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ABC MADRID 15-05-1946 página 22
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ABC MADRID 15-05-1946 página 22

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC. MIÉRCOLES 15 DE M A Y O DE 1916. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 22. Inglaterra nos pedía, y al interés y al éxito de ÍES armas americanas, por haberles asegurado con su neutralidad su victorioso desembarco en el Norte africano. Las naciones adoptan en cada monr ito de su historia la actitud que mejor sirve a su propio interés. No hay nada permanente ni definitivo en política exterior. Los que un día vimos como aliados, a los pocos años los vemos como enemigos. Pesa el interés común de oada hora scbre el que sélo triunfa al ercar lazos y estrechar afectos. Una guerra, y de la naturaleza que son las guerras modernas, suele llevar como secuela otras futuras guerras. El habernos liBrado de ella y el no haber abierto ningún abismo, no obstante los momentos graves por que pasamos, con los otros pueblos, ni aun con aquellos que secularmente nos dañaron, 63 una bendición que España recibe y que lé permite mirar el porvenir con confianza. (Muy bien. Muy bien. La política exterior de los pueblos busca su grandeza y su bienestar. No es estática, sino dinámica, y sujeta a la inquietad de cada momento. El empeñarse en perpetuar la política por accidentes históricos de su pasado constituye el más grave y peligroso de los errores. Ni siquiera basta mirar al momento, es preciso en política prevenir el futuro. Son el trabajo, el progreso, su población, su estado de forma en cada momento, lo que pesará en el concierto de los pueblos. FRATERNIDAD PORTUGUESA Y AGRESIÓN DEMAGÓGICA FRANCESA Dos vecinas tiene España a lo largo de sus fronteras: la nación portuguesa, con la que nos unen estrechísimos y fraternales lazos de amistad, y la nación francesa. Con la primera, España, al término de nuestra Cruzada, firmó su primer Tratado de No Agresión, y llegados los alemanes a nuestra frontera e interesados por la intervención de España en la contienda, España reafirma su neutralidad firmando lo que se conoció con el nombre de Pacto Ibérico, que lo mismo tuvo su eficacia en la guerra que sigue en pleno vigor hoy en la paz. La fecha y circunstancias en que este Pacto fue firmado, y el fin perseguido de defensa e integridad de la Península Ibérica, es el refrendo más fuerte que puede hacerse, de la intención española de mantenerse apartada de la guerra; y de la política de amistad y de buena vecindad con la nación hermana. (Muchos aplausos. No podría, decir lo mismo la malhadada República española, pues durante su tiempo tuvo lugar aquella inicua conspiración de los gerifaltes republicanos, amparando a los conspiradores portugueses, que afloró a la publicidad con el apresamiento del vapor Turquesa Ni uno solo de los partidos republicanos de entonces se libra de la responsabilidad. España tiene documentos, que puede ofrecer a la publicidad, de hasta dónde llegaban las pasiones y maquinaciones de los republicanos contra la paz y el orden de sus vecinos. (Muy bien. Por cuanto se refiere a nuestra vecina de allende los Pirineos, la política de la nación española no puede ser más noble y generosa. España continuó manteniendo sus relaciones de amistad, y con las seguridades ofrecidas facilitó la concentración de los franceses en un solo frente, sin tenerse que preocupar de nuestra frontera. España no se aprovechó de la derrota francesa, ni aún después de conocer cómo, para entrar en la guerra en favor de Polonia, había reivindicado, para el caso de una victoria y de que España interviniese en la contienda, islas y territorios pertenecientes a nuestra soberanía. (Grandes y prolongados aplausos, con vítores a Franco. Terminada la contienda, la política de mala vecindad hacia España, denunciada por la nación española, ha tomado estado. Sé suceden las injurias y calumnias contra su Régimen, el asalto de Consulados, las violencias contra los españoles, las agresiones de partidas contra nuestra frontera y aún los ataques serios de fuerzas organizadas, cómo el que en octubre de 1944 penetró por el valle de Aran, sembrando el terrorismo en las aldeas, y como inri el corto arbitrario de las comunicaciones con España y las acusaciones. y manejos diplomáticos ante las naciones extranjeras para provocar el aislamiento de nuestro país. ¿Es que puede definirse de una manera más clara la agresión y el espíritu de mala vecindad de un pueblo hacia otro? No es el distintivo de nuestro Régimen, como hemos demostrado, el peligroso, sino de los regímenes comunistas demagógicos y carentes de autoridad. (Muy bien. Está visto que ni aún con la de- CENSO DE RESIDENTES MAYORES DE EDAD PARA REFERENDUM La mujer; cualquiera que sea su estaflo civil sea soltera, casada o viuda, con tal de ser española y que h a y a cumplido o cumpla los veintiún años de edad antis del i. de julio de 1946. tiene los mismos derechos que el hombre a efectos de inclusión en el Censo de residentes mayores de edad, que ha de servir de base para la aplicación del referéndum. momentos. Ni lo que hemos sido en la historia nos lo regaló jamás nadie, ni lo que hayamos de ser en el futuro nos lo han de conceder los demás. Es la unidad y el esfuerzo de todos los españoles el que ha. cíe lograrlo. Con España seguirán siempre estando ia verdad y la razón. No; no son los pueblos los que están contra España, es la política sectaria de los grupos apoderados de los órganos de opinión, es la eterna obra de los fariseos, el ¡Ba- rrabás! de una multitud engañada. (Una clamorosa salva de aplausos que dura varios minutos acoge las últimas palabras del Jefe del Estado. Todos los procuradores, puestos en pie, aclaman al Caudillo entusiásticamente. TERMINA LA SESIÓN. EL GENTÍO. EN MANIFESTACIÓN, ACOMPAÑA AL CAUDILLO HASTA EL PALACIO NACIONAL, VITOREÁNDOLE rrota y el desastre las naciones aprenden la lecciones en la guerra. (Muy bien. El discurso duró exactamente cien minutos LA CALUMNIA Y LA MENTIRA CONCITA- y al terminar sonó en el Ssalón una prolongaajsima ovación. Tantas cuantas veces fue inDAS CONTRA ESPAÑA Lo que ocurre en el mundo internacional no terrumpido 1 por los aplausos el Caudillo, que puede ser más artificial y paradójico. En la pronunciaba su discurso sentado, hubo de poconciencia de todos los pueblos existe un ge- nerse en pie. Las últimas palabras del Geneneral temor, todos saben quién amenaza al ralísimo 1 fueron subrayadas con una calurosa mundo, quién conspira y quién maquina contra la seguridad de las otras naciones. Y, sin y prolongada ovación acompañada de vítores embargo, nadie se atreve a pronunciar el nom- que no cesaron en todo el trayecto desate que bre. Hay sucesos que se sepultan en el más abandonó el salón hasta dirigirse a su autogrande de los olvidos. Ya nadie habla de la móvil. expulsión de la Sociedad de las Naciones de la A la puerta del Palacio de las Cortes fue agresora de Finlandia, ni del Pacto germanoruso, que repartió Polonia y dio manos libres despedido ya por el Gobierno y los procuraa Alemania para su victoria en el Oeste (Muy dores, que sin cesar le vitoreaban como igualbien) ni de los Estados bálticos, ni de las de- mente la multitud agolpada frente al edificio bilidades y colaboración de otros jefes y pue- y a todo lo largo del trayecto, mientras la banblos. Es España, sólo, la que constituye el blanco y la obsesión, la cortina lie huncos que dis- da de música interpretaba el Himno Nacional. trae la atención alejando el pensamiento del Rodeó el coche la escolta inora e inmediatamente el público, rompiendo la fila de las fueyfracaso. (Muy bien. Aplausos. Se habla de quiméricas maquinaciones que zas que rendían los honores, se lanzó detrás España pudiera hacer contra ¡a paz, olvidando del coche en una manifestación entusiástica de que ello es imposible bajo el signo católico que fervor que le acompañó a lo largo de la Capreside nuestras acciones, y en cambio nada rrera de San Jerónimo hasta la Piierta del Sol se dice de los millones gastados para producir y en todo el trayecto, camino del Palacio de en España disturbios o revoluciones, ni de las Oriente. escuelas terroristas que funcionan en el país vecino, ni de los esfuerzos clandestinos para Cuando partió 1 automóvil que conducía al turbar la paz y arrastrar a la rebeldía a las Caudillo de regreso al Palacio Nacional, semasas obreras que los agentes del comunismo guía rodeado de la muchedumbre, entusiasta y preparan y fomentan en el muádo con el seclamorosa. Como antes decimos, los miembros ñuelo de su mítico paraíso. Al aumentar de dimensión la guerra, y al del Gobierno y los procuradores permanecieachicarse el mundo ante el avance de la velo- ron en la escalinata de acceso al edificio de las cidad, parecían hacerse más necesarias la so- Cortes, presenciando el espectáculo y, restalidaridad y la cooperación internacionales. Sin blecida la normalidad, desfilaron las fuerzas embargo, el camino que vemos emprender es del batallón del ministerio del Ejército. completamente el contrario que el que el munEl Gobierno se trasladó, terminado el desdo anhela. Si la guerra actual sirve para que a costa de ella unas naciones aumenten de te- file, al despacho del presidente. de las Cortes y rritorios, sojuzguen a otros pueblos y extien- allí permaneció unos minutos comentando el dan su poder por el Universo, se habrá echado desarrollo de la jornada. la simiente de la guerra futura. El Jefe del Estado, con el presidente de las Si, por otra parte, se eleva al rango diplo- Cortes, penetró en el Palacio de Oriente, en mático la licitud de la mentira, que definió Le- medio de las incesantes aclamaciones de la nin como arma política y la Sociedad de las Naciones se dedica a dar cauce y estado a las multitud. Las gentes que habían seguido a la comitipasiones o intrigas políticas de los distintos sectores, entrometiéndose en la vida interna y en va durante todo el itinerario irrumpieron en lo que es privativo de cada nación, no será un la plaza de Oriente y se incrementaron con instrumento de paz el que se labre, sino la grupos numerosísimos de personas de ambos verdadera causa de la discordia, como alguna sexos, portadores de bandera diversas y llede las naciones pretenden. (Aplausos. nos de entusiasmo. SERENIDAD DE LOS ESPAÑOLES ANTE Estacionados allí unos minutos, sin cesar LA L O C U R A D E L M U N D O Es paradójico que sea la calumniada España de vitorear al Caudillo, obligaron a éste a sauno de los pocos pueblos del Universo que, sin lir al balcón, en unión del presidente de las tomar parte en la guerra, ha aprovechado sus Cortes. Al hacer su aparición en el balcón lecciones y ofrecido al mundo el sentido de su principal, una indescriptible ovación acogió su colaboración y solidaridad, y en honor de esa comprensión del Occidente, ha dado al olvido presencia. Arreciaron ios gritos de ¡Franco, Franco, Franco! ¡Comunismo, no! y el viejas ofensas y equivocaciones lamentables. Yo agradezco a los españoles esa serenidad Caudillo, emocionado, saludaba y agradecía el con que observan la locura del mundo y esa homenaje con la tnano. Permaneció- así cinfirme adhesión que me ofrecen en todos los co minutos, obligado por los- insistentes requerimientos de los, manifestantes. Al fin, se retiró, pero nuevamente tuvo que asomarse, esta vez ya solo, ante la actitud de la muchedumbre que no cesaba de agitar los pañuelos y entonar himnos. A las diez menos veinte de la EN noche, el Jefe del Estado abandonaba el PalaCLUB CASTELLO cio Nacional. Todavía permanecía allí el púSalón de té. B r americano. Actuación de blico, que primero abrió paso al coche del Caulas orquestas Custodio y Curras. dillo y luego le acompañó entre gritos y vitores hasta la plaza ie España, en la que ya el Tarde, té- fiaile de 7 a 9,45. Noche, baile vehículo se perdió de v i s t a camino de El hasta la madrugada. Pardo. Castelló, 24. -Teléfono 58269 c CASTSLLO SAUMSSANQ

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