Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 09-11-1946 página 9
ABC MADRID 09-11-1946 página 9
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 09-11-1946 página 9

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página9
Más información

Descripción

Presencia de España en América AR la celebración del cuarto centenario de la fundación de El Salvador, el. Gobierno de la República Centroamericana del mismo nombre, deseando dar fe, una vez más, hde su acendrado amor a la Madre Patria- creadora de mundos- y recordando también que fue El Salvador uno de los primeros países qup reconocieron a la España de Franco, requirió la presencia de nuestro país en las solemnes ceremonias que han de celebrarse m conmemoración del día aquél- -127 de ¡septiembre de 1546- -en que. el Emperador Carlosi V expidió la Real Cédula, dando a la villa el rango de ciudad y confiriéndola, por- sus virtudes. rí honroso título de Led Ciudad de El Salvador. Y la España de hoy, tan espiritualmente ligada a los países de habla española como la España de ayer, ha respondido al requerimiento nombrando una Misión que lleva a las tierras salvadoreñas ¡oh, maraes de Acajutla y Cuscatlán! además, del fraternal abrazo de la Madre Patria, UBI significativo y valioso presente: 1 retrato de don Pedro dé Alvarado. w. a P Prácticamente el día 1 de abril de 1528 fundó la villa de San Salvador don Pedro de Don Antonio Alvarez Vidaurre, ministro de El Salvador en Madrid. Alvarado, en conmeimoración de la victoria obtenida sobre los indios cuscatlecoa. Allí se formó desipués el Gobierno de San Salvador, bajo la presidencia de Diego dr; Alvarado, como justicia mayor y teniente ée capitám general, subordinado a la Capitanía general de Guatemala; San Salvador, Santiago de los Caballeros de Guatemala, San Miguel, San Pi) dro Suia y Gracias- a- Dios fueron ías cinco ftattida ciones de don Pedro de Alvarado, conquistadais con su esfuerzo, su heroísmo y su fe; son las cinco rosas que proclaman, la obra imperecedera de uno de tos más rtsforzados y preclaros hijos de la España mmorital. Ante este retrato de don Pedro de Alva ratio que Efjpaña envía a una de sus hijas prediL yetas, los hombres ilustres que hoy rigen los destinos de la República de El Sal- vador e v o c a r á n a aquellos antepasados suyos- a- ÁtlacaH- el viejq y Atlacatl el joven- que hace más de cuatrocientos años, al frente de diez mil pipiles, pelearon tan bravamente era Acajttüa, que asombraron al capitán español, que si bien gainó la famosa batalla, fue a- costa de su propia sangre, pues r- y. en eMa recibió el fle V chazo en un muslo que habría de dejarle cojo para toda su vida. Etane los hombres de hoy, figura; en primer término el actual presidente! de la República, general. Salvador Castañeda Castro, militar de carrera brillante, educador de juventudes militares y gobernante ecuánime y justo, que goza de un bien ganado prestigio en toda la América de habla española. O t r o salvadoreño ilustre, muy querido en España, es él minisíra en Madrid, don Antaaia Alvarez Vi- Texto de la Beal Cédula de 2? de tep daurre, qu? represen- tlembre de 1546, por la aue se le concede a la villa tó a su país, en distintas caipitales de Amé- de El Salvador el titulo de ciudad. (Archivo general de Indias, de Sevilla? rica, y que lo hace en Eapána desde mediados de 1939, con, un celo, acierto y tino, que Resultaría interminable eíste artículo) si acreditan ampliamente su valía. Porque el prosiguiéramos la lai ga lista de las personaseñor Alyarez Vidaurre une a sus cualidades lidadei de El Salvaoor actual. Cerrémosla diplomáticas, qué rara vez concurresii juntas con un nombre que nosi es familiar y al que en una misma persona, su sencillez, que no tanta gratitud se debe: ú de don Rodolfo excluye, sino que acentúa la alta dgnidad Barón de Castro, diplomático insigne, acadel cargo; su modestia, que hace resaltar démico, publicista brillante y gran amigo de más vigorosamente su talento y su cultora; España, donde se formó, haciendo su carrey su perfecta caballerosidad y su exquisito ra de abogado y desempeñando el cargo ¡de don de gentes justifican con. gran amplitud secretario éu la Legación, de su país. Conocilas muchas simpatías y los sinceros afectos do de todos es la actuación humanitaria y iu: -ha logrado captarse ej E? t aña. noble del señor Barón de Castro en aquellos días trágicos del la guerra civil española. Al diplomático salvadoreño deben la vida muchos españoles y fue tamben e la intranquilidad de aquellos 1 días de cruenta íucha cuando el señor Baróa pergeñaba y corregía las cuartillas de su obra literaria, filológica e histórica que en. tan. corto espacio de tiempo- menos de siete alños- -había de abrirle tas puertas de las más doctas Academias y había de colgar en su pedio las insignia de las cruces de Alfonso X el Sabio y de Isabel la Católica. De u labpr en la O. N. U. -donda ¡asistió, como ministro plenipotenciarip- labor magnífica en diefemsa de España, están bien enterados los españoles, y por ella se guarda al señor Barón de Castro etP. rna gratitud. En esa conmemoración del cuarto centenario de la fundado de la ciudad de San Salvador, la presencia de España no i e reducirá a esa Misión de hombres ilustré que preside el marqués dte Lozoya. Durante e. sos actos, a través del mar, y matizando las palabras que en ellosl se pronUtiícien, muchos, ¡corazones españoles vibrará ra de emoción y gratitud hacia: áqurjt moble y leal país que de tan gallarda maniera, dentro y fuera de España, ¡supo defenderla porque supo comprenderla. Luis SAAVEDRA Don Rodolfo Barón de Castro, secretarlo de la Legación de El Salvador.

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.