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ABC MADRID 26-02-1946 página 15
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ABC MADRID 26-02-1946 página 15

  • EdiciónABC, MADRID
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MADRID DÍA 26 DE FEBRERO DE 1946 DIARIO ILUS. DÍARÍO ILUSTRAi D 0 AÑO S! M O N ov E N O N: 12.479 r SÜSCKU CION: AIADIU 0: UN MES, 10,5 0 PESETAS. PROVINCIAS: TRES MESES, 31,50: A 3 JKHICA V l OKTUCiAl. OfKESR 1 JBSES, M, EXTKANJEUO: TIUSS fllESES: 51 PESETAS. REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN: SERRANO, 61. MADUH) APAliT U O N. 43. familiarmente la mano sobre el hombro del vencido- -a Justino de Nassau y le hubiera calificativo infamante, UN B A L A N C E aplicado en cambio unBreda por mucho apaBreda no habría sido Cuando pueblos que hace poco creyeron do- rato procesal de que el hecho se rodeaNueva York 25, 6 tarde. El periódico The minar al mundo, no oran otra cosa más quese... Ño tenemos la pretensión de que comSun- hiL publicado- bajo el título Opinión púun mal zurcido de ducados y ligas comarca- prendan nuestra historia los que no com- blica, y firmado por George E. Sokolsky, el les- -poco más que tribus- España ya había prenden nuestro p r e s e n t e No aspira- siguiente articulo: superado todas las fases de la civilización ele- mos a la estimación ni al trato de quienes no Algunos dicen. o escriben algo, cierto o mental y era un Estado fuerte, bien unido tienen inteligencia ni voluntad para entender- falso, juicioso o estúpido, que se repite lo voluntariamente y no por golpes de fuerza, y nos. Pero nosotros, en nuestra posición, qu; e suficiente para llegar a ser la. opinión pública. realizaba la empresa de descubrimiento y civi- no es ciertamente xenofobia, sino reacción Entonces, ios encargados de hacer las encueslización de un mundo. Cuando los pueblos que ante muy claras maniobras, ñas sentimos sa- tas van de casa en casa y plantean cuestiones en la actualidad- -desde puntos evidentemente tisfechos. Para vivir en paz interior y con ura veladamente, y después la llamada opinión antagónicos- -quieren realizar, vencedores, el buena voluntad evidente para los demás pue- pública se comprueba mediante un escrutinio. sueño ambicioso de los vencidos, eran aún me- blos, no hemos pensado solicitar la anuencia Así los políticos que han fracasado en su nos, ya España tenía madurez de historia, comunista ni en conseguir el amable apoyo de jefatura, explican su ineptitud y cobardía alehabía navegado todos lo s mares, guerreado, y subterráneos poderes internacionales. Ya ve- gando en su defensa que ellos seguían la opino por su ambición de Estado, y fatigado a mos cómo las huelgas que se hacen pasar como nión pública Ellos han pospuesto su función la Historia nu, -eva con proezas dignas de la de tipo económico sirven fines políticos inter- directriz al chismorreo y al resultado de una epopeya clásica. Pero, en verdad, que no ne- nacrcmalfs. Ya vemos cómo se rebaja el res- encuesta. cesitamos nosotros los estímulos del pasado peto a la raza blanca, y cómo la victoria soEsta corrupción de la opinión pública ha para sentirnos orgullosos, sensata y plenamen- bre el principal país vencido amenaza cotí di- causado grandes estragos al crear un ambiente orgullosos, le nuestro ser y posición. No vidir a los vencedores. Ya hemos visto cómo te de fatalismo. Una organización cómo la apelamos ai pasado para sentir la satisfacción los mismos que se creen autorizados a repu- Asociación de Manufactureros que se presende nuestro presente. diar nuestra severa administración de justicia ta como directora de la lucha para la retenMiramos a los demás, nos miramos nos- no han podido ni querido evitar en su propia ción del sistema capitalista en los Estados otros, nos exigimos mucho, acaso más de lo casa, o en los países que ocuparon, venganzas Unidos, ha empleado durante varios años la que a los otros pediríamos, y sentimos el rápidas y sentencias irremediables, ejecutadas encuesta para decirle al país de qué dirección santa orgullo de ser e s p a ñ o l e s Aislán- por siniestras cuadril! as de criminales enva- venía el viento de la opinión pública para donos en todas las realidades de nuestro pre- lentonados. Y no sentimos envidia, cierta- que ellos siguiesen la misma dirección, pero con más cautela. sante, con cuenta exacta de partidas y contra- mente. Ahora aparece el primer libro auténtico sopartidas, que bi en sabemos que el mundo no es Balance, examen de conciencia, mejor. Com- bre España que se ha publicado en estos años. vn Paraíso ni siquiera agradable Utopía, hecho el balance, y si se quiere, examen de con- paramos nuestra situación con la ajena. Sobre Se trata de Misión de tiempos de guerra en ciencia, nos parangonamos orgullosamente Jos que todo lo tiem- n- -oro, recursos materia- España, por el profesor Carlton Hayes, qua con cualquier nación y con cualquier Estado. les incontables, privilegiado acceso a todos los fue nuestro embajador en aquel país durante Nuestros problemas, por grandes que sean así mercados- pesan problemas pavorosos y el el mandato de Roosevelt. Es interesante estuen lo interno como en lo exterior, son míni- fantasma del hambre se aparece aún más cor- diar los hechos tal como han pasado por su mos, comparados con los de los otros países, póreo que aquí pudiera presentarse. Tanto de mesa de despaiqho, en contraste con la opicuyos estadistas han caído en lias propias gloria como de dolor tuvo nuestra guerra in- nión pública que ha sido creada en Moscú trampas de su doctrinarismo y luchan con sus terior, pero supimos administrar la victoria y Nueva York. He aquí el propósito de Hayes: antecedentes para sostener un mínimo de au- propia afrontando con ella la tremenda co ...No quisiera aparecer ni inclinado ni con. toridad. La victoria, apenas obtenida por el yuntura de la guerra mundial. Y fuimos leaesfuerzo generoso de sus soldados, -comienza les con todos, porque lo fuimos con nosotros trario a ningún partido o facción interna. Naa esfumarse como positivo logro. Razas infe- mismo? En nuestro orgullo está nuestra fuer- cionalistas, monárquicos, republicanos, sociariores se alzan contra los vencedores occiden- za. Para que sintiéramos pesadumbre ante los listas o comunistas. Quiero dejar la- guerra tales y no hay desmán a que no se atrevan ni males propios, sería preciso que el mundo nos civil española a la Historia, y el futuro de provocación a que no recurran. Hasta los he- ofreciera un panorama mejor que el nuestro. España a los españoles. Perq ios pocos que hacen ruido no quieren breos se sienten belicosos y quieren cobrar el Ganamos en la comparación. En lo espiritual barato a los que tan cara obtuvieron la victo- e imponderable, en lo histórico y en lo. actual dejar España a loa españoles, y así como ria. Y es que ésta, por legítima que al cabo no con vano y delirante orgullo racial, en lin- tampoco quieren dejar Argentina a los argensea, necesita una fuerza moral para sostenerse des de xenofobia, sino con muy sensata e ín- tinos o China a los chinos. Desde los salones pasadas las horas- de común peligro. Compa- tima satisfacción, los españoles estamos con- nocturnos de Nueva York les gustaría, no ramos los motivos clásicos de nuestras gue- tenfos al comparamos con los demás pueblos. sólo recorrer, el mundo, sino cambiar todos rras en Europa, los gestos nobles de nuestros Y defendemos nuestra paz. No aspira a más los pueblos modelándolos a imagen de una caudillos ant? los vencidos, desde Granada a quien se siente buen vecino... de quiera sepa Nueva York intelectual. El problema con el cual hubo de enfrentarse Carlton Hayes duBréda, pasando por Pavía- y advertimos cómo respetar la vecindad. rante el tiempo que estuvo en España fue el más allá de la fuerza de nuestros capitanes de descubrir desde su departamento de Esta- y la acometividad de nuestros infantas el esdo si él estaba allí para ayudar a ganar la píritu sostenía la estrategia, de España sin penguerra a Franco todo sar en el aprovechamiento mercantil de los EL REY CRISTIAN DE DI posible, manteniendo para ser objeto lo neutral o lo estaba de todos campos de batalla. Quizá por eso el rencor los vaivenes de la sintética opinión pública perdura en los otros a través de. los siglos: NAMARCA, ENFERMQ de Nueva York. El se extrañaba muchas veporque al que no hubiera sido capaz de teces, como dice en su libro, si estas excitantes PADECE UNA PULMONÍA nerlo, el gesto generoso le afrenta más que la curiosidades de esta gran ciudad estaban más estrecha rendición de cuentas. Acaso si Bo 3 t Ccpsnhague 25, 10 mañana. La radio interesadas en sacar la ropa sucia de Franco dil no hubiera podido salir libremente de Es- anuncia que el Rey Cristian sufre un ligero o en ganar la guerra con el mínimo de pérpaña para embarcar hacia nueva vida, e hu- ataque de pulmonía, consiguiente a un fuerte didas de vidas americanas. Quizá los que forbieran recordado menos su proceso y su en- resfriado. El e s t a d o general del Monarca jaban la opinión pública no se conocían a sí juiciamiento que sus lágrimas y su suspiro le- -añade- -es satisfactorio. -EFE. mismos porque no tenían otra cosa en gué giendario; si Francisco I, en lugar de ser regio perder el tiempo. huésped en un palacio que puede exhibirse EL ESTADO DEL EGREGIO ENFERMO NO con orgullo, hubiera sido prisionero en na HA VARIADO TODA EMPRESA que cese en el desarrollo ele fortaleza, desposeído de; sus atributos, y obligado a comer sobre el propio. camastro en una Copenhague 2 o noche. El estado de sa- su gestión deberá ponerlo en conocimiento d sola y misma escudilla con una cuchara de lud del Rey Cristian de Dinamarca no ha va- la Delegación del Instituto Nacional de Prerepalo, seguramente hubiera sido menor la es- riado esta tarde, según el boletín médico. El visión, a fin de que no sea incluida en ladel lación de Empresas morosas en el pago tupefacción de la Historia; si el marqués de ilustre enfermo continúa con fiebre y con se- Subsidio Familiar, evitando asi. posibles tcclajSpínola no hubiese hotiradq -áescutierto, y. senta y, cuatro pulsaciones por minuto. rrEFE, mariones, ORGULLO DE FORJADORES DE LA OPINIÓN

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