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ABC MADRID 27-04-1946 página 3
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ABC MADRID 27-04-1946 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
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MADRID DÍA 27 DE ABRIL DE 1946. NUMERO SUELTO 40 C E N T S é EL H O R R O R A LA GUERRA DIARIO ILUSTRADO D E t N- f O R M AGÍ Q N GENERAL f tor Verasohaguine, trajo de x greso de la necesariamente brindadlas a grupos escogicampaña una magnífica serie de, cuadros, dos. Pero ese. público intermedio posee la cpn los que celebró una Exposición ti Pa- sensibilidad suficiente para rechazar el prerís. Entre ellos figuraba una tela que fue el dominante featno industrial. Y, ppts. por el OR si no estábamos bastante convenci- clov, de la Exposición, y que quizá recuerden ciñe, sobre todo, si serrata de gente, ¡oven, dos de la inutilidad de las guerras, el muchos porque se hizo popularísima y la re- nacida ya cuando el jteatró, -por razonas espanorama que en la actualidad nos produjeron millares de veces periódicos y re- téticas y técnicas, podía parecer a muchos ofrece el mundo es una prueba decisiva... vistas. anacrónico. Esto, sin prescindir, para más Se ha heclío la paz... Por lo ¿peños, éste es Era una espantosa cosa vista en el de- cumplida consideración del caso, de un snoun rumor que corre por ahí. Las naciones sierto de Asia- una colosal pirámide de cabismo niuy de nuestra época: de un prurito vencedoras quedan arruinadas para mucho dáveres, coronada porcia figura de un gue- irin. ovacionista, bastante pueril, que hace tiempo, mientras que- -caso curioso- -las rrero h caballo. Verasch- agjuine era un feroz preferir otros espectáculos, u otras lecturas, vencidas se reponen rápidamente. No creo enemigo de- la guerra: 0 cualquier forma d arte, a título pfecisaque sea necesario nombrarlas ni, señalarlas Vivía entonces todavía el mariscal conde coií el dedo... ¡Y a prepararse para otra de Mokke, y fue uña tarde a visitar la Ex- men te de cosa recién; nacidta. nueva guerra! Parece el cuento de la bue- 1 siciún de cuadros de Vdraschaguine. El arEl teatro es viejo, derij isiádo viejo. Muna pipa. chas veces ha pasad Í OÍÍ 1 tranca de muerte... tista, agradecido, y emocionado, acompañó al Lo que sorprende más es que, cuando las mariscal, guiándcle por las salas y mostrán- Pero, indudabtem. ent v revive, y dijérase que batallas se entablan, todos los contendientes dole las principales obras: el Estado Mayor nace a cada nuevo avatar; con existencia confían en la victoria porque, en sus, aren- del Zar, delante de Píewna; la nieve cayendo más briosa. Dondequiera! que haya unos gas, aseguran contar con la eficaz ayuda de sobre los muertos, len el desfiladero de Chip- hombres dispuestos a oír lo qua otros les la Providencia. El. Gpt m t uns alemán le ka; el pope bendiciendo una trinchera llena cuenten- -como ha recordado Ortega, con han repetido en todas las lenguas todos los de cadáveres; Skcbelef, -el general blanco, pavistas al sentido clásico del anditorium- ejércitos del inundo a la hora de combatir. sando al galope de su caballo por delante de surgirá el teaitro, estableciendo una relación Naturalmente, como siempre ha de haber las tropas, aclamándole... humana y no- mecánica, de corá; zón a cora. vencedores y vencidos, lo lógico stría qus De pronto, el mariscal fijó su mirada en zón, que las sombras del ¡cine, cuyo- precioi el vencido reconociera su error, y, al verse la espantosa- pirámide- de cadáveres, y se so valor hay que buscar! por otro lado, no derrotado, ¡acatara e! fallo providencial... aproximó para leer la inscripción... pueden crear. Arrasado, el mundos- hipótePero no es así. Nunca se confiesa verfcido. sis cada vez más viable- el, teatro sería, ¿Qué es esto? -preguntó. Suele ocurrir que todos los combatientes se- ¿Vuestra excelencia no lee el ruso? -dí- quizá lo. primero en resurgir. ÍLos superviatribuyen- la victoria a fuerza de propaganjole Vexaschaguine- Se- lo traduciré... Es vientes contarían su caso a los demás, unos das embusteras y hasta que la solemnicen con más realidad, otros con- más fantasía. una dedicatoria... Dice: A todos, los concon espectaculares Te Demn en acción de Después ác todo, el teatro ha. nacido n quistadores pasados, presentes y futuros. gracias. Rscueirdo haber leído que, después de cualquier porte. arriba yi apai- o, en el atrio Moltke clavó sus ojos en el pintor que, inno sé qué batalla en los días del Primer Im. y en el. descampado. ¿Qué más, si nuestro perio, en la que intervinieron cuatro poten- genuamente, repitió: A todos los conquistadores pasados, tiempo lia visto hacer el teatro argentino, del cias, se cantaron cinco Te Detim. Si los ejércirco, n Buenos Áirts, de los; Po destá. citos combatientes fueron cuatro, y los cua- presentes y futuros. El mariscal dio media vuelta rápidamen i inteligencia tiene que avalar il teatro tro se atribuyeron la victoria, se comprende para qua éste recupere 1 públicos amplios de que los Te Demn fueran cuatro también. Pe- te y, acompañado de su séquito, abandonó la que no puede ni- debe prescindir. Si la intero aquél quinto Te Deuin en discordia nadie sala sin despedirse de Veraschaguine... Pues bien, aquel artista al que tanto horror ligencia se desvió del teatro, fue porque el supo explicarle. causara la guerra, años después, durante la teatro llegó a romper con la inteligencia o, En esa anticipación del juicio final que es campaña ruso- japonesa, moría luchando copor lo menos, a ignorarla. Trátase ds un él proceso de Nüremberg, él mariscal Goe- mo un héroe delante de Port Arthur; fenómeno universal que en- España presenta ring- -al que yo no trato. de disculpan- -me caracteres específicos, ya que es difícjl enJOSÉ JUAN CADENAS parece la encamación del sentido común. El contrar un país en que empresarios y aun hombre no sale de su apoteosis como el directores artísticos rechacen tantas obras guardia út Pepa la frescachona. Ha hecho como en el nuestro, por tildadas, peyoratiia guerra como un militar obediente y disvamente, de literarias o intelectuales ciplinado y ha empleado identicos- procediQuieren hacer del teatro un mundo aparte; mientos que los utilizados por sus enemigos, con pocas letras, por supuesto, y, para 1 de- porque se trataba, como hemos visto, de una lucha a vida o muerte. Naturalmente, le sorA coincidido la conferencia dada. hace signar el arte de componer comedias, sue prende ahora que le censuren parque a las unos días tn Lisboa por don José len d f cir esto: carpintería. Que el teatro no bombas de las fortalezas volantes no contessea literatura, sólo es verdad a media? y Ortega y Gassít sobré Teatro taran los antiaéreos alemanes disparando sal- con la reapertura, de los escenarios, según quien no perciba. la mitad literaria que ef chichas do Francfort. teatro- ¿el bv. an teatro- -lleva consigo. está uso tradicional en Pascua 4, e Resurrección. Muchas veces dudamos de la: verosimilitud Porfío que las palabras de 1 tan eminente di- equivocado, y hasta se- arruina en ocasiones, de las cosas que leemos, porque sólo tendrían sertan. te han tenido, sin propó sito expreso contra lo qus le aconseja ru falso sentido justificación en un mundo loco. Las naciones- alguno, cierto valar de augurio y auspicio. práctico. En manos del etnppesa rio. al uso más poderosas se han aliado para destruir Uno de los- avales que más necesita, ac- i- -con todas las excepciones que. se quiera- no una nación, sirio un continente (Mr. F. dtn tual mente -l teatro en crisis es 1 iníelu. -el teatro nos asfixiaría. N o son pocos los dijo que sé uniría pon el diablo con tal da tUül: Por que elementos de esa di st ¡ía han empresarios que pierden dinero haciendo vencer) -lian dejado sin hogar a millones da venido siendo los primeros en retraerse de mal teatro: -lo que denr testra que TIÍ siqviie- 1 familias cjus perecen de hambre- y miseria, y Jo- s coliseos: fenómeno- que no podía por ra son hombres de negocios. compadecidos hoy ante tanto dok r y desola- mensos de producirse; dada la industrializaAntalo, se iba al teatro o á ninguna par- a ción, o porque les- remuerde- la conciencia, o ción del teatro. El negocio teatral y la inte- te, por la falta de otros, espectáculos. Ahora, quizá por ambas cosas, andan de cabeza lig- eiicia. difícilmente armonizan, y así es títratando de- remediar, hipócritas, el daño pico de nuestro tiempo el derivativo de loa en cambio, la competencia a ste propósito C 3 tremenda. Para prevalecer, 1 teatro ti. e- que causaron. Son como aquel usurero del epigrama, don Juan de Robres, que le dio escenarios más o menos di. camera, refu- n -que a cúdir a lo suyo letfa y vO z humar por hacer asilos... Pero antes hizo los pg- gio de minorías selectas, laboratorio de ex- na, -inteligencia. De esta súeríe, le. -e s dado periencías un tanto difíciles, al catilo de, crear una réplica al tetü- ciso mundo cotidiabres. íiqtiel Vicux Colombior, por citar el más co- no, dando pie a la evasión de que. OrteSí... Las guerras- son estúpidas, pero la nocido y propagado, que sirvió de modelo a g- a acaba de h- ablar en Lisboa, -coa su, haHumanidad, no escarmienta, y cuando ha ais- oirás salas y salones, poniendo al gusto par 1 itual fiqueia. de pensamiento y de lens nafrutado unos cuantos años de paz saludable, d fea tro en riesgo de quebrarse a fuerza jí. Que el teatro, en efecto, nos- depare las arda ea deseos de procurarse alguna bélica de sutil. maravillas. -apetecidas por el público que diversión. Es lástima- qu Dios no nos conE) -público intermedio, por la de sabe esperar es nuestro voto a la 1- 3- ra priserve la vida para oír las carcajadas, que cultura y situación económica, índole es, sai- esto el ñiaveral n i que todo reverdece. lanzará la posteridad cuando juzgue, desapa público más indicado pa. ra llenar los teatros, sionada y frh. jeste colosal catástrofe. V ALMAGRO, JJ héroe drla Uerra ruso- turca, el pjn- JIO alcanza la exquisito de representaciones P EL TEATRO EN PASCUA DE- RESURRECCIÓN H

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