la abusiva confianza o de la incultura propia. Bajo la mirada constante del médico de empresa sé crea el hábito d e prevenir la enfermedad, de conocer s u s riesgos, de evitar, finalmente, ese m a l tardío q u e h a de llevarle sin remedio al ambulatorio o a la residencia del Seguro si n o a la tumba. H a escrito Marañón que la personalidad es una etiología más. Imagínese el avance verdaderamente sensacional q u e a las garantías de acierto en el diagnósv tico le va a proporcionar el conocimiento asiduo y estrechísimo de cada t r a bajador por el médico que en su empresa le observa. Esto sólo justificaría u n a medida de verdadera trascendencia cerro la que supone ese decreto del Ministerio de Trabajo. L a Medicina española, la Sanidad nacional, el noble quehacer de las luchas sanitarias, el índica general de vitalidad del país, v a n a salir ganando con ello. H e ahí u n a medida social que asume las dimensiones y sentido de toda u n a política de la salud del pueblo español. Siendo importante, a nuestro juiciOj la repercusión q u e en la clase médica ha dé tener el decreto como posibilidad jus- ta de adecuado empleo en u n momento en que mundial menté volucionan las condiciones profesionales del médico, lo que alcanza significación m á s alta es ese reconocimiento del valor técnico que en el complejo industrial tiene ganado, por derecho propio, el facultativo. E n resum e n la categoría que, j u n t o al empresario y al ingeniero, tiene el hombre llamado a regir y a vigilar la higiene, la salubridad, la adecuación exacta, la seguridad del hombre que traba a. E s o en fin de cuentas, es dar al productor el máximo valor que como criatura de Dios se merece. L o demás, el rendimiento económico, entre otras cosas, viene por añadidura.

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.