Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 30-05-1946 página 7
ABC MADRID 30-05-1946 página 7
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 30-05-1946 página 7

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página7
Más información

Descripción

LOS CLAUSTROS VAN AL OESTE o se está, no, preparado para esto, por muy preparado que para todo deba estar uno en Nueva York; no está preparado uno para encontrase de pronto, difuminado tras un cendal de niebla, algo más allá de donde acaba la calle 155 y de donde el Washington Bridge lanza su onda sobre el Hudson, rodeado de árboles a los que recorre ya una vibración de primavera, aislado, sin sombra alguna de rascacielos en su cercanía, éste monasterio románico que se llama Los Claustros con su torre, serenamente erguida, su gótica capilla, su aire medioeval, y europeo... Por un instante nos restregamos lo N ra de madera, tallada exquisitamente con calados y figuras delicadas, que perteneció a una casa de Abbeville, conocida con el nombre de Casa de Francisco I, aunque probablemente fue construida en el reinado de su antecesor Luis XII, a fines del siglo XV y principios del XVI. Junto Y entonces nos penetra el a esa escalera, un grabado reproduce la alma un s e n t i m i e n t o de plaza de la que aquella casa formaba comprensión y de ternura. parte. Es una plaza en la francesa PicarComo un gigante que intendía, sahumada de intimidad y de encanto. tara balbucir un idioma exUna plaza con una fuente central, en la traño, Nueva York, sin snoque dos viejas, cubiertas de grandes tobismo, tierna e inocentemencas, platican amistosamente... De esa plaza te, pretende fabricarse a nuesfue arrancada esa escalera. Y yo me imatro igual de europeos su vegino, entristecido, cómo habrá quedado jez. Y con un afortunado ensin ella. La veo como un muñón ensancaje de muy afines modelos, grentado, mutilada, con un emplasto de con reminiscencias y ecos de cal y hierro para cubrir su herida. Y su patrones venerables, construherida me duele lo mismo que si fuera ye, a pocas millas de Wall mía. Y esa especie de legitimación de Street, la contrafigura de una origen que el grabado implica se me ande aquellas conventuales resitoja una crueldad, un ensañamiento o una dencias francesas, donde se ostentación inútil. miniaban los códices, se ela- ¡Ah! -me digo después- Igual muboraban utilmente lo- caldos Arcadas y jardín del claustro Trie. tilación han sufrido, de una o de otra forma, todos los pequeños pueblos que ojos como si un caprichoso espejismo nos el Catálogo del Mudesorientara, después, al ver, afirmarse seo reseña tan pun- -apenas la niebla se disipa enteramentualmente... te- -su perfil indudable, apresuramos el Y pienso en Cerepaso para buscar, sin pérdida de tiempo, zo, sin La adoración una explicación a lo que nos parece que de los Magos -esno la tiene. cultura s o b e i bia- -Ahora ya dentro de él, mientras recotraídos a la tierra de rremos sus salas y contemplamos sus essu frío usurpador, el culturas y sus retablos y sus tapices magpadre Noel, desde su níficos, lo comprendemos todo. Los iglesia d e Nuestra Claustros como el fantasma, van al Señora de la Llama, Oeste. y en la casona de Piedra a piedra, no la fábrica exterior, Illescas, a la que un para la que el granito de Millstone. cerventarrón de dólares ca de New London, ha suministrado su voló su artesonado mejor entraña, sino el interior, ha sido espléndido d e l s itransportado de Europa. De modo que glo XV, y en la Calas puertas, las columnas, con sus mil ditedral de B u r g o s versos capiteles, hechas de mil diversos La adoración de los Magos de la iglesia de Nuestra Señora de con la mella en su la Llama, Cerezo de Riolirán (1188. mármoles, las ojivas, las vidrieras, los arcolección de tapices tesonados, las arcadas y las tumbas, desde este de la Nativiguazadas, desarticuladas como piezas le dad del Señor y este otro de la Redende los ricos licores y se oraba a Nuestro un meccano infantil, han sido llevadas a ción del Hombre, en- el que spbre hilos Señor. Manhatan desde sus solares de origen! A de oro y plata disputan teologías, alegoEl remedo es exactísimo, aunque haya expensas del medioevo francés y del merías de los vicios y de las virtudes... demasiada calefacción en estos claustros dioevo español. se ha elevado en este neoyorquinos, y un imperdonable techo de Y pienso, en suma, en toda Europa suelo sin Edad Media (Estados Unidos cristales rompa la comunicación de las que, análogamente, bajo el castigo de sus adolecerá siempre de esa falta terrible, de fuentes del mejor de sus patios con el revoluciones y de sus guerras y de su ese salto de la pradera a la metrópoli, sin azul del cielo. Pero ése es pecado venial pobreza, va cediendo, día a día. piedraa la abadía entre ambas) un monasterio al para ser cargado en la cuenta de quienes, piedra, quilate a quilate, sus joyas más que las ruinas de Saint- Michel de Cuxá, por orden de Rockefeller, los erigieron. preciadas, y mandándolas, como el fanSaint- Guilhem le Désert, Bonefot- en- CoHay otro pecado que me! apena más. tasma de Rene Clair, hacia el Oeste, haminges y Tries han suministrado, si no Voy a deciros cuál es. Una de las salas cia el Oeste... su ánima, sí al menos su arquitectura. Y tiene en uno de sus ángulos el arranque JOAQUÍN CALVQ- SOTELQ al interior, Cerezo, Frías, Illescas, Arlande una escalera bellísima. Es una escaleNueva York, mayo 1946. za, Las Avellanas, parte de sus riquísimos tesoros. Pero sería pueril suponer que Los Claustros son un mero engarce de unas colecciones bellas y valiosas para las que se ha buscado, no la fría, estructura del Museo, sino ésta, más delicada y sugeridora. En el fonclo inspirador de la construcción de Los Claustros ha alentado el deT seoide dotar de antigüedad á esta tierra que no la tiene y de clavar en su suelo, al qu ¡e se aferran los dientes de los edificios de cien pisos, la ingrávida estructura de e s t e monasterio, en el que, sin embargo, a pesar del ingenio y de la gracia desplegados por el arquitecto, algo impalpable nos hace ver que ni la oración ni el cilicio patinaron nunca sus muros ni el murmullo de los rezos recorrió como una fronda los árboles de sus jardines. Vista de Los Claustros

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.