Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 01-11-1946 página 8
ABC MADRID 01-11-1946 página 8
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 01-11-1946 página 8

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página8
Más información

Descripción

LOS RUSOS EN LAS VENTAS DE ALCORCON Famoso cuadro en el que se reproduce una sesión del Congreso de Viena (1815) con auténticos retratos de lo ministros que en él tomaron parte. Lps señalados con X son (de izquierda a derecha) Wellington, Metternich, Csstebreagh, Labrador y Talleyrarid. (R e p r o d u c c i ó n i, Je V. Muro. N o es ésta la primera vez que el gigantesco pulpo ruso adelanta sus tentáculos en dirección a España ipara jugar sobré su piel de toro la partida de naipes diplomática con Inglaterra. Y ver si la puede ganar a fuerza de trampas. Ya hízo eso en el primer lustro del- siglo pasado cuando el mundo, recién salido de las guerras napoleónicas, andaba tan revuelto como lo está hoy. Es curioso y aleccionador ver cómo a una distancia 4 e ciento treinta años se repiten las mismas situaciones, hasta tal punto, que 4 as actúale nos páj- ecen calcos o fotocopias de las antiguas. El Congreso de Vierta no había conseguido en 1815 conciliar a los vencedores de Napoleón: que, tras de muchos valses y muchas intrigas, se retiraron a sus tiendas, tan poco avenidos como los de, Hitler. De un lado, los componentes dev la Santa Alianza, y dej otro, Inglaterra, agazapada, pero vigilante, y activa en su isla. Los choques de la Gran. Bretaña con Rusia fueron un anticipo de los de Bevin con Molotof. Entonces, l s qué llevaban la voz cante se llamaban 1 Pozzo di Borgo, j Nesselrode y Castelreagh. Los mismos conflictos que suscita Stalin suscitábalos, hace ciento treinta años, Alejandro I, que, ensoberbecido con sus victorias, quería, no sólo imponer su irifluerícta. en Europa, sino expandirla has- ta América, continente que estuviérale vedado antes a su ambición. Para ello concibió un pían tan atrevido comb estrambótico, que consistía eri. el reparto de nuestros virreinatos ultramarinos, entre Inglaterra, Rusia, Prusía y Austria. Era este propósito- -dice en sus Memorias el que füé secretario de despacho de Fernando Vil D. José León Pizarfo- -una especie de testamento en que el Rey de España repartía sus Estados entre varios Soberanos de Europa. Rusia, que. tenía de agente en Madrid al bailíoí Tattischéf, curiosa mezcla de intrigante y diplomáti- co, ejspecie que las Repúblicas soviéticas empezado por ¡introducir una quinta colian repetido hasta fó. saciedad, formuló lumna en el Palacio Real, sobornando o sus aspiraciones en. una Mérnoria que -seduciendo a los favoritos más desacrediera- una perfecta maestra de estupidez y tados fugarte, Alagón, Chamorro) lo- de perfidia. Documento súm m ntte vago, gró, por medio de ellos, qué España le- -comenta el mencionado León Piza- comprase cinco navios de setenta y cua rro- pero que tenía un colorido de polítro cañones y cuatro fragatas para contica metafísica. Había, entre otras cosas, ducir a América Ja expelición del conun párrafo destinado a ufta reforma relide de La Bisbal. -El precio de coimpra giosa en nuestra América, el más inoporquedó fijado en cincuenta millones de reatuno y extraordinario del mundo. Ror de les, empleándose la cantidad dada por Incontado, todo era una abstracción ideoglaterra para indtemnkar a los dueños de lógica de escuela, sin el más remoto conegros de nuestras colonias. nocimiento del país i de la cuestión. La flamante escuadra, que condujo desEstólido y- pérfido. Se trataba, lo ¡mis- de Reval a Cádiz el almirante Moller, tuvo mo, que ahora, de desorientar a los in que ser desguazada íin h acerse una sola cautos. Tras esas vaguedades y esos abvez a la mar. Lotéaseos estaban podridos surdos, se iperseguían fines concretos: y los marinos españoles se negaron a triperturba a Inglaterra y! de paso, chalapularlos; Por eso fueron, separados del near- con nuestro tesoro. Porque en Ruservicio los capitanes de navio don Roque sia, la política va siem, pre unida a négoGuruzeta y don Francisco Beranger, dicios turbios, que a veces son vulgares suelto el Almirantazgo y confinado él se- x estaias. cretario de Estado de Marina, Vázquez de Figueroa. Por ejemplo, la venta de los famosos Todas estas medidas las impuso Tatbarcos podrido Tattischéf, qué había tischéf, que mandaba en España como en una colonia. A Fernando VII se le. había ganado con el espejuelo de su posifile matrimonio con una hermana del Zar. Rusia estaba presente en todas partes, y se creía ver cosacos hasta en la sopa. El pueblo cantaba: Dicen que vienen los rusos por las Ventas de Alcorcen- -y los rusos que venían- -eran sacos de carbón. Nada ha inventado, -como se ve, Stalin. Sólo varían) M etiquetas con que se disimulan las anibiciones. A principios del, siglo xix era la Santa Alianza; hoy, el antifascismo. Ayer se nos vendíia. n barcos podridos; y en la República de Azaña, Ostrowsky- negociaba petíoleos. En ver de un bailío corruptor e intrigante, los hombres de rjoy hemos visto; maniobrar al iorobadp Rosemberg. Y tras dé to. dtí eso, la misma Rusia, santa o roja, según las circunstancias, pero siempre vténebrosa y ra paz. Alejandro I de Rusia. JOSÉ DEL RIO SAJNZ

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.