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ABC MADRID 02-08-1945 página 12
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ABC MADRID 02-08-1945 página 12

  • EdiciónABC, MADRID
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A B C. J U E V E S 3 I) B A G O S T O DE J 94 Í EDICIÓN DE I A MASáNA, PAC? 12. cha la voz graciosa, ágil y segara de la muchacha rubia que nos; ha hecho olvidaj, en una noche sin briía, los lemas tristes que plantean los hombres y el hosco azote de una- temperatura que nos quiere robar hasta el suer ño. -JULIÁN CORTES CAVANILLAS. A; B C E. N PARÍS Monsieur Pimienta tiene una iniciativa -A ff C EN LISBOA La obra colonizadora de Portugal Lisboa i, 12 noche. (Crónica de nuestro redactor corresponsal. Entre todos los actos que el Gobierno portugués ha celebrado en las últimas semanas, -acaso ninguno supere en importancia a la acción desarrollada en Angola y Mozambique ¿por el ministro de Colonias, a. cuyo viaje tuye ocasión de referirme anteriormente. Alífera se encuentra recorriendo la colonia de Mozambique, no la mayor, pero sí, quizá, la más adelantada del Imnerir portugués. Mozambique sostuvo en el siglo pasado una vida difícil, pues se unían, á- la insurrecciones indígenas, ios conflictos, siempre, sordo, s, pero siempre latentes, de los países circundantes. Portugal acertó plenamente en su política: supo no cedef jamás ni un- milímetro de- territorio, y, en cambio, negociar siempre con generosidad las concesiones económico- administrativas, que. uponían, a la! larga, una gran labor de colonización facilitada por el capital extranjero, y que siempre revertía, en favor de. aquellos territorios portugueses. Las compañías Mayestáticas, con derechos s emisoberanos, fueron un aliciente para la inversión de capitales y la realización de obras públicas, que el Erario portugués de entonces lio hubiera soportado. Y todo esto revertió ya a la plena soberanía de es; país, pues ninguna de tales concesiones ha sido prorrogada al llegar al término de su vida legal originaria. 1 Otra de las grandes obras realizadas en común, con las- autoridades de. Africa del Sur y ios medios financieros ingleses establecidos allí es el ferrocarril de Pretorio a Lorenzo Marques que canaliza, hasta este gran puerto de- Mozambique toda la enorme producción del Transvaal. Para celebrar ahora el quinto año de vida que este ferrocarril tiene ya, el mariscal acudió a la colonia portuguesa, donde le esperaba el ministro de Colonias lusitano. El viejo soldado y gran hombre de Estado habló con amplitud. de las relaciones entre los- pueblos del Afr- ica meridional exaltantío con entrañable entusiásmalas relaciones entre la. Unión Surafricana y Mozambique, que ha contribuido enormemente- -incluso con la cesión de trabajadores- aí desarrollo de la economía de Rcdesia y Transvaal. El mariscal se ha- complacido últimamente en destacar que esos países del África meridional constituyen hoy un ejemplo de buena vecindad para el mundo entero. Ellos son un, centro de paz que se mantiene sin el menor recelo de mutuas agresiones a través de todas las guerras- de, este siglo, y lo consiguen precisamente por la confianza que entre unos y otros países ha determinado una incesante y generosa colaboración entre ellos, queden definitiva, no hace más que beneficiar a cada uno. Hay un campe especial en que los Estados. y territorios del África ¡meridional- -razonaba el mariscal Smuths- -pueden dar una singular contribución p. ija el beneficio humano: el campb ¡de las relaciones entre blancos y negros; cada cual entra en el trabajo común de contribución indispensable para el bien general. Al cor r e r de los tiempos la estabilidad de los blancos en África dependerá de un inoáus videMi basado en la justicia, concediendo a los pueblos- indígenas de- este Continente oportunidad ipara el pleno desenvolvimiento de stf capacidad. Por último, el mariscal Smuths ha exaltado, y con. razón, la amistad entre Portugal. y los países británicos a través de esta alianza an- glo- lusa que, en definitiva, es el origen de lo que el, mariscal llama un record de buena yecindad del que los surafricanos se muestran orgullosos. -MARINO RICO. París i, i. tarde. (Crónica de nuestro enviado especial. No conozco personalmente a ftf. Pimienta. Mi imaginación le pinta 1 con rasgos en consonancia con su apellido, tan picante y tan castellana; en realidad debería- lia, mars póivre, ya que el hombre nos tiene poco carinó a los. españoles, como si quisiera vengarse del destino que le puso un. revulsivo, por nombre, en clara y castiza parla de Castilla. Monsieur Pimienta cre j, yo que debe ser u n hombrecillo inquieto, verdoso y un poco bizco, se imagina nieto del frenético pafalítico Couthdn, aquel que r ¿hizo transportar un día de Termidor a la plaza de Belle- Court, de Lyon, para dar- martillazos a los edificios que mandaba derribar, y apenas es sobrino de Thoréz, el furtivo viajero de. 1940. -Monsieur Pimienta es asambleísta y acaba de ser recusado, por- el abogado- defensor de- Pétain: como jurado- de la causa que. se sigue al mariscal Esto le ha causado un profundo disgusto, y para no perder actualidad y mostrarse amable y Simpático ha ideado una proposición, que tampoco le haresultadp. Monsieur Pimienta é í hombre a! que le gusta gasear y hasta sírber una cepita de jugo de. írutas- -la bebida, veraniega, antialcohólica y única, fuera del breve, coto de. los bare, s americanos- -por esos bulevares y terrazas. Espíritu observador y atentó a la, comodidad y bienestar de. sus- conciudadanos, M, Pimienta ha observado en sus ratos de ocio y camino que las mujeres fuman. Sí, fuman; él las ve. muy sentadas, con tal cigarrillo en los labios y la cajetilla sobre el velador, yia- s ve encender uno después de otro, sin dar paz al deseo de hunío azul. En su celebro de hpmbre de Estada s ¿forjó uña pregunta incandescente: ¿De dónela sacan el tabaco estas, chicas? Es un problema Y la respuesta llegó empujando a distintos razonamientos: Las pobres están en las garras del mercado- negro. Entonces M. Pimienta arrojó sobre la goma de su níesa los treinta y cinco francos que- cuesta él centilitro de jugo: de frutas con hjélo y corrió a la Asamblea Consultiva, sin detenerse hasta ponerse delante del ministro de Hacienda. -Voy, querido señor ministro- -le dijo- -a hacer una proposición. -Encantado -respondió, M. Pléven, un tanto distraído. -geguramerite usted la aceptara, colmando m ¡esperanza. El ministro apartó- de stt cerebro los cien problemas que le embargan y prestó más atención a M. Pimienta. -De, qué se trata. -De- dar una tarjeta de tabaco a las fumadoras; las pobres... Monsieur Heven no tuvo que hacer ningún esftierzo. para rnatar la bella iniejativa. Cora- placiente y benévolo explicó a su interlocutor que a pesar de los esfuerzos de la Administración del Monopolio no es posible dar a los hombries más que una décima parte de lo que consumen. Los hombres- -añadió -futrían en una proporción del 8o por ido y las mujeres, no llegan al 15. Desde octubre ya a concederse un paquete más, y el deseo de M. Pimienta pone en riesgo ío que. el ministro llama la marcha paralela de las cosas Ahora concluyó Pleven- si usted lo desea ponga su proposición al voto de lá Asamblea. Monsieur Pimienta se quedó engurruñado como, un grano de tres cosechas pasadas. Y respetuoso, con 1 Poder, guardó silencio. El podría haber dicho al consejero que eso de que las mujeres fuman en un 15 por 100 de su número es un error que denota falta de. mundó. Todas las damas que conoce M. Pimienta fuman y las chiquillas que admira por ahí, no digamos... Y no existe agualdad en el trato. Las electoras de M. Pimienta han votado toteo un hombre y tienen derecho al cigarro, ¡no faltaba más! La repulsa ha. arrebatado a antología igualatoria un discurso magnífico; ¡la de cosas bonitas que podrían decirse á propósito, de la carta. de fumador para, la muj r en plenitud de derechos políticos y ciudadanos! No tiene suerte este año. M. Pimienta. Le recusan como jurado, -arrebatándole el honor 4 é votar la sentencia contíra el Mariscal, y eV ministro de Hacienda no le hace demasiada caso en su trasceadental iniciativa. A lo peor sus electoras tampoco se lo4 agradecen; elhí quizá tendrían más interés por la manteca para sus fritos que gor el humo para sus sueños. Las mujeres son así. -Lujs DE ARMIÑAN. SUSCRIPCIÓN PARA fL MONUMENTO AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN EL CERRO DE LOS ANGELES Suma anterior, 680. 4,75 pesetas. -Luisa Manso, condesa viuda, de las Cabezuelas, 1.000; Dolores Baillo Manso, 1.000; Vn devoto, 100; E. S. y familia, muy agradecidoj, 100; Familia de Herrero, en acción de gracias, 100; M. J. de V. en cumplimiento de una promesa, 50; P. L. 25; Jesús Abadía y familia, 25; Manuel Sauras, 25; Lolita Cuenca y Vicente Herreros, 25; Ángel Martín cíe los Reyes, 25; F. P. E. 25; C. L. JP. 25; María Menéndez, Luis Vela Sánchez, de Ciudad Real, por gracia obtenida, 25; Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío. F. P. Recio, 25; Familia de Alvarez, 25; Una devota, 25; Por un favor recibido, 25; Una devota. B. A. 25; Familia Pérez IVIoriano, por favores recibidos y amparo, 15; Familia Paño, 15; V. V. devota del Corazón de Jesús, 15; Dolores Bobillo de P. Sanz, de Valíadolid, 15; Man- Pili, 10; Por una promesa, T. B. F. 19; Un devoto del Sagrado Corazón, por dos favores alcanzados, 10; Una madrileña del 82, por su salud, 10; Un estudiante- por éxito exámenes septiembre y fa vores, 5; Andrés Rodríguez, Vaiuero, de LJaares, 5; Una devota, 5; Una donostiarras; 5; losé Borrego Réjano, 5. -Total, 6.83,479,75. Los donativos se reciben en la Administración d e A B C Serrano, 61, todos los días laborables de nueve de- la mañana a ocho de la tarde. sus comjras en cualquiera de los méjpr res comercios dé Madrid. No precisa pago adelantado ni fladori Financiación y Crédito Comercial, S. A. Preciados, 33. 9 a 1 y 5 a S. FIN ANCO Empresa iacional Calvo Sotefo C O Ñ CU R S O de proyecto, suministro y montaje de los desagües de fondo de una presa en el río Montero (Ciudad Real) Las, proposiciones se admitirán en la Secretaría General de la Empresa, Alcalá, 16, Madrid, donde estarán expuestos los documentos y Condiciones- del. concurso todos los días hábiles, de diez a doce da la ñiañana, desde hoy hasta- él día 8 de septiembre próximo.

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